Hoy era uno de tus días más felices, pues acabas de casarte con el amor de tu vida y precisamente hoy estaban en su luna de miel.
Ambos habían ido a la playa para relajarse un poco, estuvieron nadando, fueron a comer incluso habían comprado ropa y recuerdos de ahí, les había encantado el lugar.
Cuando la noche llegó ambos fueron a su departamento el cual habían rentado, se pusieron a ver una película abrazados en el sofá, NamJoon, tu novio, ahora esposo estaba con una de sus manos sobre tu pierna y mirando la televisión, tu estabas muy entretenida en la televisión hasta que NamJoon se removió para dejar un suave beso en tus labios. Sonreiste y sentiste como volvió a besarte pero está vez más rudo, seguiste el beso torpemente y sentiste como te agarro por las caderas.
El fue recostandote sobre el sofá, acaricio tus piernas lentamente y cuando sentiste que su mano subió a tus pechos te alejaste de el.
—. Vayamos a dormir. —dijiste difícilmente. NamJoon decidió ignorarte y besar tu cuello, sentiste como iba subiendo tu vestido. —. NamJoon basta. —le dijiste y el no tardó en alejarse de ti.
—. No seas así, vamos a hacerlo, es nuestra luna de miel. —te dijo algo grotesco.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—. No quiero. —le dijiste, pues, era tu primera vez y eso te daba muchísimo miedo, tus amigas te habían dicho que eso dolía bastante.
—. Por favor. —trato de besarte pero te alejaste de el volviendo a sentarte.
—. No me apetece. —dijiste poniéndote de pie para ir a la habitación, NamJoon fue detrás de ti.
—. Nunca quieres, llevamos mucho tiempo, incluso estamos casados y solo no quieres, tu sabes cuántas ganas tengo de hacerlo contigo. —te quitaste tus aretes mientras lo escuchabas. —. Se que te da miedo pero tenemos que hacerlo algún día.
—No quiero. —repetiste.
—. Todos mis amigos siempre me cuentan sobre cómo fue, tu eres la única que no quiere.
—. Pues entonces búscate otra que te dé lo que quieres. —dijiste algo enojada, era mucha insistencia de su parte y no te gustaba.
—. Me case contigo y me estás diciendo eso… no puedo creerlo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Te dio una última mirada y salió de la habitación notablemente enojado.
