El Bosque de las Lágrimas

Capítulo 8: No todo es lo que parece

Craft se encuentra perplejo mientras mira todo a su alrededor y ve que todo se ve normal. ¿Tal vez la pesadilla cesó finalmente? ¿Seguirá perdido en un infierno infinito?

Mientras camina revisa su reloj y nota que son las 16:30, según su hipótesis que el tiempo corre de manera diferente dentro y fuera del bosque pues trata de buscar una persona para preguntarle la hora y fecha exacta. Ve a un señor pasar y va tras él para preguntar.

—Disculpe, ¿podría decirme el día y la hora exacta? Por favor, ando medio desorientado —pregunta el investigar al señor.

—Claro, ehhhh, pues son las 18:00, y hoy estamos a 28 de abril —contesta el señor con una sonrisa —. Disculpe, ¿se encuentra bien? —le pregunta el amable señor al ver la ropa ensangrentada de Craft y su aspecto deplorable.

Craft se percata de algo y sale corriendo enseguida luego de que el señor le conteste. El señor solo se quedó observando mientras el extraño investigador se fue corriendo.

«Llegue a esta ciudad un 9 de abril, no puede ser que haya pasado tanto tiempo desde que ingrese a este bosque y salido», piensa fugazmente el pálido investigador mientras va a la fiscalía de San Claymond para obtener respuesta. Llega a la fiscalía sin aliento, y pregunta por el inspector Rodríguez, los oficiales que estaban ahí solo le responden que hace apenas unas horas había partido con un grupo de escuadrones de fuerzas especiales en busca de su persona. Craft no puede creer lo que está pasando, pensando que sería una alegría salir del bosque pero nota que había abandonado sus demás camaradas y ahora el inspector había entrado por él.

— ¿Me pueden dar un arma y unos cuantos cargadores? Necesito ingresar y buscar al inspector y los demás en el bosque pero tengo escasa munición. —pregunta al parecer oficial a cargo.

Todos se quedan observando durante unos segundos al investigador.

—Esa herida parece muy profunda, debe ir al hospital para chequeársela —agrega el oficial.

—Es solo un rasguño esto —replica Craft—. No me creerías si te digo que me causo esta herida.

Todos se quedan boquiabiertos ante la incertidumbre.

—Pues oficial, ¿me conseguirá el arma o no? —expresa Craft.

—Claro, oye tú, búscale un arma y unos cargadores —ordena el oficial a uno de los hombres—. Espero que pueda encontrar al inspector, ya todos estamos alertados sobre el bosque. El inspector dio órdenes que si no recibíamos señales de ellos en apenas tres días suspendiéramos todo contacto de ayuda y que nadie ingresara, pero verlo a usted aquí me dejo atónito.

Craft se queda callado unos segundos para luego contestar.

— ¿Supongo que todos actualmente están alertados sobre lo paranormal del bosque? —comenta Craft con una mirada.

—Más o menos, todos crecimos en esta ciudad con los mismos mitos e historias que nos contaban y la mayoría cree eso mismo; cuentos... al final todos tienen cuidado y no ingresan al bosque por cuidado, algunos que otros jóvenes o personas entran y no se saben de ellos jamás o regresan —expresa el oficial.

— ¿Harán publicó la desaparición de los hombres que fueron con el inspector luego de esos días? —menciona Craft.

—No, buscaremos una excusa válida para que los familiares nos crean, no todos pueden creer esto, sería una locura decir que un bosque atrapa gente y que está nunca vuelven —agrega el oficial.

—Bueno oficial, no creo que sea viable esa opción —discrepa alejándose el sensato investigador.

— ¿Que usted sugiere?