capítulo V

22 2 0
                                    

Jack:

Me levante con el reflejo del sol asomándose a mi ventana, me sentía totalmente confundido por lo que podría pasar el día de hoy en la casa de Rose y recordé que la noche anterior Manuel casi fue descubierto.

Dejando de pensar me levanto con todo mi cabello revuelto y descamisado, entró al baño y tomó una ducha para salir a trotar como todas las mañanas.

Después de una relajante ducha salgo con una toalla alrededor de mi cadera y con gotas de agua recorriendo mi pecho para llegar a mi abdomen, sacó unas sudaderas de mi armario y me visto, me pongo unos tenis ya para salir pero al llegar a la cocina una nube de recuerdos entra mi mente.

-buenos días Jack -dijo mamá

-hola mamá -le doy un beso en la mejilla

Ese me dio mucha nostalgia y en estos momentos cada vez que entro a la cocina recuerdo tu dulce voz dándome los buenos días y mostrándome esa sonrisa que para mí fue una luz de vida.

Flashback:

Me encontraba sentado en el sillón sólo esperando a que mamá volviera a casa, ya que gracias a los golpes de papá (o el que se supone que es mi padre) terminó en el hospital con graves heridas en su rostro.

Noté que la puerta se abrió y vi que era mell ayudando a mamá a entrar a la casa. Me levante del sillón y me acerco a ellas observando el rostro de mi madre que estaba todo lleno de moretones  y con una venda en su mejilla.

-Ma... Má -susurre

-jack... -logro decir con una sonrisa

-¿Estás bien? -le pregunté con lágrimas en los ojos

-si, no te preocupes -sostenia esa sonrisa -¿Donde está tu padre?

Tenía la dicha de preguntar por ese idiota

-en la cárcel -dijo mell

-pero... -hablo mamá ya sentada en el sillón

-mamá es lo mejor -le interrumpió

Fin del flashback.

Salgo de mis pensamientos ya que sin darme cuenta estoy llorando por esos recuerdos nostálgicos que invaden mi mente.

Ese momento mi padre terminó en la cárcel durante diez años.

Me limpio las lágrimas y tomó un jugo de la nevera y unas tostadas que hice, miro la hora y me dio cuenta que es tarde, Salgo de casa para trotar hasta la casa de Rose y así aprovechar mi ejercicio del día.

Llego a su casa la cual no está tan lejos de la mía, me acerco a la puerta con intensión de tocarla pero al estrechar mi brazo abren la puerta.

¿Rose?

-¿Jack? -dijo ella al mirarme

-hola.. -dije

-oye... Llegaste en el momento en que iba a sacar la basura -dijo muy apenada

-bueno te esperare... -hable

-muy bien.

Ella tomo las bolsas y salió corriendo a ponerla en el cesto, regreso a mi con su respiración algo agitada.

«asi va a gemir cuando la tengas» -dijo mi mente

¿Jack en que estás pensando?

-listo -me sacó de mis pensamientos -ven...

Me halo del brazo para entrar a su casa y pues noté que su casa es muy pequeña y acogedora (nada comparada a la mía, que es muy grande y fría)

Amor Entre TinieblasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora