Invulnerable

Capitulo 16. Silencio eterno del mar

Mirad su vestido, pegado al cuerpo como un sudario, mientras el agua gotea sin cesar de sus ropas. [...]

Se arrojó temerariamente. ¡Que importaba que el agua estuviese tan fría!... ¡Piensa en esa agua, hombre disoluto: imagínala, sumérgete en ella, lávate en ella, bébela si es que puedes!

¡Tomadla con ternura, levantadla con cuidado; tan frágil, tan joven, tan bonita!

—The Bridge of Sighs, Thomas Hood

Hayley descendió las escaleras sin prisa, escoltada por Ahren. Sus zapatos de tacón marcaban el sonido de sus latidos y una sonrisa de oreja a oreja surcaba su rostro. El recuerdo de la última vez que estuvo en esas mismas escaleras pero con ropa simple, paso por su mente. El presentador hablo con voz calma y refinada.

—La querida señorita Stone Miller y nuestro preciado Ahren Miller

A esas palabras le siguieron una ronda de aplausos sofisticados. Sus padres la esperaban al final de las escaleras con los brazos entrelazados. Claire estaba refulgente y vestía un precioso vestido azul para combinar con los ojos de su marido. Era increíble lo bien que le caía Paul en eventos como ese.

Hayley llego junto a ellos apartando su cabello del rostro, sin detenerse  a mirar a nadie más. Ahren le guiño un ojo a la cámara y rápidamente volvió a mirar las escaleras para ver a Aissa, y a los abuelos bajando las escaleras. Era la perfecta entrada teatral que Claire planeo.

Cuando la familia completa estuvo junto a las escaleras tomaron sus asientos en una mesa dispuesta especialmente para ellos. Claire, en cambio no se sentó y se dirigió al palco. La multitud se mantuvo quieta a esperas de su discurso. Ella acomodo su vestido para que se notaran sus zapatos y a continuación dio una larga sonrisa, prolongando el momento. Hayley era igual de excelente dando sonrisas cautivadoras, lo aprendió de ella. El presentador hablo una vez más antes de dar lugar a Claire.

—Este día nos reunimos para despedir la antigua gloria de uno de los hoteles más trascendentales que hemos tenido en el país. Concluyentemente el legado que la familia Miller nos dejo es invaluable y hoy remozaremos todo eso en un hogar para niños de escasos recursos. Si bien el hogar no estará en su máxima capacidad hasta febrero, queríamos pasar este último día del año rememorando antiguos tiempos. Un aplauso, por favor.

Siguió otra ronda de aplausos sofisticados, eran como el murmullo de las hojas. Hayley mantuvo la vista fija en su madre con un ligero levantar en las comisuras de los labios.

—Para mí es un honor—Claire puso la mano a la altura del corazón para recalcar sus palabra—ser parte de todo esto que mis padres iniciaron. En nuestra cadena de hoteles siempre nos destacamos por esa elegancia con un toque antiguo que nos da la sensación a hogar. Espero que los niños que vivirán aquí encuentren un hogar en el hotel albergue M&S. Muchas gracias.

Volvió a sentarse junto a Paul y a su vez Aissa se levantó para hablar. Luego la siguió su abuela haciendo que sus palabras llenaran su corazón de nostalgia, excepto cuando Aissa dijo lo bueno que era que los niños aprendieran a apreciar su buen gusto en la decoración de los cuartos.

Cuando todos hablaron el público se puso de pie para dedicarles un aplauso más.

—A continuación la señorita Stone nos dedicara una canción al piano para deleitarnos un momento. Tomen asiento, por favor.

Hayley asintió cuando todas las miradas recayeron en ella y se levantó para dirigirse al piano. Al igual que Claire, sonrió antes de hablar.

—Buenas noches. Este hotel es uno de los recuerdos más preciados que tengo de mi infancia, detrás de todos estos pilares renovados y este piano brillante con teclas perfectas, esta una niña que solía venir a tocar aquí. Y a esa niña le costó despedirse de estas cosas y sus recuerdos, pero la vida está en constante renovación, queramos o no. Espero que de hoy en mas este hogar sea un lugar donde nazcan sueños deliberados y amistades profundas, que nadie se pierda en el camino. Elegí esta canción porque muchas veces nos sentimos asfixiar, sentimos que no hay nadie a nuestro lado, pero les quiero decir que a pesar de que todo se vea mal, siempre tendrán a ustedes mismos para salvarse. Gracias y les deseo la mejor de las veladas.