Sí, me arrepiento

31 9 2
                                    

Tal y como tenía que hacerlo pase observando a mi familia a diario, ya no tenía  noción del tiempo, había entendido que contar los días no me iba a servir de nada.

Para ese entonces Mateo de había hecho muy cercano a mi, después de todo era con el único que hablaba, a pesar de que aún sentía que algo no me estaba diciendo el se supo ganar mi cariño y confianza

Al parecer yo aún no había cumplido aquel castigo que tenía, pues no sabía como y tampoco me interesaba mucho, ya me había adaptado.
Como siempre me quede ahí mirando cada cosa que hacía las gente que conocía, mis amigos seguían visitando a mi familia habían ciertos cambios en ellos , mis hermanos no eran los niñitos de los que me despedí todo era tan familiar y diferente a la vez , ese día todos de estaban reuniendo para lo que parecía una celebración e inmediatamente me di cuenta de que día era, como nunca sentí unas ganas de abrazarlos una vez más, me estaba arrepintiendo de todo mi decisión ¿pero ya no había marcha atrás verdad?

—Hola Alex

—Mateo, te estaba esperando

—veo que sabes que día es hoy

—creo saberlo

Mis ojos se llenaron de lágrimas y estas recorrieron mis mejillas después de darme cuenta de que llevaba más tiempo del que creía en ese lugar.

Mateo me seco las lágrimas con mano dulcemente

—feliz cumpleaños número 18 Alex

No podía creer que llevaba dos años observando a mi familia, dos años allí

Mateo notó mi cambio de ánimo

—Alex ¿te arrepientes?

Esa pregunta es la que me ha repetido día tras día y a pesar de todo siempre le cambiaba el tema o no respondía, porque durante mucho tiempo tuve miedo de no poder luchar por mi felicidad como tenía que pasar, pero era hora de que las cosas cambien

—¡si me arrepiento okey, me arrepiento una y mil veces de no poder estar  con mis hermanos mientras crecen, me arrepiento de no poder volver a sonreír junto a ellos  y siempre me arrepentiré de no poder decirle a Mario cuanto lo amo!

—cálmate —dijo mientras me abrazaba—es hora de que sepas la verdad

—¿de qué hablas? ¿Verdad?

—tu castigo ha terminado

—pero ¿cómo?

De repente Mario se lleno de luz y de su espalda se expandieron dos majestuosas ,yo estaba en un shock total

—tu, ¿tu eres un ángel?
—así es Alex y no un ángel cualquiera , soy tu ángel guardián

No se imaginan lo impactada que estaba mi amigo era un ángel, bueno eso no me sorprendía tanto después de todo llegue a pensarlo, ¡pero era mi ángel guardián!

—necesito una explicación o algo

—cuando una persona humana nace le asignan un ángel guardián, el cual tiene como misión principal cuidar a su persona hasta su día asignado

—¿quieres decir hasta el día de su muerte?

—exactamente

—ahora que se todo ¿qué pasará con migo?

—pues hasta aquí te acompaño yo físicamente

—¿nos vamos a volver a ver?

—eso no lose, pero yo te seguiré cuidando como toda tu vida lo he hecho

—al menos dime que recordaré esto

—Si, porque si no todo sería en vano

—al menos

—tienes que acompañarme

El me llevó al lugar donde me tiré

—¿Qué hacemos aquí? —espera ahí estoy yo

—si

—¡es el día de mi muerte!

—mira con atención

Una vez más yo estaba siendo la espectadora de mi propia película

—esta bien

Estaba volviendo a vivir ese día de una manera completamente distinta, pude ver como me despedí de mi familia y como me lancé

—¿Qué se supone que vea?

—solo observa

Me vi cuando estaba cayendo, pero también vi a Mateo amortiguar mi caída

—espera ¿tu me salvaste?

—yo se cuando dirás adiós de verdad y te aseguro que ese no era la fecha

—¿significa que no morí?

—adiós Alex, espero y puedas seguir adelante como hasta ahora

—gracias Mateo, tu has hecho más de lo que yo puedo agradecer

Mateo me tomo de la mano y me llevo al borde de la terraza

—tengo una última pregunta

—dime

—¿confías en mi?

—por su puesto

El me abrazo y mientras lo hacia me susurro —cuídate mucho

—igual tú —respondí

Me empujó de esa terraza, estaba cayendo una vez más del mismo lugar , vi todo como si estuviera reviviendo ese día, sentí un hormigueo por todo mi cuerpo hasta que llegue al final donde solo había oscuridad.

Acabo de despertar en lo que parece ser un hospital apenas y puedo moverme estoy en una camiila es algo muy extraño, me llamo la atención escuchar:

—¡despertó!



La vida detrás de una adolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora