ADVERTENCIA: Este capítulo tiene contenido +18 y la historia no avanzará significativamente, lo puedes saltar si lo deseas.
Narra Ethan
Arranqué el coche para volver a casa pero no podía conformarme solo con aquel beso en la mejilla, así que bajé del coche y antes de que Sienna pudiera cerrar la puerta de casa la cogí por la cintura y la besé.
Esta vez fue un beso pasional demostrándole la atracción que sentía por ella, que era un imán, mucho más fuerte que el de Stella.
Mientras la besaba cerré la puerta detrás de mí y empezamos a caminar hacia las escaleras sin dejar de besarnos, cuando llegamos al pie de estas la cogí en brazos y ella enrolló sus piernas en mi cintura.
Sienna:-Ethan...- Me dijo con la voz agitada. Le di un beso para callarla antes de que siguiera hablado.
Ethan:-Cállate y déjame amarte.- Dije apretando su trasero y entonces ella asintió y siguió besándome como solo ella sabe hacerlo.
Llegamos a la habitación de Sienna y ella se bajó de mi cintura, mientras me quitaba la camisa yo le desabrochaba los pantalones, todo era despacio y suave, no queríamos algo rápido y mal hecho, realmente estábamos disfrutando cada segundo.
Cuando terminamos de quitarnos la ropa ella me empujó contra la cama, cayendo bocarriba, ansioso porque Sienna subiera a la cama conmigo, una vez sentada encima de mí le ayudé a quitarse el sujetador, después de que se lo quitase empezó a besarme el cuello ferozmente mientras yo acariciaba sus senos con las yemas de mis dedos.
Ethan:-Ya te dije que esa ropa interior no era una buena combinación...- Le dije con la voz agitada con tono divertido.
Sienna:-Pues no veo que salgas corriendo...A demás, va a durar muy poco tiempo puesto.- Dijo mientras sonreía de forma pícara.
Nos dimos la vuelta y ahora yo tenía el control, estaba encima de ella, no podía dejar de mirarla a los ojos, esta chica es increíble. Poco a poco ella fue bajando la tela del bóxer y tras esto agarró mi miembro haciendo movimientos delicados hacia arriba y abajo para después ponerse de nuevo encima de mí y bajar sin apuro a mi entrepierna besándolo todo, cogió mí pene para meterse lo en la boca, haciéndome disfrutar cada vez más.
Empezó a hacer movimientos con su lengua mientras metía y sacaba mi miembro de su boca, después de eso la empujé contra la cama para que ella quedara recostada debajo mía.
Ethan:-Ahora es tu turno preciosa.- Dije impaciente por estar dentro de ella.
Le quité aquel tanga del que tanto hablábamos y empecé a acariciar su clítoris y su vagina introduciendo mis dos dedos dentro de ella mientras la escuchaba gemir de placer, Siena movía sus caderas pidiendo más y cuando acabé con la mano quise saborearla aún más, dibujando un pequeño camino de besos hacia su parte más íntima para luego jugar con su clítoris.
Succioné y lamí todo de ella mientras con una mano agarraba mi pelo y con la otra las sábanas, al terminar decidí que era el momento de fundirnos en uno solos, la quería solo para mí, sentir lo que ambos tanto deseábamos así que me posicioné entre sus piernas, me coloqué el preservativo y ella puso mis manos en la espalda.
Entonces me introduje dentro de ella delicadamente, Sienna elevaba sus caderas y la embestí aun más fuerte, en un instante volvió a cambiar quedando encima mía, haciendo pequeños movimientos circulares con su cadera, mientras yo apretaba su trasero contra mí y acariciaba sus muslos sin dejar de movernos.
Tenía la mejor perspectiva de ella, realmente era la mujer más perfecta que podía existir, me encantaba todo de Sienna.
Ethan:-¿Dónde estabas metida hermosa...?- Le dije como pude entre jadeos, sabía que después de esto jamás podría alejarme ella, no podría estar ni un solo segundo sin besarla, tocarla o acariciarla y entonces lo sentimos todo, llegamos a lo más alto, fue el mejor orgasmo de mi vida, su cara de placer no tenía precio y ahí entendí que eso era lo que quería ver toda las noches del resto de mi vida.
Cayó rendida tumbándose en mi pecho y mientras intentábamos relajarnos y descansar no paraba de acariciarme, una vez más tranquilos se tumbó a mi lado.
Sienna:-Déjala Ethan...Déjala...- Me dijo cerrando sus ojos.
Ethan:-¿Que deje qué?- Pregunté sin saber a lo que se refería, no podía para de pensar en lo que acaba de pasar.
Sienna:-A la "Barbie"... déjala y quédate conmigo...- Entonces no pudo más y se quedó dormida junto a mí.
En aquel instante lo entendí todo, supe que Stella a partir de ahora sería historia y solo Sienna sería mi futuro, en poco tiempo se convirtió en la persona que más quiero por encima de todo y nada lo iba a cambiar.
Narra Sienna
Había sido la mejor noche de mi vida, me sentí realmente completa después de hacer el amor con Ethan, todo fue perfecto y sin duda sería inolvidable.
Quizás no debería pedirle esto pero no podía dejar pasar esta oportunidad...Quería que fuese solo mío y decidí dar el paso, necesitaba que dejase a Stella, ahora solo puedo pensar en él, no hay hueco en mis pensamientos para nada más que no fuese Ethan, ni en mi cuerpo...Con él era todo tan diferente y especial...
Había cambiado a mejor, no era la misma persona conmigo que cuando estaba con Stella y sabía que quería pasar toda mi vida con ese chico que me trataba tan bien.
Sienna:-Déjala Ethan...Déjala...-Dije cerrando mis ojos.
Ethan:-¿Que deje qué?- Preguntó sin saber a lo que me refería, estaba algo distraído.
Sienna:-A la "Barbie"... déjala y quédate conmigo...- Entonces no pude más y me quedé dormida junto a él.
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Hola mis queridos lectores espero que este capítulo les guste y lo disfruten.
Sienna acaba de dar el paso y ahora le toca a Ethan...¿Qué hará?
No se les olvide votar y comentar si les está gustando.
Un abrazo, vuestra querida Astrea.
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En números rojos
RomantizmNo se permite la adaptación ni copia de esta novela sin la autorización de la escritora.© La familia Russo deja atrás Italia para vivir el sueño americano, pues a Armani Russo se le ha presentado una nueva oportunidad en San Francisto junto a un ant...