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Aiden tenía más de un año y pensaron que sería lindo familiarizarlo con los guardaespaldas. Lo que no pensaron era que tan bien iba a llevarse con ellos que ya era normal todos los días ver a sus hombres, escoltas con crímenes en su historial tan enternecidos al ver a Aiden caminar hacia ellos.

-Lo siento, señores, pero Aiden debe cenar e irse a la cama. -sonrio es escuchando un abucheo de parte de los guardaespaldas.

-Los vemos mañana. -rio christopher acompañándonos a la puerta.

Y así fue al día siguiente Erick había mandado a cortar toda flor que hubiera cerca para que su pequeño pudiera salir al jardín.

Lo dejo caminar en el pasto con los pies descalzos para que sintiera este entre los dedos.

-¿Te gusta? -pregunto Erick soltando su mano para que caminara solo.

-Oh, aquí estan.

Christopher se sentó en los asientos de concreto solo para observarlos.

-Creo que le gusta esto.

-Si. -dijo Aiden tambaleándose un poco y no caer cuando uno de los guardaespaldas corrió a atraprlo.

-Con cuidado, Aiden. -sonrio el volviendo a su posición.

-Creo que no hay persona que no caiga por Aiden. -menciono Christopher riendo.

Minutos más tarde 5 de sus hombres estaban sentados en el pasto al rededor de Aiden esperando a que este les entregara una piedra bonita a cada unos.

-Sabes, ahora comienzo a cuestionarme si son las mismas personas a las que contrate.

. . .

-¿Que sabor te gustaria?

-¡Fresa! No... Cho... cho... -Aiden a sus 3 años estaba sentado en la cocina junto a sus 3 cocineras.

-Chocolate.

-¡Sii!

-Puedes decorar este por ahora. -una de las chicas le pasó un pastel más pequeño color azul. - puedes ponerle las chispas de colores.

Estaba maravillo cuando le entregaron el pequeño bote de colores.

-Basta... tonto. -Erick se quitó los brazos de Christopher de los hombros para que solo lo apretara más esta vez de la cintura.

-¿Por que hueles tan bien hoy? -susurro Christopher.

-Buenos días, Aiden. -Erick se acercó a besarlo seguido de Christopher. -Buenos días, chicas. ¿Que están haciendo?

-El muchacho Aiden, muy amablemente nos pidió por favor que lo ayudaremos con dos pasteles.

-¿Pastel? ¿Tu... sabes que papá Christopher cumple años?

Aiden asintió con una sonrisa. -Yo... escuche ayer... si, ayer.

Christopher se limpió la garganta soltando a Erick y dándoles la espalda para que no lo vieran por unos segundos. Carraspeo y sostuvo a Aiden en brazos. -Cumpli 27... estoy demasiado viejo ya.

-Chris... ¿Estas bien? -Erick se acercó besando su quijada. -Estas llorando.

-Es solo que no se como expresar lo feliz que me siento.

. . .

-¿Estas seguro? -pregunto Erick a Christopher mirando su brazo, le habia dicho que era un regalo de San Valentín atrasado por que no estuvieron juntos ese día por el trabajo pero no imagino esto.

-Es real, Erick.

-Uh...

-Oye, Emo Christopher... ¿No quieres ir a la cama y mostrarme mejor tu tatuaje...? -acaricio una rosa mitad roja y negro con números cerca de esta que ahora estaría permanente en el brazo.- Ya sabes... podrías sostener mi cintura mientras entras en mi y muerdo tus manos para no gemir tan alto.

Todo Arruinado. ☞ChriErick☜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora