"LLAMADAS"

2K 150 4
                                    

Mientras conduzco veo como Noa mira su bolso sin parar.

- No le cojas ninguna llamada

Ella asiente distraída y se pone a mirar hacia la ventana.

Mientras lo hace yo voy recibiendo distintas llamadas de todas las citas que tenía para hoy.

Las voy cancelando todas con la excusa de un motivo personal hasta que llegamos a mi casa.

Subimos a mi ático y dejo a Noa entrar primero.

Cuando cierro la puerta me deshago de la chaqueta que llevo encima y la cuelgo.

- Puedes dejar tus cosas donde quieras. Siéntate mientras voy a por el botiquín.

Me dirijo a mi baño y saco la caja donde guardo utensilios de primeros auxilios por si algún día llego a casa en mal estado.

Noa está sentada en uno de los sofás, por lo que me acerco y cojo un taburete bajo.

Me siento y agarro la barbilla de Noa con cuidado para examinar la parte afectada.

- No sabia que sabía algo de medicina señor James

- Llámame solo James, ahora no estamos trabajando.

Noa sonríe y veo como se queja cuando toco la mejilla.

Aprieto la mandíbula y busco una pomada para desinflamar la zona.

Mientras aplico la pomada, siento como el teléfono de Noa vibra sin parar.

- Noa, dame tu teléfono.

Ella me lo da sin entender.

Descuelgo y me pongo el teléfono en la oreja.

- Escúchame bien pedazo de mierda, como vuelvas a acercarte a Noa o la toques de nuevo, date por muerto.

Cuelgo sin dar tiempo a responder y le devuelvo el teléfono.

- Será mejor que lo bloquees y evites encontrarte con el.

- James... no hace falta que hagas todo esto, ademas, tu no me conoces de nada.

Sonrío sarcásticamente y le doy la espalda a Noa.

- Descansa, yo he de hacer un par de llamadas.

Me meto en mi cuarto y marco el numero de Alek.

- Hombre, que raro que me llames tu, y mas siendo de día.

- Cállate y escúchame, necesito que vigiles a una persona para que no se acerque a Noa.

- Espera... Noa? Has vuelto a encontrar a Noa?

- Si, habla con Viktor, el sabrá decirte los datos de esa persona, y mantén alerta a mis padres, tal vez vaya a necesitar su ayuda.

- Oído jefe

Voy a colgar cuando su voz vuelve a pararme.

- Cuanto mas vas a esperar para decirle quien eres?

Sonrío y cuelgo sin darle respuesta alguna.

Salgo de mi cuarto y veo a Noa sentada mirando por el ventanal.

Me dejo caer a su lado y le sonrío.

- Vamos a ver, que te parece si vas a darte una ducha, te dejo ropa para que estés mas cómoda y mientras tanto busco alguna peli.

La veo asentir repetidamente mientras una pequeña sonrisa asoma en sus labios.

Enseño a Noa donde se encuentra el baño, las toallas y le dejo ropa para que se ponga cuando salga.

Me tumbo en el sofá y cierro los ojos.

¿Podrá darse cuenta?

No huyo de ti *4*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora