A la mañana siguiente desperté. Me levante estirandome de la cama. Hice un saludo al sol en mi balcon y di unas vueltas en mi lugar. Estire bien mi cuerpo otra vez e hice un par de trabajos. Recibí clientas bellísimas. Un maquillaje de día y otro de una boda. También realice tres pinturas que eran para entregar. Me mantenía muy activa. Sentía alivio en poder tener trabajo. Y jamas podía faltar el perejil en mi hogar. Era señal de trabajo y esa aroma que me daba, me daba energía.
Era la hora de la verdad. Calculaba que aproximadamente llevaba casi un mes de gestación. Sergio tenía que saber que iba a ser padre y eso me llenaba el pecho de nervios. De todos modos si él se negaba, mi hija iba a nacer de todos modos.
Cuando tome la decisión de que ya era hora de informarle de mi embarazo, recorde que no tenía ningún número de él. Que sólo sabía su nombre, y de hecho, de pura casualidad. Comence a caminar en mi departamento rascando mi cabeza pensando como podia lograr ubicarlo y se me ocurrio una única opción = preguntar a las personas que trabajan en los supermercados.
Me dirigi al supermercado. Ingrese y tome unos tomates con mis manos. Me dirigí a la primera caja y sonreí. La cajera era una chica de cabello castaño. Parecía unos años menos que yo.
-hola¿Qué tal?- la cajera me miro y peso los tomates. Note que tenía un mal día.
-hola- hablo fríamente.
-¿Mal día?- la mire metiento los tomates en la bolsa ecológica.
Directamente la cajera no me miro a los ojos y me dió el ticket. Pagué. -te entiendo.. estoy pasando también una situación algo difícil. A lo mejor a veces cuando te enteras con que alguien esta pasando también un mal momento, te das cuenta que todos pasamos malos momentos bella.
-te pido que no te metas en mi vida, no te conozco-
No pude preguntarle nada. Tampoco iba a hacerlo porque no soy la unica con un problema que resolver y pense que no era el momento de hacerlo. Me fuí con los tomates caminando a mi departamento.
Cuando estaba a una cuadra alguien jalo de mi brazo y me volteé. Era la cajera. Me pareció tan extraño y la mire
-Perdon.. te pido mil disculpas, primero que me reto mi gerente, se dió cuenta que te trate mal. Acaba de terminar mi turno y..- los ojos de la chica se pusieron borrosos y rasco su nuca hablando nerviosa y triste. La abrace de repente muy fuerte y ella quebro en un llanto. La chica me abrazo también sin dejar de llorar en mi hombro -tranquila bella.. todo esta bien, ¿si? No nos conocemos pero podes hablar y desahogarte conmigo con lo que sea que tengas adentro..-
La chica no dejo de sollozar abrazandome -muchas gracias por preocuparte por mi.. aunque no me conoces.. me siento sola en este lugar.. estoy pasando el momento más horrible de mi vida..-
La invite a entrar a mi departamento a la desconocida. Ingreso y le servi un te-sentate tranquila bella..- la chica se sento en la silla y bebio un sorbo de té sin dejar de llorar. Me sente en otra silla a su lado sobando su hombro y note que de a poco comenzo a calmarse -mi nombre es Rosa, ¿cual es el tuyo?- mientras limpiaba sus ojos, hablo dejando de llorar de a poco. -Inna..- hablo tartamudeando.-Inna.. que nombre tan original, me gusta mucho eh- sonreí tomando su mano- tranquila preciosa. ¿Cuantos años tenes?. Inna trago saliva -17-
-noté que eras muy joven amor.. yo tengo 21.. no muchos mas de todos modos.. ¿que te anda sucediendo por esa cabeza?-
Inna suspira y me mira a los ojos -tuve hijas gemelas. Las tuve hace unos meses con mi ex.. murieron. Mi embarazo fue fatal. Todo fue mi culpa. No deje de drogarme, fumar y tomar mientras estaba embarazada. Mis padres ya no me quieren, deje el colegio- los ojos de Inna volvieron a ponerse borrosos y quiebra en un llanto muy fuerte otra vez y vuelvo a abrazarla horrorizada por todo lo que desgraciadamente, le habia tocado vivir.
Pasa media hora exacta, e Inna deja de llorar de a poco calmandose. -Encima estoy descargandome con vos Rosa, y no te conozco, imagina todo lo que vengo teniendo guardado. No sabia con quien hablar y encima que me ayudaste, me enoje con vos.. perdon perdon..-
-no me pidas perdón preciosa.. te tocaron vivir cosas muy fuertes y sos extremadamente joven. Estas siendo una niña muy valiente. Aun así me demostraste que podias trabajar. Las gemelas son dos angeles que te van a cuidar en todo momento de tu vida. Te van a enviar señales. Creeme que es así. También tengo angeles en el cielo. Y también tengo uno que cayo del cielo- bajo mi mirada a mi abdomen.
-¿estas embarazada Ros?-
-lo estoy Inna.. sos la primera en enterarte- Inna sonrie y me abraza cofundida -creo que,. Es la primera vez que me alegro por un desconocido- inna comienza a reír y también lo hago.
-así es la vida Inna. Yo también me enteré hace poco.. de hecho hace solo días..-
—le cuento a Inna lo que sucedio con Sergio—
Inna me mira sorprendida con sus ojos abiertos como platos. -entonces..- Inna me señala-Ros, vos querías saber solo si sabia algo de Sergio que por lo que entendi va a ser el papá de tu bebé, y termine en tu departamento contandote mis problemas- miro a Inna riendo y junto mis manos asintiendo-claramente a veces las cosas se van un poco de tema.. pero conocí una niña muy valiente eh- Inna sonríe y vuelve a abrazarme fuerte -gracias Rosa.. sos muy buena persona.. esa bebe va a tener una mama increíble. Respecto a Sergio.. creo que ya se quien es Ros. El suele venir bastante al supermercado, si no me equivoco es de el barrio. Es mas una vez, cuando estaba terminando mi turno, me fui caminando y entro en una casa de rejas plateadas, a dos cuadras para la derecha de el supermercado- asentí atentamente mientras Inna me explicaba y tome un papel rapidamente para copiar las indicaciones -perfecto Inna.. muchas gracias.. no imaginas como me salvaste. Ahora solo me queda ir- -Rosa ¿en serio vas a ir?- -no queda otra bella.. esta niña- acaricio mi panza que aun estaba chata- tiene un padre y.. el merece saberlo, independientemente de que se haga cargo o no de la niña.. merece saber que será padre-
Inna de para y vuelve a abrazarme -suerte Ros.. si llegas a ir al supermercado anda a mi caja.. y me comentas como van las cosas y en que puedo ayudar- abrazo también a Inna -claro.. muchas gracias Inna.. cualquier cosa que necesites aquí estoy, ¿si? Podes venir cuando quieras.. trabajo mucho en el departamentito así que vas a poder encontrarme-
Inna me agradece muchas veces mas y me dice que tiene que irse porque se le hace tarde.
Me recuesto en el sillon y Lopi se sube y lo abrazo pensando. -misión cumplida del día, ¿verdad?- Lopi mueve su cola y comienzo a dormirme.
A la mañana siguiente CONTINUARA
ESTÁS LEYENDO
La Rosa del zafiro
RomanceNos sumergiremos en una historia. Una historia real, creada de una joven de nacionalidad francesa viviendo en la tierra Argentina. Los motivos de la mudanza, y el nuevo mundo lleno de amor y complicaciones que la esperan junto con su madre Alicia. H...