- Joder, no Alejandro - dijo ella horrorizada - no llores, me pondré triste si lloras - dijo frunciendo su ceño por preocupación.
- No estoy llorando Elizabeth - dijo y se le escapo una risa baja al ver como le molesto eso - es solo que me emociona que pasemos la noche juntos - dijo y elevo sus cejas provocativamente
- Eres un asco Joel - dijo ella horrorizada -pero ven, te curo las heridas - dijo y paso el algodón con agua oxigenada por cada una de sus heridas, para desinfectarlas.
- No hace falta que te tomes tantas molestias - dijo el castaño jadeando cada vez que el algodón se posaba en alguna de sus heridas.
- No es molestia - dijo sonriendo - solo con ver el dolor en tu cara estoy feliz - dijo a modo de broma.
- Ey que mala eres - dijo fingiendose ofendido.
- Solo para ti cariño - dijo y guiño un ojo hacia el - solo falta esta herida y ya esta - dijo señalando una herida que se encontraba en la comisura de los labios del castaño.
- Al fin terminaré mi tortura - dijo divertido.
En el momento en el que el algodón paso por el labio del castaño, este no pudo evitar fijarse en cada detalle del rostro de la pelirosa. Hasta que sus ojos quedaron en un punto del cual se negaban a salir, sus ojos quedaron en los labios de ella.
- Listo - dijo la pelirosa, pero por algo extraño no se movió de su sitio, sino que se quedo mirando a los labios del castaño.
Al darse cuanta de que no podía apartar sus ojos de él decidió ir al baño a guardar todo.
- Enseguida vuelvo - dijo ella con sus mejillas un poco sonrojadas por el hecho de no haber podido quitar los ojos de Alejandro.
"Joder Julieta ¿Que te pasa? Recuerda que esto es solo una venganza, no te debes enamorar"
Se repetía ella una y otra vez al frente del espejo. Con una respiración profunda fue nuevamente hasta su habitación, encontrándose al castaño jugando con su gato.
- ¿Por que tienes a Rufus en tus piernas? - pregunto Julieta confusa - o una pregunta mejor ¿Por que el se deja?
- Al parecer tu gato esta tan enamorado de mi como tú - sentenció el castaño
- Yo no estoy enamorada de ti, pedazo de imbécil - dijo ella rodando los ojos.
Alejandro dejo al gato en el piso y se acerco a Julieta.
- ¿Entonces si hago esto no sientes nada? - pregunto frunciendo el ceño el castaño
- ¿Hacer que? - pregunto la menor.
ESTÁS LEYENDO
Enamorarse no vale [EJC #1]
Short StoryCuando Alejandro le propone a Julieta un trato ella lo duda, pero al final acepta. Solo hay una regla, una simple, de hecho: No vale enamorarse. ¿Podran ambos cumplir esta regla? ///7w7///// Primer libro de la trilogía Enamorarse de Juegos Costosos.