Mi cuerpo, tus sentimientos. #IronStrange

¿Donde esta Pepper?

Tenía un gran conflicto en mi cabeza ahora mismo, revise el que parecía ser mi teléfono, tenia muchos contactos, entre ellos, Peter, Jarvis, Rhorey, Happy, viejos socios comerciales, pero Pepper no estaba hay, tampoco algún otro vengador y eso era muy extraño.

Me preguntaba, si yo no soy Iron man y Stephen no es "el hechicero supremo", entonces Rhorey no portaba el traje " Maquina de guerra".

Me decidí y al fin marque el número de su viejo amigo, el coronel atendió la llamada casi de inmediato.

-¡Sabia que te ibas a arrepentir de haberme dicho que era un idiota y estaba equivocado!- Es lo que salio de su boca y también lo que más me altero- En fin, sin resentimientos, pero al menos dime que le gustaron las flores.

-No sé que me estas hablando.

-Vamos Tony, no me trates así, solo quería ayudarte y si te hace sentir mejor no diré que te lo dije.

-Lo acabas de decir genio.

-Bueno, ya no se puede cambiar el pasado, así que te lo dije una y otra vez "No le regales un paquete de corbatas brillantes", pero eres demasiado terco.

¿Qué idiota le regala corbatas brillantes a alguien?

-Rhorey, si me equivoque en eso, tienes razón,cosas ahora yo te hablaba para preguntarte cosas, veras, tome demasiado a noche y me siento confundido aun, entonces mis recuerdos por el momento están muy mal. ¿Puedes decirme que hago?

-Además de desperdiciar un perfecto hígado, emborrachándote en cada oportunidad.- Me hizo rodar los ojos.- Tony Stark, dueño de industrias Stark, millonario heredero, famoso por sus escándalos y carisma, esposo de Stephen Strange, uno de los mejores neurocirujanos de todo el país, con quien tuviste una relación casi a escondidas y él te dejo porque necesitaba terminar su carrera, a ver... Después volvió a tu vida y fue cuando dejaste a Pepper porque realmente amabas a Stephen, se casaron y ahora llevan 5 años de cazados.

Ahora si que me iba a dar algo, el no tener el reactor no había sido el fin del mundo para mi, pero ahora, sentía el ataqué de pánico muy cerca, me recoste y trate de concentrarme en respirar y no caer en la locura.

-¿Tony? ¿Siges ahí?

Respire hondo y conteste.

-Rhorey, ¿Donde esta Pepper?

Pepper era la mujer que amaba desde hace tiempo y que me amaba, pero que simplemente llegamos al acuerdo de que no podía darle una vida normal, que no estábamos hechos para estar juntos, porque ella quería una familia, yo no podía tener una sin meterlos a todos en problemas, no quería ver a mi familia sufrir, no como yo había sufrido al ver a mi padre construyendo tanto para tener el fin que tuvo.

-Tony, si te doy su dirección o su teléfono, ella va a matarme, sabes bien que ella se canso de que tu fueses más feliz sin ella.

-Por favor, necesito hablar con ella.

La idea de herir a la mujer mas perfecta, le hacia sentir como un completo imbécil.

-Bien, pero más vale que si hablar acaba mal, entonces no la vuelvas a buscar, porque ella queria aprender a vivir sin ti.

-Lo prometo.

-Bien, te mandare la información por mensaje, ahora tengo que irme, los reclutas esperan.

-Gracias y suerte coronel.

Deje el teléfono a un lado después de terminar la llamada, me senté mirando mis manos. ¿Qué debía hacer? Mis pensamientos me impidieron notar que Stephen me miraba.

-¿Todo bien?

Asentí sin mirarlo, no podía hablar con él de Pepper y lo mal que la estaba pasando porque aquí, sea el lugar donde sea, no podía tenerla a mi lado.

-Iré a... No sé donde- Salio de la habitación.

Tenía unas ganas enormes de reír y no sabia si desesperación o porque esto parecía una jodida broma. Así marque el número que había anotado en una libreta pequeña que encontré en el tocador.

-Pepper Potts, buen día.- Respondió cordial, justo como era ella.

-Hola Pepper...

-¿Tony?- Se escuchaba sorprendida.

-Escucha, lamento cada error y cada herida que provoque, que hizo que ya no quisieras volver a hablarme, pero quiero volver a ser tu amigo, porque solo hablando contigo, me siento tranquilo, te extraño, nos extraño y quisiera que volviéramos a hablar.

-Tony- Suspiro. -Creí que jamás volverías a llamarme, yo también lamento lo que paso y si, quiero ser tu amiga, pero hoy es tu día libre por tu aniversario, así que debes pasarlo junto a tu esposo. Hablaremos luego.

-¿Qué te parece si te invito a algún lugar?

-Acepto, este fin de semana.

-Gracias, enserio gracias.

-Nos vemos Tony, saluda a Stephen de mi parte.

-Te quiero.

-Y yo a ti.

La llamada acabo y me quede viendo a la nada un rato, el hablar con dos personas a las que les tenia plena confianza, me había calmado. Salí de la habitación, debía saber donde carajos estaba, mi intención era indagar un poco y ver a detalle la casa, empezaría por la cocina porque tenia hambre. Al salir de la habitación, rápidamente un olor exquisito a café, me hizo seguir cual caricatura su esencia, al llegar al origen de tan delicioso olor, me encontré con Stephen, estaba sentado en un bonito sofá gris con el desayuno frente a él y casi podía jurar que estaba esperándome, me miro.

-Tony, Jarvis preparo esto para nosotros.

Me senté a una distancia prudente y comencé a comer, porque no sabia que decirle sobre todo esto que esperaba que fuese temporal porque de lo contrario me volvería completamente loco.

-Encontré el vídeo de nuestra boda- Me atragante con el café- De la boda de quien quiera que seamos ahora.

Nos miramos, no sabíamos que decir, al parecer, ambos debíamos hacernos la idea de que estábamos casados y que seguro, esto tardaría en resolverse.

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Gracias por leer. <3

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~Ghoost