🍃¿Híbrido? 🍃 || Seonsang

🍃 [09] 🍃

Seonghwa y Yeosang estaban sentados en el sofá del departamento, uno veía un punto fijo mientras el otro solo se movía de su lugar de forma nerviosa. Ninguno tenía la más mínima idea de cómo comenzar a hablar.

— Lo siento, no era mi intención asustarlo — Yeosang había tomado la iniciativa, dejando a Seonghwa impresionado, él creía que rompería el incómodo silencio.

— No te preocupes, supongo que no debí reaccionar esa manera. ¿Qué eres en realidad?— Seonghwa posó su mirada a lo que era un minino hace unas horas.

— No lo se, solo se que me puedo transformar en ese animal, también puedo solo mostrar mi cola y mis orejitas o quedar así como tú— Respondió con emoción, jugando con la orilla del suéter que le había dado. Seonghwa solo pudo mirarlo enternecido, pues le había parecido demasiado tierno la forma en la que sus ojos brillaron.

— ¿cómo es que terminaste en ese callejón? — Pudo notar como el híbrido se ponía triste, sus ojos habían perdido el brillo de hace unos segundos. Se golpeó mentalmente por preguntar algo así, pero la curiosidad le ganaba.

— Los señores que me cuidaban antes, me dejaron allí junto con mis hermanos pero ellos fueron a buscar comida y ya no volvieron — Respondió decaído, pero se sorprendió demasiado cuando sintió una gota de agua salir de su ojo. La quitó rápidamente mirando el techo, creyendo que la gota había caído en su cara desde arriba.

— Estas llorando, no hay nada desde el techo. Es imposible que caiga agua de allí. — Le sonrió, mirando como este lo volteaba a ver con una mirada confusa.

— ¿Llorar?¿por qué llorar?

— La gente llora cuando esta triste, ¿estas triste por tu hermanos?

— Si, los extraño— Susurró, poniendo sus rodillas en su pecho para apoyar su cabeza allí.

— Te ayudaré a buscarlos,¿te parece? — Seonghwa acariciaba su cabeza, tratando de reconfortarlo, algo que San agradecía, le gustaba mucho cuando su dueño cuidaba de él.

Como si el destino lo odiará, la puerta fue tocada al mismo tiempo que San gritaba que le abriera porque era él y quería pasar el día juntos. Obviamente, Seonghwa estaba nervioso y asustado, ni sabía qué hacer,¿y si entraba san y veía a yeonsag? Sabía que eso sería declarar la guerra y era lo que menos quería. Se levantó del sofá viendo en todas la direcciones tratando de hacer un plan.

— Yeosang, ¿podrías transformarte como un gatito? — Se dirigió al más joven, quien sacó su rostro de sus rodillas y lo miró confundido. Seonghwa respiró para calmarse. — Necesito que seas un gatito, te juro que cuando se vaya San, te compro lo que quieras— Hablo como si de un niño se tratase. El más joven asintió emocionado para luego volverse un gatito como lo pidió.

Apenas noto la transformación, corrió a abrir a su pareja. Justo cuando la abrió, miró nervioso a San, quien tenía sus ojos entre cerrados y los brazos cruzados.

— ¿Por qué tardaste tanto en abrir? Mejor aún,¿por qué estás tan nervioso? — Escupió su pareja.

— No estoy nervioso, y tarde porque me había quedado dormido en el sofá. — San lo empujó para entrar al departamento, observando todo con detalle.

— La única vez que te vi así de nervioso fue cuando me pediste que seamos pareja — Cuestionó. San Se relajó cuando pudo ver que no había nada extraño en el departamento, así que se giró y puso sus brazos alrededor del cuello de Seonghwa. — A la próxima, avísame que te dormirás, para tener en cuenta que tardarás en abrirme. — Después de decir aquello, empezaron a tener una sesión de besos.

Por otro lado, el minino veía la escena un poco triste. Yeosang no entendí porque su corazón dolía cuando veía a su dueño con esa persona. Había escuchado por las noches cuando hablaba con el objeto raro en su oreja, diciendo que ya no quería a esa persona, por lo que se cuestionaba,¿si no lo quiere por qué le da cariño? Supuso que lo mejor sería preguntarle a su hermano Wooyoung cuando lo encontrara.