TᴠDᴜsᴛ; [ᵃⁿᵍᵉˡ ᵈᵘˢᵗ ˣ ᵛᵒˣ]

~ 6 ~

Mientras tanto. Vox después de lo sucedido, estaba decidido a ir a buscar a Angel y hablar con el. Sin embargo no solo lo quería a el, tambien quería a Alastor lejos de Angel.
Si bien no tenía ganas de matarlo de una vez por todas, tan solo quería a Angel para el. Sabía como Alastor había estado jugando con los sentimientos de Angel Dust y no hiba a permitir que Angel cayera en su juego.

Del estudio se teletransporto hacia el Hotel, donde al hacer presencia en la sala del hotel, hizo temblar a todos los demonios que se encontraban en la lugar.
Algunos se retiraron rápidamente otros solo lo veían asustados, era bien conocido en el infierno que Vox poseía más poder que Alastor.
Nuevamente, se teletransportó a los pasillos donde se encontraban las habitaciones, hiba a tocar una puerta al azar cuando un grito se escucho en el piso de arriba de donde se encontraba. Vox se teletransporto rápidamente donde provenía aquel ruido, llevándolo a una habitación con tapiz y objetos rojos, todo era rojo. Sin embargo eso no fue lo que captó la atención del demonio. Si no fue la escena de ver a Angel en el suelo con una herida en el cuello, una herida muy profunda y dolorosa de donde brotaba borbotones de una sangre magenta.

- ¡Vox! - Angel había notado la presencia del demonio en la habitación -

- Angel... - el nombrado murmuró suavemente su nombre -

Este se levanto en seguida del suelo y corrió hacia el demonio de ojos brillantes.
No sabía quien, pero lo haría pagar por lo que le hizo a Angel.

Unos alargados tentáculos salieron de una oscura esquina de la habitación, envolviendo el cuerpo de Angel y arrastrándolo hacia un lugar alejado de Vox.

- Toda esta mierda termina ahora Alastor - hablo el demonio con voz amenazante -

- ¡Claro! Tu te vas de aquí y me dejas a Angel, y todo termina con un final feliz. ¿Que dices?

- ¡N-no! ¡Vox mátalo! ¡Acaba con el! - soltó el arácnido quien se encontraba arrinconado en otra esquina de la habitación -

Aquellas palabras de odio sorprendieron a los otros dos presentes, y tal petición de Angel Dust solo afirmaba una cosa, ya no quería a Alastor, lo odiaba ahora, no quería estar con el. Alguna vez sintió amor hacia el, ya no.

- Angel... - Alastor le hablo con voz cortada -
Al darse cuenta que su plan había fracasado y ahora Angel lo odiaba, solo tenía que disculparse y decirle la verdad.

- Y-yo... Lo siento...

- ¿Lo sientes? Alastor yo en serio creí que me querías, pero solo te acostaste conmigo para luego ilusionarme y tratarme como basura. Jódete y vete a buscar otro juguete, ya no quiero nada contigo.

Vox se sintió algo animado por las palabras de la araña, y ese animo aumento cuando esta se acercó hacia el.

- Esperaba matarte aquí mismo, creo que será para la próxima - fueron las palabras de despedida del demonio televisor -
La furia de Alastor aumentó, no soportaba haber fracasado y que Angel lo odiara y no soportaba que su más grande enemigo tuviera a su Angel.

Un movimiento, basto para destrozarlo todo.
Un grueso tentáculo se dirigía rápidamente hacia la espalda de Vox para apuñalarlo. Digamos que el que mejor reflejos tiene es Angel.

- ¡Mierda! ¡No! - grito Angel para luego empujar a Vox y ser el quien recibiera el ataque -

- ¡Angel! - se escuchó la voz del demonio ciervo.
Acababa de tomar su peor decisión.

Se escucho un fuerte alarido de dolor por parte del arácnido. La sangre de un color magenta brillante salpico los muebles de la habitación, cualquiera que entrara pensaría que era pintura, pero no era así.
De los ojos de Angel salían lágrimas, su mirada expresaba horror, su cuerpo yacía inmóvil en el aire, en el centro de su abdomen tenía un negro tentáculo atravesándolo.
El tentáculo se retiro, saliendo de Angel dejándolo caer fuertemente en el suelo.