Todo Arruinado. ☞ChriErick☜

☞[15]☜

-Chris... ts... Chris...

-¿Mh...?

-Chris... -habla más fuerte con un tono dulce.

Este solo paso su brazo sobre Erick para acercarlo más a el y meterse en la curva de su cuello.

-¿Que sucede, cielo?

-Chris... no es que seamos fastidiosos pero... creo que Aiden quiere nacer hoy.

-¿Aiden...? -Christopher solo abrió un ojo mientras procesaba aquello. -¡Aiden!

Avento las cobijas dispuesto a irse, tomó lo que su mamá le había dicho preparara para este día y el estaba en la puerta listo para irse pero Erick seguía recostado en la cama.

-Sabes... me duele todo en este momento, no traes camisa ni zapatos y es obvio que no estás llevando al embarazado que es lo importante.

-Lo siento, lo siento, lo siento. -Christopher pasó una camisa por sobre su cabeza con prisa para ayudar a Erick a sentarse en la cama. -¿Quieres cambiarte? ¿O quieres...

-Quiero irme, eso quiero. Solo tienes que tranquilizarte o los dos seremos un desastre...

-De acuerdo.

Christopher colocó unos zapatos cómodos en Erick cargandolo hasta la salida y dejarlo en el auto.
El camino fue lleno de preguntas, Erick apretando su mano con fuerza.

-Voy a estar aquí cuando salgas, ¿De acuerdo?

Solo asintió frotando su frente con la de Christopher y suspiro por el dolor que sentía en la espalda.

-Te amo, Emo Christopher, aunque ya no seas un emo y no me llames engendro. -rio mirando los muy abiertos ojos de su novio.

-¿De verdad?

-Si... extraño tu cabello azul... -rio bajito.

-Creo que la anestesia ya hizo efecto -menciono una enfermera.

-Oh... así que vas a decirme todo, niño terco...

-Puede ser... puedo decir que eres muy guapo, cuando te vi dabas miedo pero ahora solo espero con todo mi ser que uses esa gran longitud tuya dentro de mi... -acerco a Christopher a sus labios solo tirando de estos.

Estaba rojo, el emo- rebelde- nadie me quiere- soy grosero, estaba tan avergonzado frente a 5 enfermeros y el doctor escuchando aquello.

-Cielo... hablemos de otra cosa... -pido aún cuando recibió otro beso.

-¿Como de que en las mañanas cuando me ves finges no tener una erecc...

Christopher lo silencio con un beso.

-¿Algo más que quieras decirme? -sonrio Christopher.

-Recuerda... Aiden Vélez Colón, lo escribí en tu teléfono por si lo olvidas. -susurro Erick. - No vayas a escribirlo mal o te mataré... -rio de nuevo.

-No lo haré, puedes estar tranquilo. -Estaba tan nervioso y enternecido al verlo.

...

-Deja de verlo esta bien, solo deben cambiarlo.-dijo su mamá al verlo pegado al vidrio del cuarto de bebés. Había llegado hace unos minutos cuando dieron las 6 de la mañana.

-¿No se tardaron mucho ya? No me dejan ver a Erick tampoco.

Ella lo jalo llevándolo a sentarse aún con la vista en su bebé en manos de 3 enfermeras.

-Debes relajarte, Erick debe descansar y tu tienes que estar tranquilo por que lo que se te viene es peor que esto. -sonrio ella.

-Una cosa a la vez, mujer... -se cubrió el rostro.

-¿Señor Vélez? -hablo un enfermero.

-"Señor". -su mamá de burlo.

-¿Si?

-Su esposo está despierto y amenaza con venir a buscarlo el mismo.

-"Tu esposo..." que lindo... - menciono su mamá cubriéndose la boca. -digo... ve, yo cuidaré al bebé por ti solo hoy.

Camino hasta el cuarto encontrando a Erick amenazando a una enfermera con un cuchillo sin filo que entregan de la cafeteria.

Sus ojos se encontraron y las manos de Erick bajaron soltando el cuchillo y abrazando a Christopher antes de sujetarlo por el cuello de la camisa como a la chica.

-¿¡Donde esta mi hijo?! ¡Nadie quiere traermelo! ¿Tiene algo? ¿A caso tiene lo mismo que...

-Oye... mirame... solo por unos segundos...

Se quedo quieto viendo directo a sus enmielados ojos.

-El esta bien, escuche que tiene unos preciosos ojos y que solo es el chequeo de rutina, esta bien, solo están algo preocupado por que llegaste una semana antes de lo acordado.

-¿Seguro que es solo eso?

-Si, si, ven aquí. -levanto su cuerpo del piso y lo dejo tendido en la cama pasando las cobijas blancas sobre su cuerpo. - El estará aquí pronto... además mi mamá está afuera cuidando que esté bien.

-¿tu mamá vino?

-Si... solo tranquilo y nos iremos muy pronto de aquí.

-Bien...

-Por cierto... -Christopher se inclino a besarlo. - ...yo también te amo.

-¿C-Como que tambien...

-Cuando te anesteciaron... dijiste varias cosas...

-Oh... eso... -sus mejillas estaban rojas.

-¿Entonces...

-Si... yo si, te amo... -lo miro a los ojos. - Te amo mucho.

-Y sobre lo otro. -susurro Christopher. - Dicen que no podemos tener sexo hasta después de 40 días.

-¿Q-Que... Y-yo no quiero nada de eso...

-Puedo repetir lo que dijiste. "Y que uses esa gran...

-¡Shh! ¡N-No es cierto! -el se cubrió el rostro aún aceptando los besos de Christopher.

-Bien, solo debes estar tranquilo...

Cuatro enfermeras estaban enternecidas con la escena al igual que la que había traído al bebé que seguía en la puerta.

Erick movió a Christopher tomando asiento cuando vio a su pequeño.

-¿Puedo, puedo, puedo? -retiro los brazos recibiendo a su bebé aún dormido.

-Es muy tranquilo, mientras lo limpiamos siguió dormido.

Erick solo la ignoro y miro a Christopher para que se acercara.

-Esta aquí... es tan pequeñito...pequeñito...-Erick acarició su rostro emocionandose cuando el pequeño abrio sus adormilado ojos, verdes. -Hola, Aiden...

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