DETRÁS DE MI

CAPÍTULO 1- COMIENZOS

POV. MADISON

- Amber, ya voy, espera!!- grito desde mi habitación.

- ¡Me importa una mierda! Vamos, o llegaremos tarde a la primera clase de la última semana.

Y si, esa es Amber Lee, mi mejor amiga desde que puedo recordar; no es que tuviese muchos amigos, pero ella era la única en quien podía confiar.

- Tranquila, bebita, que ya voy- le digo con ese mote que tanto le molesta.

- ¡No me llames así, retrasada! -como podéis ver, nos llevamos muy bien.

Cuando me subo al coche de mi amiga, me da un abrazo, y una mini ostia.

- ¿Qué haces, tonta? – le digo con una mano en mi mejilla

- Por llamarme bebita – me dice sin rodeos

- Vale, vale, lo siento. ¡Corre que llegaremos tarde! – digo riendo me de ella

- JA JA, que graciosa te has levantado hoy, no? – me dice con picardía

- No sé, es que hoy presiento alguna cosa buena...

- Pues a ver quién nos sorprende...

Amber y yo, vamos a último curso del instituto de Houston, y hoy es el primer día de la última semana, normalmente hacemos cosas divertidas, ya que hemos acabado con los exámenes finales, i la verdad, es que los he aprobado todos i con buena nota...

A lo que iba, ya que estoy, os voy a explicar mi vida: pues, me llamo Madison Willson, soy de pelo castaño, i mis queridos ojos verde, nada más, una chica normal.

En tema de familiar, Amber es como una hermana para mi y pasamos casi todo el tiempo juntas. Mi madre, una drogadicta al paro, y casi sin dinero. Os preguntareis como paga la casa, o el instituto, o hasta las drogas, pues la casa era de mi abuela, que nos la dejo con su herencia y ya esta pagada, el instituto, pues del poco dinero que nos queda, y lo que parece lo más importante para mi madre, las drogas, pues eso no lo paga, como escucháis, mi madre no le paga a su camello. Ya me diréis como lo hace, porque ni ella misma lo sabe.

En cuanto a mi padre, falleció, bueno no, lo asesinaron, la verdad es que ese caso sigue sin ser resuelto, porque los detectives no consiguieron ninguna pista que incriminara a nadie, y lo poco que consiguieron, no fue nada: un par de bolsas con coca de mi madre.

Cuando Amber y yo llegamos al instituto, salimos del coche, y nos encontramos con la misma escena de cada día '' que raro '' pienso con sarcasmo.

- Atención, ¡ya llego Madison Willson al instituto! – grita el subnormal de Myke, el playboy más inútil que os podáis imaginar

- Cállate Myke, no empezemos de buena mañana, eh... - le digo

- Ohh, vamos Madison, se que no te resistes a mí, ven conmigo. – dice con su típico tono arrogante hacia mí.

- Lo siento Myke, no es por ti, soy yo, que te estoy cogiendo un asco que flipas y cada día ese porcentaje augmenta...

- Myke enfadado por mi reacción, me mira y me dice fulminándome con la mirada – tú lo has querido – y se va.

- Vamos a clase Madison – me dice Amber

Cuando llegamos a clase ya está todo el mundo allí, vamos a nuestros lugares de siempre, y evidentemente yo me siento con Amber.

Cuando llega el profesor ordena a todos los alumnos que quedan de pie, a sentarse, y empieza a hablar.

- Como bien sabéis, chicos, esta es la ultima semana de instituto, ya que pronto os vais a graduar. Así que, como sorpresa de todo el profesorado y personal del instituto, ¡¡os damos la sorpresa de que el viernes vamos a hacer un viaje de fin de curso a Alemania durante todo un fin de semana!!