Special ; 𝖩𝗂𝗇𝗌𝗈𝗇 : Pausada

❝ Conociendo a mi Ídolo ❞

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A Jackson le daba un poco de gracia al ver a su fan Omega respiraba incontroladamente y tocaba su pecho tratando de mantener la calma. Estaba acostumbrado a las reacciones de sus fans al conocerlo por primera vez, y el era uno de ellos. Aparte de que podía identificarlos después de una vez vistos.

Mientras firmaba el álbum del chico que era "100 Ways" y otras cosas más de su mercancía. El chico le miraba encantado y aplaudía al ver cómo firmaba cada uno de los posters, su álbum, su teléfono, y muchas cosas que tenía en su bolso.

— No sabes cuanto te admiro..

— Yo te admiro mas. — respondió el Alfa levantando un momento la vista y ver el sonrojo del Omega — Sin el apoyo de ustedes no hubiera logrado llegar a donde estoy ahora. — dejando a lado su bolígrafo de lado, sintió la necesidad de tomar la mano del Omega y apretó para sacudirla.

Jinyoung soltó un gritito que no pudo callar, y después con su mano libre tapó la sonrisa desquiciada de emoción que no quería dejarse ver. Sintió las mariposas de su estómago revolotear como si estuviesen en primavera, una lagrima quiso salir de su ojo, conteniéndose para no quedar como un tonto frente a su ídolo.

Eso no era nuevo para Jackson, no era la primera vez que veía a uno de sus fans romperse frente a él. Se le hacía muy tierno y gracioso a la vez, pero ese chico está sobrepasando la línea. Había visto Omegas preciosos, pero no podía definir como llamarlo a él.

Un olor a lavanda mezclado con frutal se esparció sólo alrededor de Jinyoung, sólo el mismo detectándolo, este borro su sonrisa y se sintió caliente de sus mejillas por lo que acaba de olfatear sobre él. Eran las feromonas de su idol las que giraban en su entorno. Jinyoung creyendo que era una simple broma apartó su mano de la de él soltando una risa tímida.

Sabía lo que significaba, pero era imposible que el rapero intentará algo con él. Vio el rostro del Alfa avergonzado y volvió a tomar su mano. — Discúlpame, fue sin querer..

— Tranquilo, no me molesto en lo absoluto.

Se volvió un silencio incómodo, dándose una mirada fugaz antes de que unos golpecitos en la mesa de escucharan. Ambos giraron hacia una pequeña manita que se colaba por arriba de la mesa.

— Mami.. no puedo..

Jinyoung rio ladino, por fin cargando a JiDo y estando en sus brazos. Oyendo sus quejas de no poder quitar la cinta que se ajustaba al empaque de los pokis de fresa.

— Vaya, ¿Cómo te llamas amigo?

El niño sin dejar de intentar abrirlo respondió a la pregunta mirando al señor que le gustaba a su madre. — JiDo..

— ¿Puedo ayudarte con eso?

JiDo miró a su madre esperando su aprobación, recibiendo un asentamiento, dejándole en sus manos el paquete de pokis al Alfa. El sin problema tomó la cajita y jalo sin fuerza la cinta de cierre, dejándolo otra vez en las manos del niño.

— ¿Cómo se dice bebe?

— Gashias.