Relato 2: Proceso De Nutrición

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En la aeronave de extracción #2 del ejército de Highland se encontraban cautivos un grupo de jóvenes separados de sus familias, entre ellos había dos hermanos que intentaron escapar cuando vieron al ejército acercarse. Sus intentos fueron inútiles ya que terminaron capturados y maldiciendo su mala suerte.

Todos los jóvenes se encontraban atados a la máquina de extracción para obtener la energía vital de sus cuerpos y nutrir las armas de aquellos malvados soldados. El mayor de los hermanos veía por la pequeña ventana el cielo de la madrugada cuyo sol comenzaba a asomarse mientras imaginaba una vida prospera junto con su hermana que nunca llegaría. En la sala no se escuchaba ningún sonido, solo los improperios esporádicos de alguno de los científicos encargados del proyecto.

Luego de un rato comenzó el proceso, tomaba un tiempo completarlo por cada joven, tiempo que se marcaba usando un reloj de arena que reaccionaba al nivel de maná de cada uno. Todos tuvieron su turno hasta que le llegó a la pequeña de los hermanos, con gran terror en su cara soportó el proceso ante la mirada dolida de su hermano que solo podía llorar ante semejante visión, cuando el último grano de arena cayó marcando el final del proceso, la chica había perdido todo rastro de vida en su cuerpo.

A la mente de su hermano venían recuerdos de su hermana, su ser más querido, saludándolo desde la cima de la colina donde solía jugar mientras él se encargaba del almuerzo. Este recuerdo contrastaba totalmente con la imagen del ser sin vida delante de él, su mirada completamente vacía reflejaba una gran soledad mientras una lágrima caía por su mejilla.

Solo restaba un joven, aquel que había visto como le arrebataban lo que más amaba. La maquina se encendió, provocando que este sintiera un dolor que se extendía por todo su cuerpo haciendo un recorrido circular que terminaba en su cabeza, lo único que podía ver era el reloj de arena que le correspondía. Con cada grano de arena que caía se extinguía un poco más su vida, sintió como si su alma lo abandonara, incluso creyó haber visto una silueta que lo invitaba a acompañarlo hasta que se disipó completamente junto con su propia vida, dejando el cuerpo del muchacho inerte sobre sus ataduras.

Y así, con el sol preparándose para ponerse, cayeron de la aeronave los diez cuerpos sin vida de los jóvenes, directo hacia el mar, donde su carne podría alimentar a las bestias que allí moraban. Los encargados dieron su trabajo por finalizado y emprendieron rumbo a casa, a Highland.

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Algunas aclaraciones.

Aunque parezca confuso, toda la premisa esta incluida dentro del relato pero de manera metafórica, algunas partes son un poco mas confusas, así que por favor leer con la mente abierta.

Gracias por leer, hasta el próximo relato

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