DOS

1.5K 62 1
                                    

Lina sabía que esa noche conocería a los amigos de Christopher, él le había dicho que sus colegas eran alocados, pero ella no sabía hasta qué punto.

La mayoría de los presentes estaban todavía con algo tapando parte de su cuerpo, la única que estaba totalmente desnuda y mostrando su entrada ya lubricada sin ningún tipo de pudor era Crista.No se le veía incomoda, quizá un poco achispada por las próximas rondas de juego, donde podrían ver la desnudez de más de uno.

Tenía miedo.De cierta manera por ser juzgada cuando la vieran en su total desnudes, una parte tímida quería ganarle y le gritaba que se fuera de ahí, que corriera en dirección contraria y terminase todo tipo de lazo con Christopher Vélez, pero otra parte, la más valiente, le decía en un susurro sensual que se quedara a ver todo lo que una vez había visto en esas páginas pornográficas a las cuales había entrado por curiosidad y había terminado por ver desde el más suave hasta el más osado video.Quería ver la masculinidad de cada uno de los presentes, ya había visto, sentido y probado el de su novio, pero quería más.
Luego de haber perdido la virginidad hace más de dos meses se había vuelto casi adicta al sexo, seduciendo a su pareja y follando cada que tenían oportunidad.Pero ya no le bastaba estar solo con él.Lo amaba, no podía negarlo, pero su cuerpo, traicionero, quería probar más.
Y esa noche podía ser la oportunidad de probar de varias personas a su alrededor.
Tenía en bandeja de plata no solo chicos, sino también chicas.Nunca lo había admitido en voz alta, pero sentía atracción hacia personas del mismo sexo y también del sexo opuesto.

Nadie más que su conciencia y ella lo sabían.

Nunca había tenido una mejor amiga a la cual contarle todo, las chicas siempre la miraban como si tuvieran una competencia contra ella, mientras que Lina nunca hacia nada para incitarlas a competir contra ella.

Bien sabia ella que Christopher tenía un secreto, uno que había querido hablar con ella mientras lo seducía.Pero temía que le fuera a decir algo que no le gustase, así que todavía tiene la duda de que es ese dichoso secreto que él se guarda en lo más íntimo.

Puede que esa noche lo descubra a final de cuentas.

- ¿y si tomamos algo para volver todo esto más interesante? – pregunta Richard.

- ¿body shots? – pregunta Cande con una sonrisa en sus delgados labios.

Todos asienten menos Lina.

- ¿Qué es eso? – pregunta a su novio en un susurro.

- tomas un shot de tequila del cuerpo de la otra persona.
Se queda callada.

- ¿puedo vestirme? – pregunta Crista, aunque no quiere hacer se siente incómoda estando así sola.
Algunos niegan.

- ahora que no sea verdad o reto, solo body shots y prendas.Si no quieren quitarse una prenda entonces deberán beber un shot del cuerpo de la persona que debía ponerle el reto.– habla Joel.Y todos asienten.

Lina camina hacia la vitrina de la cocina, sintiéndose valiente por haber caminado delante de todos con confianza a pesar de están a solo un paso de la desnudes.Toma con un poco de temor una de las botellas que tiene su papá en uno de las puertas de la parte baja, no se dará cuenta que falta una, uno de sus tíos le envía un nuevo licor cada cierto tiempo así que tiene dos puertas de tres llenas de diferentes licores.

Toma un par de vasos especiales para tequila y vuelve al círculo.

- no nena, estos no están permitidos esta vez.– habla Christopher quitándole los vasos de las manos y dejándolas a un lado.Toma la botella de alcohol en una de sus manos y la abre.

Lina había bebido un par de veces con Christopher, pero ese licor nunca lo había probado y si lo hacía entonces terminaría ebria con los primeros sorbos.

QUEDA ENTRE NOSOTROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora