Capitulo 2: No querían una vida normal

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Era un día martes, Ralph y Holy estaban en la habitación del primero, bebiendo soda y comiendo algunas chucherías. Jugaban Need for speed, en una pequeña consola que le pertenecía a Ralph. Sentados sobre la alfombra del piso.

- Este ya me aburrió. - Bufo Holy. - Pon Mortal Kombat. - Pidió frunciendo las cejas.

- Ya, ya. Es la última vuelta, no te la aguantas porque estas perdiendo. - Comento riéndose burlón.

- Psss si, ya verás. Estoy primera, no hay siquiera un coche delante del mio. - Ralph mordía su labio inferior sonriente.

- Es porque vas última. - Volvió a burlarse.

- ¡Ay!, mierda. - Se quejó Holy. La puerta de la habitación fue abierta por la madre de Ralph, Lidia.

- Chicos, hace varias horas que están aquí, salgan un poco a respirar el aire puro. Afuera esta hermoso. - Opinó.

- Espera mamá, terminaremos esta partida y nos largamos para que puedas ir a hacer pactos en el ático. - Bromeo Ralph.

- ¡Ralph!, ¡vamos! - Volvió a pedir la mujer, con tono demandante.

- Esta bien. Vámonos Holy. - Dijo él apagando la consola. Ambos se levantaron y salieron de la habitación, bajaron los escalones y las hermanitas de él, los atropellaron mientras subían, reían y canturreban.

- Ralph y Holy se van a casar. - Decían las dos niñas, una de ellas, la mayor, y la que lideraba el canto, por así decirlo, tenia diez años y la otra cinco.

- Callense escorias. - Bufo Ralph. La más grande se hecho a reír.

- ¿Qué es una escoria? - Pregunto la menor.

- Algo lindo. - Respondió Holy, aguantándose las ganas de reír. Ralph la miro y también se contuvo.

- ¡Mami!, soy una escoria. - Grito la menor. Holy y Ralph soltaron una enorme carcajada. En realidad ellos dos eran las escorias.

Salieron corriendo de la casa y comenzaron a caminar por la acera.

- ¿Donde iremos? - Cuestiono Holy.

- Al parque. - Aviso Ralph, metiendo ambas manos en sus bolsillos.

- ¡Diablos!, olvide mi teléfono en tu habitación. - Dijo ella.

- Luego volvemos y lo buscas.

- ¿Y si tus hermanas lo encuentran?

- Verán todo el porno que tienes ahí, y su inocencia saldrá disparada por la ventana. - Dijo Ralph riendo. Ella lo golpeó con el codo.

- Eres un sucio. - Comentó riendo.

- Ya lo se, tonta.

Llegaron al parque y ambos corrieron hasta los columpios.

- Iré más alto que tú. - Grito Holy mientras subía. Jugueteaba con sus pies.

- No, yo iré más alto y luego más lejos. - La contradijo él, moviendo sus cejas. Cuando ambos tomaron una velocidad y altura considerable saltaron de sus columpios. Cayeron sobre el césped y de inmediato levantaron sus cabezas para ver quien había llegado más lejos. - ¡Te lo dije!, gané. - Festejó Ralph. Holy golpeó el suelo con su puño, se levanto y fue a ayudar a su amigo a levantarse.

- Vaya, vaya. Mira quienes se van allá. - Dijo Holy apuntando hacia la calle. Ralph miro.

- Ahgg... Creí que era algo importante. - Se quejó él, al ver que Holy se refería a su hermano y sus amigos.

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