No huyo de ti *4*

"TRABAJANDO EN LAS SOMBRAS"

Salgo de la ducha tras un día agotador y suspiro.

Escucho mi teléfono vibrar continuamente encima de la mesa y maldigo porque seguramente sé quien es el que me está llamando.

Lo cojo y descuelgo para atender la llamada.

- TJ?

- Y quien si no Alek?

Escucho su risa al otro lado de la línea.

- Pasaré a buscarte en una hora, estate preparado para entonces.

- Está bien.

Cuelgo y me dejo caer en la cama.

Cierro los ojos para intentar descansar un poco, pero me es imposible, ya que el rostro de Noa aparece en mi mente junto a la palabra "novio".

Me incorporo y me río mientras me revuelvo el pelo.

- Poco te va a durar...

Me cambio y acabo de arreglar alguna cosa del trabajo mientras espero a que Alek llame.

Cuando recibo un mensaje suyo decido bajar al aparcamiento, donde me espera montado en un ferrari negro con los cristales polarizados.

Me monto en el asiento de copiloto e ignoro la sonrisa tonta que tiene Alek en la cara.

- Conduce y no me hagas darte una paliza.

- Yo también me alegro de verte Tyler.

Miro por la ventana mientras soy llevado al lugar de reunión de hoy.

- Te arrepientes?

Me giro a mirar a Alek sin entender.

- Te arrepientes de haber escogido a la familia antes que a Noa?

Sonrío y vuelvo a mirar por la ventana.

- Jamás me arrepentiría, ademas, pienso tenerla de vuelta.

Mi compañero sonríe y acelera para llegar a nuestro destino, una discoteca del centro de la ciudad.

Entramos por la puerta trasera y nos dirigimos al segundo piso.

Cuando abro la puerta no puedo evitar sonreír al encontrarme con rostros muy conocidos.

Mi madre y mi padre están sentados en un sofá de una plaza hablando animadamente mientras que Cris y mi tía Sabrina están en el de dos plazas.

- TJ! Por fin llegas!

Ruedo los ojos y dejo que mi tía me abrace, nunca se le quitará esta manía.

Miro a mis padres y los abrazo.

- Bien, ahora que mi niño ya está aquí, ya podemos hablar de lo que realmente importa.

Empiezo a escuchar lo que mi madre ha preparado para sus futuros trabajos, pero estoy mas pendiente de lo que sucede en la pista de baile de abajo.

Voy a apartar la mirada cuando veo algo que me llama mucho la atención.

Un pelo rojo, rojo como el fuego.

Y para desgracia mía, no está sola.

Me he levantado sin darme cuenta y estoy mirando fijamente a Noa bailar con su novio en la pista de baile demasiado pegados.

- TJ?

Me giro para mirar a mi madre y recuerdo a lo que he venido.

Me vuelvo a sentar escuchando lo que necesita mientras mi mente solo puede pensar en lo que acabo de ver.