La Bailarina (Justin y tu)

CAPITULO 4

Capitulo 4

Justin estaba hipnotizado mientras escuchaba a _____ hablar. Demonios, la mujer era realmente bella. Justin clavó sus ojos en sus labios e imaginó lo maravilloso que sería callarla con un beso y embriagarse con el sabor de sus labios. Su entrepierna dio un tirón cuando _____ se desató el cabello, haciendo que cayera sobre sus hombros. En lo único que pudo pensar Justin en ese momento fue en enterrar su nariz en su cabello mientras aspiraba su olor al mismo tiempo que le hacia el amor. Justin no podía recordar cuantas veces había soñado con ella. Las veces que se había puesto duro con tan solo verla bailar en el escenario, o las veces que se había masturbado mientras cerraba los ojos y tejía una fantasía junto a ella en su mente.

La cena transcurrió lentamente mientras mantenía una agradable conversación con ella. _____ era simpática y lista, y mientras mas tiempo estaba con ella se daba cuenta de que más la deseaba. Era increíble lo duro que se ponía cuando _____ lo miraba. Sus ojos lo quemaban, haciéndole doler por la urgencia de querer probar su cuerpo.

- ¿Justin?

La pronunciación de su nombre lo sacó de sus pensamientos. Enderezándose, Justin se acomodó en la silla y la miró.

- Dime, _____.

- Cuéntame de ti. Me la he pasado toda la cena hablando, dios, debo de estar aburriéndote.- sonrió. Una preciosa sonrisa, que lograría seducir a cualquier hombre que se le cruzase. Incluyéndolo a él.- ¿Tienes hermanos?

- No, soy hijo único, ¿Y tú?

- Si, tengo una hermana de diez años. Se llama Johanna.

- ¿Y tus padres?

- Eh… ellos murieron en un accidente automovilístico cuando tenía dieciocho años.

Justin cerró y abrió los ojos lentamente mientras maldecía por lo bajo.

- Lo lamento.

- No pasa nada.- miró su reloj de pulsera, y al instante su boca se transformó en una pequeña “o”.- lo siento, tengo que irme.

- Te puedo ir a dejar a tu casa.

_____ negó con la cabeza.

- No, tengo que ir a recoger a mi hermana donde una amiga. Ya se me izo muy tarde y…

- No te preocupes. Pasaremos a buscar a tu hermana por el camino.

_____ se mordió el labio, nerviosa, inconciente de que con aquel gesto lo único que conseguía era aumentar las ganas de Justin al querer besarla. Unas ganas que no aguantaría por contener mucho tiempo. Y él ya estaba empalmado desde que entró a ese jodido restaurante. _____ se estaba debatiendo en ir o no con él. No tenía auto, el suyo se había descompuesto por lo que tenía que desplazarse por taxi hasta que lo arreglaran. Ella lo miró a los ojos, y vio algo en ellos que le transmitió confianza. Él sólo quería hacer amable con ella, después de todo Justin la había ayudado muchísimo y _____ no quería parecer grosera frente a él.

- Está bien.- dijo ella finalmente y Justin sonrió. Una sonrisa, que ella no fue capaz de descifrar.