Príncipe Jeon (Jungkook & Tn)

3.

-Usted puede--dijo la señora Lee palmeando mi hombro

-Gracias--dije sonriente

Salí al jardín en dónde me encontré con mi padre y mi hermano mayor, JungHyun. Ambos éramos los herederos al trono, por lo que mi hermano ha creado cierto resentimiento hacia mi, aunque mi padre lo quiera mucho más a él y aunque a mi me parezca el hermano más genial.

-Hyung...--lo saludé haciéndola una reverencia

-Hola Jungkook--dijo mirándome con esa mirada fría y llena de rencor completo

-Papá--dije de la misma forma

-Al fin llegas, te esperábamos--dijo

-Estaba...jugando--dije y mi hermano río amargamente

-¿Y esperas que él lidere?--preguntó

-Déjalo, aún es un niño--dijo mi padre

-No soy...un niño--dije mientras miraba mis pies

-Eres un inmaduro Jungkook--dijo mi hermano--si tan solo por una vez te importara tu puesto dentro de la familia

-Si me importa--dije

-No parece, ni un poco--dijo

-Como sea, vamos--dijo mi padre

Ambos comenzaron a caminar dejándome atrás, de repente sentí una mano palmear mi espalda y me percaté de que era la señora Lee. Ella me sonrió levemente y me incitó a que caminara detrás de ellos, odiaba este tonto cargo.

Una vez terminé de pasar una larga tarde con mi padre y mi hermano aguantando sus malos comentarios, subí a mi habitación para encerrarme ahí.

Me saqué la ropa y entré a la ducha para relajarme un poco, odiaba todo esto y odiaba que mi hermano llegara a casa, solo ponía a mi padre en mi contra para que cada día esté menos seguro de mi.

Estaba realmente enojado, quería golpearlo en este momento pero sólo arruinaría las cosas.

Una vez salí de la lucha me coloqué ropa cómoda y salí de mi habitación, bajé las escaleras hacía el primer piso para llegar al jardín y camine hacia la parte trasera de la casa. Ahí había una puerta de salida para los empleados, siempre tenía una cerradura a la cual le saqué copia de una llave, por ahí me escapaba de la casa cuando estaba harto de todos ahí adentro.

Una vez afuera me escondí bien de todos los guardias que están por el sector, acomodé mi buzo y la gorra que tenía para caminar lo más rápido posible alejandome de la casa.

Caminaba por las calles de la ciudad sin mirar mucho a las personas o podrían reconocer que soy yo. Estaba cabizbajo con mis manos en los bolsillos de mi pantalón mientras disfrutaba de otro ambiente.

De repente chocó con alguien y ni siquiera miró quien es por cuestiones de discreción, pero por su voz insultandome pude notar que era una mujer.

-Oye, idiota mira por dónde caminas--dijo enojada y siguió de largo

Aún observando el piso note que se le había caído algo, recogí el pendiente y lo analicé en mis manos. Me giré para ver si la chica seguía por ahí pero no, ¿cómo pudo desaparecer tan rápido?

Llegué a un restaurante y antes de entrar observé a una pequeña afuera quien pedía algo de comida, mi corazón instantáneamente se hizo pedazos al ver que ella me miraba con ojos de súplica.

Entre al restaurante y ordené algo para llevar. Una vez recibí el pedido, salir del lugar en busca de la pequeña quien seguía pidiendo dinero.

-Señor, ¿podría darme para algo de comer?--preguntó a un hombre de traje quien hablaba por teléfono

-Señor...por fa..--la interrumpió

-Cállate niñita--dijo empujándola levemente

-Oiga--le dije al hombre--es un degenerado ¿cómo puede tratar a una niña así?

-¿Y tu quien eres para decirme que hacer?--preguntó

-No creo que quieras problemas, muchacho--dijo acercándose a mi

-Más bien usted no quiere problemas--dije bajando mi tapabocas y el me miró sorprendido

-Su alteza...--dijo y se arrodilló--mis más sinceras disculpas

-No se disculpe conmigo, disculpese con la niña--dije

-Perdoname...--le dijo

Me arrodillé para quedar a la altura de la pequeña quien también me veía sorprendida.

-Es el príncipe--dijo y yo sonreí

-¿En dónde está tu madre?--pregunté acomodando un mechón de su cabello detrás de su oreja

-Dijo que ya volvía, fue a buscar dinero--dijo--porque no tenemos para comer

-Ya veo...--dije

-Compré esto para ti--dije enseñándole la bolsa de comida

-Mami dice que debemos ganarnos las cosas, no que sean gratis--dijo

-Te la has ganado por ser tan adorable--dije

-Además es un regalo del príncipe--dije--¿acaso no te agrada el príncipe Jeon?

-Adoro al príncipe Jungkook--dijo sonriente--mi sueño es ser una princesa

-Ya eres una linda princesa--dije acariciando su mejilla

-Adelante, come mientras esperamos a mami--dije

Me senté en el suelo a su lado mientras ella comía, era adorable y estaba muy feliz por comer. Las personas que pasaban nos miraban asombrados por el hecho de que yo estuviera en la calle, si se enteraban en la casa me iban a matar.

-¿Como te llamas?--le pregunté

-Han--dijo

-¿Han?--pregunté y ella asintió

-Lindo nombre--dije

-Gracias--dijo--el príncipe es lindo

-Oh, muchas gracias--dije

-Han ¿qué estás haciendo?--preguntó una voz femenina

-Mami, el príncipe!--dijo emocionada

-¿De que estás...--la señora me miró

-Ay por Dios...--dijo--su alteza--comentó y se arrodilló en el suelo

-No, tranquila--dije ayudándola a levantarse--no es necesario

-Es un placer tenerlo enfrente--dijo haciéndome una reverencia

-Le he hecho un regalo--dije señalando la bolsa de comida

-Y si me permite...--dije sacando algo de dinero

-No, su alteza ¿cómo se le ocurre?--dijo--estamos bien

-Tranquila--dije dándole el dinero--es un regalo de parte del príncipe

-No se...como le voy a pagar..--la interrumpí

-No debe hacerlo--dije

-Muchas gracias...su alteza--dijo y tomé su mano

-No hay de que

-Han, debo irme--dije colocandome a su altura de nuevo

-Nooo--dijo y reí

-Espero que hayas disfrutado de la comida--dije

-Me gustó--comentó sonriente

-¿Cuidate mucho si?--pregunté y ella asintió

-¿El príncipe no se olvidará de mi....verdad?--preguntó

-No, no lo haré--dije y besé su frente

-Gracias su alteza--dijo su madre y asentí

-Lo que sea por ayudar a mis habitantes--dije--por favor cuide bien de Han y de usted

-Si, lo haré--dijo sonriente

Me despedí de ambas y camine de nuevo hacía casa, bueno, al menos le he alegrado la noche a una pequeña y a su madre.