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Orión y Walburga Black esperaban a sus primeros hijos, los mellizos Sirius y Adhara. Estos dos serían grandes en el mundo mágico, siendo los marqueses del imperio Black, puesto que después de una larga espera nació un varón.
Ambos serían primos de Andrómeda, Bellatrix y Narcissa Black, hijas de Druella y Cygnus Black, primos de Orión y Walburga.

Durante la infancia de Sirius y Adhara, nació Regulus y los tres iban para todos lados juntos, jugaban, corrían y bromeaban, pero cuando llegan Druella y sus hijas ellos tenían que guardar la compostura porque Walburga se enojaba si ellos hacían algo mal.

Sirius durante su niñez siempre fue unido a Andrómeda y  Ady miraba con algo de recelo esa actitud de ambos. En las cenas familiares se sentaba Orión y Cygnus a la cabeza de la mesa mientras que Walburga y Druella se sentaban a la derecha de sus esposos, después de esto se sentaban los hijos, Sirius siempre quedaba frente a Andrómeda y por claras razones eso le calaba a Adhara pero Regulus siempre trataba que su hermana mayor siempre estuviera tranquila.

Todo cambio cuando Ady y Sirius entraron a Hogwarts, a ella le dolió dejar a Regulus, pero sabía que el año que entra él entraría al colegio.

Andén 9 ¾.

Orión y Walburga llegaron al andén junto a los mellizos y comenzaron a hablar con ellos.

-Recuerden que deben quedar en Slytherin como los Black que son, deben hacer sentir orgullosos a todos los Black, tienen una gran responsabilidad sobre sus hombros y deben hacerlo si o si, de otra manera serán traidores a la sangre -dijo Walburga y se apartó para ir con Druella.

-Los Black han quedado en Hufflepuff y Ravenclaw y no son considerados como traidores a la sangre porque han estado en esas casas -dijo Orión.

-¿No hay problema si quedamos en otra casa? -pregunto Adhara

-Claro que no cariño, por mi parte no lo veo de esa manera pero su madre lo mira diferente -dijo Orión y miro a Sirius- Sé que piensas diferente que nosotros pero esfuérzate para quedar en Slytherin por favor hijo.

-Una cosa es lo que diga yo y otra es lo que dicte el sombrero -respondió Sirius.

-¡Suban al tren! -llego Walburga.

Los mellizos subieron al tren cómo lo acordado, miraron pasar a sus primas que se fueron a otro vagón, las tres quedaron Slytherin así que se suponía que irían al vagón de su casa.

-¿Crees que quedemos en la misma casa? -pregunto Ady.

-No -se miraron- Yo no pienso igual que ustedes, yo no quiero quedar en Slytherin, quiero quedar en Gryffindor, quiero algo nuevo, no lo que todos ustedes quieren -Ady bajo la mirada- No me malentiendas quiero quedar contigo pero sé que iremos por caminos separados.

- Sabes que tampoco soy como ellos -respondió Adhara.

Guardaron silencio y entró un chico moreno con lentes junto a un castaño con heridas en su rostro.

-Hola, ¿Podemos sentarnos? -dijeron.

-Claro -dijo Sirius.

-Soy James Potter y él es Remus Lupín -dijo el de lentes mientras extendía su mano a los mellizos y el primero en tomarla fue Sirius.

-Un gusto, soy Sirius Black y ella es Adhara Black -ambos niños se sorprendieron al escuchar sus apellidos.

-¿Black? -dijo Remus

-Si -respondió Asy - Somos Black

-Ustedes son importantes en el mundo mágico -dijo James

-Si, lo somos -dijo Sirius- Pero no nos importa en absoluto.

-Solo que tenemos demasiadas obligaciones por lo mismo que se espera de nosotros -dijo Ady

-Pero ustedes pueden hacer su destino -dijo Remus captando la mirada de Adhara, haciendo que se sonrojara.

Horas más tarde.

Era el momento de la selección

- Adhara Black -dijo Minerva McGonagall, la subdirectora de Hogwarts.

-Vamos Ady -dijeron Sirius, James y Remus.

-Te quiero -le dijo ella a Sirius y subió al taburete.

-Una Black diferente -dijo el sombrero en su cabeza- La inteligencia de un Ravenclaw junto con la valentía de un Gryffindor y el cariño de un Hufflepuff, tu familia siempre a estado en Slytherin y tú deseas con todo el corazón estar en esa casa, pero ¿En realidad quieres hacerlo? -pregunto él sombrero.

-No -respondió Ady en su mente- Pero debo quedar ahí, sé que Sirius no quedará en esa casa, pero no puedo dejar a mi hermano menor.

-Tu mereces estar en Hufflepuff -dijo el sombrero- Porque no deberías sufrir la maldición Black más de una vez -guardo silencio dejándola confundida ¿Maldición Black? -¡SLYTHERIN!

El uniforme de Adhara cambio para tomar el verde escarlata y plata que caracterizaba a la casa. Ella se levantó del taburete y mientras miraba a Sirius se retiró hasta su mesa, mientras la recibían Narcisa, Bellatrix y Andrómeda con un abrazo.

-Sirius Black -él comedor quedó en silencio total de nuevo.

Ady miraba a su hermano y rezaba por qué Sirius quedará en la misma casa que ella, él es su hermano y eso no cambiaría nada, a menos que los separaran.

-¡GRYFFINDOR! -grito el sombrero y la mesa de Slytherin comenzó a llenarse de susurros, hechos principalmente por Bellatrix y Lucius Malfoy.

-Remus Lupin -continuo McGonagall y después de un tiempo, el sombrero lo mando a la misma casa que a su hermano, seguidos por James.

-Por lo menos no estará solo -dijo Ady a Andrómeda después de ver cómo se abrazaban los chicos.

-Pero tú si lo estarás -respondió Andrómeda- ¿Conoces la maldición Black? -pregunto ella.

-No -dijo Ady-  Ni siquiera sabía que teníamos una maldición.

-Porque no es muy acertada -dijo Andy- La maldición Black dice que un descendiente con el corazón más puro sufrirá la maldición después de ser seleccionado a su casa, siendo separado de sus hermanos y después de su matrimonio arreglado, será traicionado por un miembro cercano de la familia traicionando la lealtad de la dinastía.

Ady la miró -Escuche sobre ella -sonrío- Pero no pensé que fuera verdadera.

-Nadie la a vivido, por lo cual se dice que es falsa -Andy toma la mano de Ady - Pero ninguna maldición es inventada, tal vez alguien al inicio de la familia tuvo el corazón puro y la sufrió -sonrío- Hola Alec.

-Hola señoritas -dijo Alec.

-Alexander Nott -dijo Ady sonriendo.

- Adhara Black -respondió él- Mi dulce y bella mejor amiga -la sudo con dos besos en la mejilla.

Mientras que al otro lado del comedor, en la mesa de Gryffindor, Sirius se encontraba mirando.

-¿Quién es ese? -pregunto James.

-Es Alexander Nott -respondió Sirius- Mejor amigo de Ady y mío a decir verdad.

-¿Es algo de tu hermana? -pregunto Remus.

-No me digas que mi pequeña hermanita te a dejado flechado -dijo Sirius riendo.

-Claro que no -respondió Remus.

Los mellizos Black se miraron y sonrieron, aunque sabían que no quedarían en la misma casa, son hermanos y deben seguir siendo cercanos como la familia que son.

Un Amor Imposible || Época Merodeadora Donde viven las historias. Descúbrelo ahora