Sólo un poco Idiotizado///Chicos Heterosexuales 1

Capítulo 7

                                                     "Barbies y Kens"

Los rizos carbón de London volaban en cualquier dirección mientras con el secador intentaba quitarse todos los restos acuosos del cabello. Al terminar solo pudo carcajearse viendo su reflejo, el cabello le parecía una nube en revoltijos sin nada de forma. Con eso comenzó a peinarse, quitandose nudos, lo cual le resultaba dificil, a cada sepillada tiraba de más en algunos nudos, quejándose por el dolor. 

Había colocado en su ipod una canción en armonías y melismas, voces tatareando dulces nanas acompañadas de violines y violas, llenando la habitación de paz. 

- ¿Por qué sólo tienes canciones así? - pregunta Hoult tras él, observando como London se dividía el cabello en dos partes iguales.

- Me ayudan a calmarme - le sonríe al reflejo de Hoult-. Normalmente las tengo para dormir.

London tatareba la canción junto a las armonías, comenzando a tomar mechones de cabello y atándolos con pequeños broches. Al final terminó con todo su cabello atado en quizá diez moños en cada lado de la cabeza. 

- London precioso ¡ya llegue! - dice un hombre alto y delgado con una gruesa voz entrando en la habitacion llenado junto a London. El hombre parece una versión sobre estirada de London, con la barbilla triangular y el cabello negro rizado, la piel lechosa y brazos delgados. Tiene la cara un poco envejecida, no exuda vitalidad como su hijo pero él vtambien tiene esa mirada, alto que hace saber que tiene ímpetu y agallas contra el mundo.

- ¡Hey! - estira el brazo para mantenerlo a cierta distancia de él-. Vaya a bañarse, puerco, aún hueles a gasolina.

- Ese olor a gasolina es lo que trae comida a tu mesa, mal agradecido - se cruza el hombre de brazos con una gran sonrisa, dirigiendo su mirada hacia Hoult, arqueandole una ceja-. ¿Ese quién es? 

- Hoult, papá - dice conectando su pequeña plancha junto al tocador-. Hoult él es mi papá, Franklin.

- Un gusto señor - saluda Hoult con cierta timidez, apenas mirando al hombre a los ojos. 

- Hola - responde Frankie sin más-. La comida ya casi esta lista, bajen en unos cinco minutos.

- Claro, pero ¿podrías traernos la comida para acá? Tengo mucho por hacer - pide, mirando a su padre con súplica, haciendo un infantil puchero.

- A tu mamá no le va a gustar, pero hablaré con ella - le sonríe para girar sobre sus talones.

 - ¡Hey! Hablame hombre ¿como estuvo el trabajo? - pregunta London soltando los nudos de dos mechones tras su nuca, sonriendole al hombre que se quedó parado contra la puerta, observando como él comenzaba a pasar la plancha por el cabello suelto, alisándolo.

- Lo mismo de siempre, un auto más, un auto menos, más dolor de espalda, y ese imbécil de Leonardo - refunfuña el hombre estando ahí con los brazos cruzados. 

- ¿Qué pasa ahora con el viejo ese?

- Quiere que supla a Manuel por estos días, al parecer el señor pensó que también era electricista y se puso arreglar un contacto en su casa y casi se mató - se ríe un poco entre dientes-. Me dijo que está con algunos tics en medio cuerpo en el hospital.

- Entiendo ¿pero eso por qué te molesta? Si uno no puede lo normal es que le pasen el trabajo a otro ¿no?

- Pensarías, pero no, para la semana tengo tres autos y otro aparte para adomicilio, mientras que Harry tiene una mierda qué hacer y no le dan los trabajos a él porque el mocoso no tiene experiencia - dice con amargura-. Tenía tantas ganas de decirle, mira bastardo ¿como quieres que aprenda si no le das trabajo? además estoy seguro que ni siquiera me aumentaría el sueldo por el trabajo extra.