Capítulo 30. (Final)

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@Natalia_Lacunza ha publicado.

@Natalia_Lacunza ha publicado

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<Gracias por todo, Noe. A seguir tus consejos, a por ello 💪👑💖>

Pasó exactamente una semana y media desde que Natalia compartió ese post. Y Alba no supo nada más de ella ni de su paradero. Le había dejado alrededor de cincuenta mensajes y todos con distintos contenidos. Prácticamente se estaba arrastrando porque: ERA SU PUTO TURNO.

Alba, tarde, comprendió que su morena hizo lo que pudo siempre por rescatar la relación, incluso alejarse y darle su espacio para que lo sopesara y decidiera por las dos. La rubita no estaba arrepentida de cómo se llevaron a cabo las circunstancias pero sí que le dolía no poder expresarle lo que le carcomía por dentro en ese momento. Allí, apoyada en las rejas blancas de un precioso balcón en un cuarto de hotel parisino.

Desde hacía diez días que Alba Reche despertaba, trabajaba medio turno en el museo, paseaba para descubrir hasta los lugares más insólitos y al anochecer regresaba a su habitación, prendía un cigarrillo y reflexionaba de absolutamente todo pero de nada a la vez.

-Como la echo de menos- le confiesa a la luna a través de la ventana.

**

Alba congenió con un chaval llamado Borja que residenciaba en París desde su adolescencia pero era originario de Dinamarca. Actualmente trabajaba como mesonero y él la visitaba cada vez que tenía la oportunidad dando la entrega del desayuno en servicio a la habitación. Se podría decir que le hacía, las pocas horas que pasaba en el hotel, más llevadero. Sin embargo, nunca le coqueteaba, ni siquiera parecía tener interés romántico en ella, simplemente disfrutaba de su corta compañía y mataban el tiempo jugando al Póker o haciendo carrerillas en el Mario Kart de una consola.

Esa mañana a Alba le sorprende que Borja no haya aparecido, no le dejó un mensaje excusándose ni dándole explicaciones por faltar a la cita rutinaria. Pero sencillamente lo deja pasar y sale al balconcillo marcando el número de la Julia para hacer una videollamada.

En la pantalla aparece con ella, Sabela y la Mari.

-MI PIOJO CULÓN AL TELÉFONO, HACED SILENCIO, DESGRACIADOS- exclama María pero Alba no pudo divisar a quién iba dirigido. Sin poder evitarlo carcajea porque adoraba a esa rubia loca.

-¿Cómo está nuestro talentoso y artístico amoriño? ¿Qué tal el curro?- pregunta la gallega con un pucherito, haciéndole saber con ello que la extrañaba.

-Estoy bien, factoría. La gente es majísima, me lo he pasado fenomenal. Pero también es verdad que me hacéis muchísima falta, estar acá sin vosotras y sin mi familia es agobiante- a ellas no les mentiría, las tres ablandan el semblante al imaginarse lo que sería estar en su lugar.

-Pero arriba esos ánimos, gremlin rubio. Que quizá un día, del cielo te cae una grata sorpresa- canturrea la Mari ganándose las miradas de desaprobación de Sabela y Julia.

Invisible Veneno | (Albalia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora