Special ; 𝖩𝗂𝗇𝗌𝗈𝗇 : Pausada

❛ Destello ❜

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— Carajo.

Jinyoung no podía esperar a las firmas de autógrafos. Se podría decir que estaba muy ansioso, y mucho más si no sabía quién cuidaría de su pequeño hijo.

JiDo. Su niño de apenas de dos años.

La niñera había cancelado por asuntos familiares.

Sus padres estaban de vacaciones.

Ryujin su amiga del trabajo estaba en exámenes y no podía venir a cuidarlo.

Su amigo Yugyeom de la Universidad, había ido a pasear con su novia.

Y el padre de su hijo, Jaebeom, ni pensarlo. El estaba demasiado ocupado con su nueva esposa, una linda Omega que sus padres sí aprobaban. Pero esa era otra historia que después contaría.

Miró su teléfono, checando la hora, llegando a ser 8:30. Lo que le daba veinte minutos para treparse a su camioneta e irse rápidamente.

Fue a su habitación donde su bebé aún dormía, donde lo vio recostado boca abajo en su cama. No deseaba despertarle, así que con mucho cuidado volteo al pequeño y le volteo quedando boca arriba.

Tomó sus zapatitos y se los colocó sin tener ninguna queja de su bebe. Ahora con extrema delicadeza le cargo y se dirigió con el a la salida, donde le esperaba su mochila con el nuevo álbum que le firmaría su ídolo y cosas importantes como su billetera y sus llaves, por último agarro la pañalera de la repisa de alta y salió deprisa.

[...]

Por el espejo de su camioneta, observó que su JiDo en su sillita aún se encontraba profundamente dormido, ojalá y sea así durante todo la hora.

Jinyoung conducía apurado. Ya casi se acercaba la hora del fanservice y sentía los nervios de punta. No podía creer que por fin iría. Nunca había tenido el tiempo suficiente desde que nació Jisong, apenas hoy era el día en que tenia todo organizado.

Cuando estuvo junto a Jaebeom, el tiempo era casi nulo para poder ir a un lugar que le gustase. Se dedicaba a cuidar a su pequeño bebe, mientras que Jaebeom comenzaba a trabajar como médico.

Si recordaba la historia de ellos dos, no diría que fueron la pareja ideal que ellos hubiesen querido. Se conocieron precisamente cuando estudiaban en la Universidad. Después de haberse conocido, salieron y se convirtió en un noviazgo.

Lamentablemente un día cualquiera, su cita a la orilla de un bonito río terminó con un apareamiento. Era casi imposible que no saliese nada después de eso.

Sus padres y los suyos se volvieron locos con la noticia.

Era claro que los padres de Jaebeom nunca le había tomado afecto. Las veces que Jaebeom le invitaba a comer, su madre era muy directa con las preguntas y su padre se burlaba de los de su clase con indirectas desagradables.

Jaebeom nunca pudo defenderlo tal cuál, era un cobarde. Le sorprendió que durará tanto con el sí su herencia estaba en juego.

No se casaron. La única condición de sus padres fue que no contrajeran matrimonio, sus amistades le verían con malos ojos y lo primero era la reputación impecable de ellos y su hijo el Alfa que solo tenía huevos para una cosa.