Llegué por fin a la escuela después del protector abrazo de mi madre, me senté en una banca para esperar a Antonio, quizá sea demasiado pronto pero sentía que por fin tenía un amigo. Escuchaba música con el volumen demasiado alto, perdida en mis pensamientos. Sentí que alguien se sentó junto a mi, era una chica de cabello largo, castaño, un castaño casi rubio, ojos claros y grandes, con una sonrisa hermosa y contagiosa. Me quité un auricular.
-Hola- le dije, ya que la vi observándome detenidamente de la misma manera en que la vi a ella.
-Hola- dijo entusiasmada- ¿acaso eres nueva en la escuela? Jamás te había visto por aquí.
-Bueno, se podría decir que sí.-
-¡Que bien! Mi nombre es Elena Manson.- dijo tendiéndome su mano, la tomé.
-Rachell Russell, un placer.-
Nos sonreímos un momento y ella por fin habló.
-¿En que grado estás?- no quitaba la sonrisa de su rostro, era demasiado contagiosa.
-Tercer grado, secundaria. ¿Y tú?-
-También estoy en tercer grado, es raro que no nos hayamos visto antes, ¿sabes? Debes ser de otro grupo- parecía nerviosa, como si quisiera agregar algo más.
-Es genial, y eso creo, no te he visto en el mismo grupo que yo.- le sonreí de nuevo.
-Si, lo sé- dijo girando los ojos de manera graciosa- ¿te gustaría pasar el receso conmigo?-
-Claro, me agradaría.-
Ambas sonreímos. En ese momento Antonio llegó y me saludó. Miró a Elena y la saludó sentándose a un lado de nosotras. Los tres nos quedamos callados un momento hasta que sonó el timbre. He notado que Antonio llega segundos antes de la hora para ingresar a las aulas.
Me despedí de Elena con un simple "nos vemos luego" y seguí mi camino a lado de Antonio.
-Te tengo respuestas- dijo Antonio en un tono de susurro.
-Comienza- le dije imitando su tono inicial.
-Bien, él estudia en tercer grado en una escuela diferente, pero próximamente lo cambiarán a ésta. No tiene novia, que creo que es una de las cosas que más te interesan, y finalmente su nombre es Ryan.-
-Ryan- repetí- es interesante.-
-¡Ni que lo digas!- dijo levantando las manos- además no fue tan sencillo averiguarlo, podrás ir a mi casa hoy en la noche a cenar conmigo en agradecimiento.-
Sonreí. -Por supuesto, te lo agradezco demasiado.-
No dejaba de rondar su nombre en mi mente, "Ryan", encaja a la perfección con su aspecto, esos bellos e intrigantes ojos verdes, esa sonrisa tan cálida que me provoca confort, ese cabello tan obscuro despeinado, la calidez de sus manos al tacto con las mías... Simplemente lograba erizarme la piel.
Aquél día, las clases estuvieron tranquilas, quizá fue porque anduve perdida en mis pensamientos, tontos pensamientos en los que imagino un futuro junto a aquel "chico misterioso", ahora que sé su nombre no dejo de escribirlo en el borde de mis libretas; "Ryan". Queda tan lindo escribir "R&R", corazones alrededor... Un momento, ¿que rayos estoy haciendo? Ni siquiera lo conozco, no he hablado con él más que aquella vez en la cafetería de la escuela cuando tropecé por estarlo observando como idiota. No es posible que me guste con sólo imaginarlo, imaginar su voz en otras frases y no sólo con un "deberías tener más cuidado", ¡vaya! Es tan encantadora, tan grave, tan inolvidable. Recordar su aroma es tan... ¡Momento! Lo estoy haciendo de nuevo, ¡no puedo creerlo! Lo bueno es que en la clase de formación la profesora se la pasa hablando, nada interesante, podré leer el tema después.
Las imágenes de aquel encuentro entre él y yo vuelven a mi mente, logro percibir su aroma de nuevo. Salgo de mis pensamientos cuando se anuncia la hora del receso. Recuerdo que quedé con Elena de vernos a esta hora así que me dirijo a la cafetería acompañada de Antonio, su compañía me hace sentir cómoda. Cuando llego la veo a ella, es demasiado guapa a mi parecer.
-¡Chicos!- dice dándonos un abrazo a ambos.
-Hola.-
-Hola.- decimos Antonio y yo al unísono.
-¿Les parece si vamos al campo deportivo?- dice con cara entusiasmada.
-Por mi no hay problema- dice Antonio. Ambos voltean para verme.
-Seguro, pero me gustaría comprar algo de comer antes, si quieren adelántense y yo los alcanzo en un momento.
-Allá te vemos- me dice Elena con un gesto que no logro describir, es una mueca con mirada perspicaz que me estremece. Antonio se limita a guiñarme el ojo.
Estoy formada para comprar, noto que hay un grupo de chicas a lo lejos observándome pero las ignoro. Es mi turno de pasar, compro unas galletas y me dirijo al campo, tengo que pasar a un lado de ese grupo de chicas, es inevitable notar como me miran, como si fueran perfectas sólo por ser las chicas más "populares" y "guapas" de la escuela. Es el grupo de Jenn.
Paso decidida a no bajar la mirada como suelo hacerlo. Lo logro, pero no puedo evitar mirarlas, es entonces cuando comienzan a decir cosas estúpidas de mi. Las ignoré y me dirigí al campo pero una de ellas me pone el pie enfrente y caigo al suelo. De nuevo quedo como tarada en el suelo, ellas se burlan de mi, me levanto y tiro a Jenn del cabello demasiado fuerte, ella grita, estoy encima de ella golpeándola con toda mi fuerza. Sangra y sus amigas corren por un prefecto. Le corrí el maquillaje, la tengo llorando rogando que pare, entonces noto que de nuevo lo estoy imaginando. Cuando vuelvo a la realidad sigo en el suelo, me levanto, me sacudo y estoy dispuesta a irme hasta que Jenn me llama "tarada". No volteo, sólo me detengo, me resisto las ganas de golpearla y continúo mi camino.
Cuando llego con Antonio y Elena están riendo, me ven.
-¿Qué te pasó? ¿Porque tardaste tanto, cariño?- me dice Elena. Ella es verdaderamente adorable.
-Jenn.- frunzo el ceño.
Antonio es el único que comprende, Elena sólo me ve con cara de desconcierto y él le explica.
-Ya entiendo, creo que ahora no soy la única "enemiga" de Jenn.- dice haciendo comillas con los dedos.
-Jaja, creo que no cariño.- digo imitando su tono guiñándole un ojo.
Ambos ríen.
-Creo que seremos muy buenas amigas.-
-Ya lo creo.- sonrió.
-¿Y yo donde quedó?- replica Antonio.
Reímos. Nos pasamos lo que queda de receso diciendo tonterías. Me alegra conocerlos.
***************************************************************************¡Hola! Quizá no les importe pero no he muerto, solamente no había tenido ganas de finalizar el capítulo. Gracias a todos los que me esperaron:'3 espero hayan tenido unas felices fiestas y hayan iniciado bien este 2015, de verdad prometí escribir más seguido capítulos, eso espero, fue uno de mis propósitos (digo, por si tenían el pendiente :v). No los abandonaría, los amo por hacer que esta novela tenga una razón de ser, GRACIAS POR LEER Y VOTAR❤ (sí, estoy gritando). Ya somos 181 :') no saben lo feliz que me hacen, son los mejores, me gustaría que votaran para así saber que les gusta y eso. No sólo sean lectores fantasma. Comenten que les parece:3
GRACIAS SI LEÍSTE HASTA AQUÍ.
Atte: Amor Galván ✌ (agreguen en Facebook é.e)
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Creo en mi.
Romance¿No les ha pasado que creen que con una cosa "insignificante" se viene su mundo a abajo? Una traición, una decepción, volver a la realidad... A la cruda realidad, en donde el mundo es lo más hipócrita y la sociedad es más destructiva que una bomba...