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PDV HARRY.

Mañana era Navidad.

Ya llevaba una semana de vacaciones, y he de decir que no la he aprovechado, básicamente porque he estado haciendo el vago cada día.

Estas semanas habían sido bastante tranquilas en general.

Mi madre ya estaba completamente recuperada, lo único que se había cogido la baja en el trabajo, ya que en dos meses daría a luz.

No paro de imaginar que la bebé pueda nacer el mismo día que yo.

Con respecto a Louis, estábamos mejor que nunca. Dormíamos juntos prácticamente todas las noches, lo único que se iba pronto de mi cuarto para que no nos descubriesen.

Todavía no le habíamos comentado nada a nuestros padres, y eso lo hacía más difícil para nosotros, pero Louis quería esperar un poco más, y tenía que respetarlo.

Miro el reloj. Las 8 de la mañana.

Mi madre y Karl todavía dormían, así que salgo con cuidado de mi cuarto, metiéndome despacio en el de el ojiazul, el cual dormía.

Me tumbo a su lado con cuidado, repartiendo pequeños besos en su mejilla, frente, nariz y labios, despertándole.

Abre los ojos poco a poco, mostrando una pequeña sonrisa.

- Feliz cumpleaños- susurro.

Éste me mira tiernamente, llevando sus brazos hacia mis hombros, atrayéndome hacia él.

Deja un beso en mis labios, sonriendo.

- Gracias.

Me acurruco a su lado, y éste aprovecha para estirarse, cogiendo su teléfono.

- A ver quién ha sido el primero en felicitarme- dice, mirando el WhatsApp.

- Yo voto por Nate- digo.

- Pues has fallado- dice, enseñándome su teléfono.

"00:00am Josh: ¡FELIZ CUMPLEAÑOS MINI KEN! YA ERES TODO UN HOMBRE, VOY A LLORAR."

"00:01am Nate: ¡AMIGO, FELICIDADES! ESTOY DESEANDO VERTE Y TIRARTE DE LAS OREJAS. TE QUIERO, HERMANO."

Sonrío ante los mensajes, entregándole el móvil.

- ¿Cuándo vuelve Nate?

- El día dos. Después de Año Nuevo.

Asiento, poniéndome boca arriba.

- Hoy vamos a montarnos un fiestón.

- ¿Eloy al final tiene la casa?

Asiento, mirándole.

- Podemos dormir allí.

- Guay- dice, girándose hacia mí- ¿no tienes nada que darme?- dice sonriendo ampliamente.

- Un orgasmo ¿te vale?

Carcajea, asintiendo.

***

Después del mañanero, fui directo a la ducha mientras Louis salía a desayunar, encontrándose con mi madre y Karl, quienes le felicitaron, sacando una tarta de chocolate para desayunar.

Le regalaron un móvil, ya que el suyo tenía la pantalla destrozada de tantas caídas.

Estaba como loco con él.

Mi regalo, el cual también era conjunto con los demás, se lo daríamos en la fiesta, después de la cena con los abuelos, ya que lo tenía guardado Eloy en su casa.

Don't Let It Break Your HeartDonde viven las historias. Descúbrelo ahora