El secreto de SungYeol

Capitulo 17

Woohyun se sentía muy feliz por su amigo porque después de la desilusión que se llevo con SungJong, juro no volver a interesarse en algún omega. Quería de contarle de su gran amor hacia SungYeol a SungGyu para que ayudara a MyungSoo a conquistarlo, Gyu no tendría motivos de estar celoso de SungYeol y así podía convivir  mas con el y JunHo, desde que comenzaron a intercambiar cartas, sentía que su vecino es una muy buena persona, pensó que no cualquier Omega que espera un hijo de un desconocido y desgraciado alfa que solo se aprovecho de el, decidiera tenerlo solo sin importarle el rechazo de la sociedad, dejar el trabajo de sus sueños con tal poner en riesgo a su bebé, ademas admira lo fuerte que SungYeol es, salir adelante aun sin tener un familiar y se una persona de bien, no cualquiera podía hacer todo esto. 

— ¡¡WooHyun la cena esta lista!! — grito SungGyu tocando la puerta de la habitación que comparte con su mejor amigo. 

—¡Ya voy! — contesto escribiendo las ultimas palabras de la carta que le enviaría a SungYeol. 

~•~

MyungSoo observaba con tanta curiosidad, molestia y celos aquel sobre blanco que tenia en sus manos, quería abrir y leer lo que contenía aquella carta, pero sabia que no podía traicionar la confianza de su querido Yeollie, además de que el fondo tenia miedo de que tal vez podía enterarse algo que le rompiera el corazón su hyung pero sobre todo a él. Claro que estaba dispuesto a ir a la cárcel por matar a WooHyun, SungYeol no es suyo, no dejaría que fuera de alguien más. 

— ¡Aahh!, ¡deja pensar en tonterías MyungSoo! — se regaño golpeándose ligeramente en la frente con la puerta del apartamento de SungYeol. Los celos lo están volviendo loco. 

MyungSooo ya tenia una decisión, hoy si o si tenia que confesarle su amor a hacia su atractivo y lindo vecino, no le importa si esté no siente le mismo por él, le pediría y en caso de ser necesario le rogaría por una oportunidad para conquistarlo, y si después de ese tiempo no lograba enamorarlo...

—¡Lo secuestrare! — dijo en voz alta dejando se pensar coherente. 

—¿A quien vas a secuestrar? — pregunto muy curioso SungYeol saliendo del ascensor con algunas bolsas de super.

—¡SungYeol! — grito sorprendido corriendo para ayudarlo con las bolsas del super, no seria muy caballeroso de su parte si solo lo veía batallar tratando se cargar con sus bolsas y su tierna barriga de seis meses y no lo ayuda. — Déjame a mi— dijo quitandole las bolsas de sus delicadas manos, según MyungSoo, — Si querías ir a comprar me hubieras marcado como las otra veces, sabes que no puedes hacer muchos esfuerzos, seguro tus pies te están matando — lo miro serio.

Desde que comenzó a tener interés en SungYeol, se dedico a investigar y pedir información sobre las molestias y los cuidados que se deben tener en un Omega embarazado, y entre las molestias son; la inflamación de lo pies del omega, ademas de que cada día que el bebé va creciendo le es mucho mas complicado a la "madre" caminar debido al peso del vientre. 

— Lo siento pero quería hacer tu comida favorita y no tenia los ingredientes, quería hacerte feliz  — confeso avergonzado bajando la mirada mientras acaricia su vientre.

MyungSoo sintió morir de ternura al ver lo lindo que se veía SungYeol, debido al embarazo su rostro es mas llenito haciéndolo ver mas cacheton, parecía una tierna bolita de masa. 

— Yeollie —  lo llamo tomando delicadamente la mano de su vecino. — Muchas gracias por tan lindo detalle pero yo soy feliz con solo verte —  le sonrió para después llevar la mano se SungYeo hasta su labios y depositar un tierno beso en ella. — ¿Tu eres feliz al verme? —  preguntó coqueto 

SungYeol se sonrojo tanto que comenzó a tener mucho calor. Claro que es feliz cada que MyungSoo los viene a visitar, su corazón se vuelve loco cada que ve esa perfecta y maravillosa sonrisa con hoyuelos pero sobre todo se sentía como el omega más especial del mundo cada que le decía palabras bonitas. Tal vez no seria mala idea si le confiesa su amor, pensó.

 —MyungSoo yo... ¡¡AAHH!! — soltó un  grito, SungYeol. —¡¡Calambre, calambre!!, ¡¡Ayudaaaaaa!!  — grito adolorido, el dolor es insoportable tanto que sentía morir. 

Y como si los super poderes de la velocidad y fuerza le hubieran  sido concedido en ese momento, tomo con una mano las bolsas del super mientras que con la otra mano busco la llaves del apartamento de SungYeol en su abrigo, una vez que las encontró, cargo con mucho cuidado y delicado a su embarazado vecino, abrió la puerta, dejo las bolsas en el suelo y llevo hasta el sofá a SungYeol para acostarlo y darle un pequeño masaje en la pierna. 

— ¡MyungSoo, me duele, me duele! — se quejo SungYeol con los ojos llenos de lagrimas

—Tranquilo cariño, no pasa nada, tranquilo — le decía mientras masajeaba suavemente su pierna. Una de las cosas que odia era ver llorar a su Yeollie, como le gustaría que ese dolor que siente se lo pasara para que no sufriera, bastante tiene con cargar una barriga enorme de seis meses.

Estuvo un buen rato masajeando la pierna de SungYeol hasta que el dolor desapareciera por completo.

—Gracias MyungSoo, se que aveces te obligo hacer cosas que no te corresponden, pero tu eres el único que esta conmigo en mis peores momentos del embarazo, gracias — le dijo comenzando a llorar, sus hormonas todas locas le estan jugando mal.

— No agradezcas, yo soy feliz que compartir cada momento de tu embarazo juntos — le sonrió tomando asiento aun lado de SungYeol para después abrazarlo, — No llores cariño, yo siempre voy a estar contigo

—¿Siempre? — preguntó tiernamente, mirándolo directamente a ojos, sentía que solo podía comprobar que una de las palabras que le decían eran sinceras. 

— ¿Por que lo dudas?, eres el omega mas lindo, tierno, alegre, sencillo y sexy ante mis ojos, para mi no hay nadie mas que no seas tu, me gustas y me gustas mucho y no solo, mirándote a los ojos, te digo que te amo — SungYeol lo miro sorprendido. — Eres lo único que necesito para sentirme completo, no me importa si el bebé que esperas no es mio, yo quiero sel el padre de JunHo, yo los amo los dos. Cariño, dame la oportunidad hacerlo feliz hasta el ultimo día de mi vida, prometo que no...

—¡¡También me gustas!!

Este es otro pequeño regalo, espero que te guste mujer. ¡Muchas felicidades!
LoveM-J