JUEGO MALVADO /// TAEJIN

5

Llegó a su departamento, se quitó los zapatos y se puso unas cómodas pantuflas, puso su portafolio en una silla cerca del comedor. Avanzó arrastrando los pies hacia la regadera, se quitó el traje colgándolo en un gancho que estaba atrás de la puerta, dobló el resto de sus prendas, colocándolas en el cesto de ropa sucia que tenía en su baño.

Se giró a ver al espejo, admirando las marcas rojizas que tenía en su cintura desnuda, no sabía cómo sentirse después de todo lo que había pasado, recordaba las respiraciones, las mordidas, apretones, las sonrisas y lamidas... Sentía una presión en su estómago al recordar las deliciosas metidas que le dió Taehyung.

Pero a su vez se sentía extraño, habían pasado unos meses desde que empezaron los encuentros, en un principio fue por puro placer, pero él ya estaba empezando a sentir cosas más allá de solamente coger.

Se bañó y fue a su vestidor para ponerse un hoodie muy grande color oscuro y un pantalón flojo. Se quedó con sus pantuflas y fue a preparar un almuerzo.

Al terminar de comer lavó sus trastes para irse a acostarse en su sillón un momento. Puso una película en Netflix para estar un rato relajado.

Escuchó como su celular empezó a sonar desde el otro lado de su hogar, se levantó corriendo hacia su portafolio, estaba buscándolo como loco, definitivamente perdía todo en ese lugar.

—KIM SEOKJIN — alzó al voz al contestar el teléfono con rapidez para no perder la llamada.

— Hola ¿Llamo en mal momento?

—¿Quién habla?— se quedó extrañando cuando vió un número desconocido en la pantalla.

— ¿No me recuerda? Soy Jeon... Jeon Jungkook, nos conocimos está mañana...

Jin recordó su reunión matutina, viendo en su mente a un joven alto con mirada segura y sonrisa encantadora.

—Es que, quería marcarle para que tenga mi número registrado.

—Oh, le agradezco el gesto de llamar, pero un mensaje era suficiente, no se hubiera molestado... — contestó mientas veía el suelo y  jugaban nerviosamente con los dedos de sus pies.

—Para mí no es molestia, no se preocupe... ¿Lo interrumpí de algo importante?

El pelinegro tragó saliva antes de contestar— No, solo que no encontraba mi celular en mi portafolio.— Cerró los ojos con fuerza y peinandose una ceja por la vergüenza que le llegó de repente.

Escuchó una pequeña risa en el fondo del teléfono —Al parecer su portafolio es infinito.

—Es algo difícil encontrar mis cosas en ese lugar. —Soltó una pequeña exhalación cuándo rememoró lo ridículo que se veía en la empresa de Taehyung buscando esas tontas tarjetas. Y se recordó meter nuevas , de esta forma no sufriría el mismo percance. —Pero no estaba ocupado.

— Me alegra no ser inoportuno... Pero bueno, le dejo, tengo que arreglar unos documentos. Muchas gracias por responder la llamada.

— Gracias a usted por llamar.— Se sintió algo aliviado por cortar el diálogo, siempre odió las llamadas telefónicas.

— Estamos en contacto, espero que pronto tengamos el gusto de volver a vernos.

— Por supuesto, solo hay que ponernos de acuerdo entre los tres para poder ir a comer. —Jugó un momento con el borde de su playera.

La llamada se terminó, bajó su teléfono a un lado y se recargó en la pared para recordar si no había dicho nada ridículo, hasta que desvío la vista a su móvil cuando un pequeño sonido de una campana pausado por un momento el silencio.