Era algo indescriptible. Sin duda era extraño estar al lado de alguien con quien no tenías suficiente confianza. ¿Pero que pasó? Aún así están juntas.
¿Qué salió mal?....
Fue un sueño sin duda lo que pasó. Abriendo los ojos de una manera pesada, Fuutarou era consciente de lo que sus ojos veían al otro extremo de la cama. No hubo una reacción exagerada como se lo hubiera esperado antes, no. Pero.... ¿Por qué era? ¿Por qué estaba bien?
Dándose cuenta exactamente de dónde estaba, Fuutarou se había alegrado que estuvieran en su casa y no en el departamento con las demás. Una noticia así de repentina, dejaría en shock a cualquiera de ellas. En especial si se trataba de ella.
- (Entonces realmente pasó.) - acercándose y quedando pegado junto a ella - Esta vez te saliste con la tuya, Itsuki.
- somnolienta - Uesugi-kun~
- Esta bien. - envolviendola en sus brazos - Podemos tomarnos unos minutos más si quieres. No tenemos prisa.
Lo que Fuutarou nunca habría imaginado que pasaría, lo había vivido con la menor de las cinco, Nakano Itsuki.
Habiendo sido un día bastante intenso para todos, en lo que se suponía que debía haber sido una sesión de estudios común y corriente, Fuutarou nunca imagino o pasó por su cabeza, el tener que escapar alguna vez con una de ellas. Fue tan repentino que sus propias acciones a la hora de la huida, habían sido torpes e ineficientes.
~FlashBack~
- ¡Uesugi-kun, ve un poco despacio! Me lastimas. - siguiendolo tomados de la mano -
- No hay tiempo para que nos quejemos. Una vez lleguemos podrás darme cualquier sermón. - agitado -
Bajo una lluvia intensa, Uesugi Fuutarou y Nakano Itsuki, por algún motivo en concreto, estaban escapando juntos.
Todo había sido demasiado rápido como para analizarlo. Tan solo haber llegado a la residencia Uesugi, y no encontrarse a Raiha o a su padre, Fuutarou no lo había tomado en cuenta, como si no existieran. Lo importante para él en ese momento, era Itsuki. - (Sería malo que Itsuki se resfriada ahora)
Empapados por completos, Fuutarou de inmediato le había ofrecido que se bañara primero. Provocando así, una pequeña conversación entre ellos.
Itsuki habiendo aceptado la oferta de Fuutarou y estando en el baño desvistiendose, le fue de un gran susto escuchar la voz del pelinegro del otro lado de la puerta.
- Itsuki.... - hablando de imprevisto -
- ¡U-Uesugi-kun! - alterada - ¿Qué formas son esas...? - siendo interrumpida -
- Perdóname. Fue mi culpa que nos tuviéramos que ir así de repente del departamento. No tuve que haberte involucrado en mis problemas.
- ¿Pero que dices, Uesugi-kun? - deteniéndose y quedando en toalla detrás de la puerta -
- Si no fuera por mí, Nino no se hubiera peleado contigo otra vez. Íbamos muy bien hasta ahora, pero no supe cómo conllevar todo esto... Que termine provocando esta situación.
- No tienes porque disculparte, Uesugi-kun. Tu no has hecho nada malo.
- ¿Tu crees eso? Que irónico.
- Aunque tu no lo creas de ti, yo si lo creo. No fue tu culpa el haberme besado tan repentinamente. Lo más probable, es que si yo sintiera lo mismo que tu sientes por mi, habría dado el mismo resultado.... - suspirando - Me habría lanzado hacia ti, y te hubiera besado en cualquier oportunidad que tuviera. Cualquier brecha.
- Entonces....
- Esto no significa que hayamos confirmado algo. Primero quiero regresar a la normalidad con Nino. No quiero tener más peleas por algo que ya esta decidido.
- Esta bien.
- Puedes estar tranquilo. No tardaré demasiado, así que ni se te ocurra quedarte dormido.
- Como si pudiera. - tono alegre - Te esperaré. - alejándose del baño -
- Aunque debiste contenerte un poco. Tonto. - voz baja -
- Te escuché. Tonta.
~Fin del FlashBack~
Estando ya en la mañana. Fuutarou seguía apegado a la peli roja como si fuera su almohada, lo cual, al despertar ésta y dándose cuenta en que posición estaba, no pudo evitar sonrojarse.
- intentando liberarse de los brazos del pelinegro - O-oye... ¿Qué crees que le haces a una chica tan temprano.
- Tranquila. - apretandola más - Tu misma me permitiste esto. No puedes quejarte.
- P-puede que haya sido verdad, pero esto es demasiado. - roja como tómate -
- Bueno, dejando eso de lado. - besándola en el cuello - Buenos días.
- ¡¡¿Q-q-q-q-q-q-q-qué demonios estas pensando?!! - separandolo de ella con todas sus fuerzas - ¡Tu, pervertido! Como castigo, quiero que te largues de aquí y me dejes sola por lo menos 3 horas.
- estando en el suelo - ¿Eso no es demasiado?
- ¡¡ES LO JUSTO PARA PERSONAS COMO TU!!
Antes de afrontar la verdadera ira de itsuki en todo su esplendor, Fuutarou había huido a la cocina a preparar el desayuno por mientras.
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- Ah~ ¿Cómo se le ocurre besarme de esa manera? - acomodándose a su gusto en la cama - Bueno, supongo que el problema de Nino puede esperar... ...
