Un Romance en los abismos

Capítulo 4: Los círculos más profundos

Capítulo 4: Los círculos más profundos.

Y es precisamente ahí donde los ojos oscuros de Ash empezaron a observar lo más oscuro, en lo más alejado donde cortaba el magma un enorme rio de sangre se hacía presente, Ash quedó mudo y su amarillo compañero miraba aun desde su mochila con total terror como grupos y grupos de condenados se quejaban muriendo y reapareciendo en los ríos de sangre hirviente, como aquel enorme rio estaba completamente lleno de figuras sin otra cosa en voces que rogando por perdón. Al mismo tiempo Ash pudo ver como varios rapidash envueltos en llamas negras y pelaje oscuro vigilaban a los que intentaban huir de su tormento arrojándoles fuego para devolverlos a su lugar. Ash nuevamente se preguntaba que habían hecho aquellos desgraciados para tan horrible destino.

— ¿Qué fue lo que los trajo aquí, sombra?

—Este círculo está completamente lleno para los que se atrevieron a cometer violencia contra otros, aquellos que se atrevieron a abusar de su poder, de su ventaja o simplemente de su odio para hacer sufrir con total desprecio a otros, los violentos llegan aquí por herir a inocentes por mero placer o ambición y dependiendo que tan grave sea pueden ser cubiertos hasta las rodillas o hasta el cuello por la sangre hirviente que derramaron.

— ¿Me espera alguien aquí?

—No lo sé, es algo que solo tú sabrás... llegamos a tierra, nuestro objetivo sigue ya únicamente a pie Ash.

—Andando entonces—Expresó bajando de la barca.

Su camino procedió por un bosque, donde aquellos que cometían violencia hacia sí mismos, los suicidas, eran colgados y florecían con cuerpos cual ramas. Tanto era su dolor en vida que se habían arrebatado algo que solo a ellos les fue concebido, si aquellos que quitaban vidas ajenas eran condenados a un tormento, los que lo hacían con la propia tenían uno peor. Su guía notaba como Ash lentamente comprendía el lugar en el que estaba, pero su prueba siguiente no estaba en ese círculo a pesar de siempre estar con la guardia alta; una vez que atravesaron las escaleras y llegaron a una tierra llena de niebla y ruinas de columnas, edificios y demás sabía que estaban en un circulo ajeno ya al de la violencia.

— ¿Qué es aquí, sombra?

—El penúltimo abismo, los que han sido fraudulentos, los que han engañado y se han enriquecido a costa de otros, que han vivido acosta de la inocencia de quienes les tuvieran fe yacen en esta zona... aquí... puedes ver como su vida concluye viviendo entre lenguas tan viperinas y venenosas como las palabras que los hicieron engañar a otros hasta el sufrimiento.

Los cráteres y los lugares más profundos en las fosas estaban completamente llenos de condenados que sufrían siendo estrangulados y mordidos por Arbok y Seviper de apariencias diabólicas, cada vez que intentaban escalar sobre los cuerpos de otros, estos Pokémon malignos los mordían de las extremidades y los jalaban volviendo a llenarlos con su ponzoña. Entre la niebla cuando avanzaba podía ver solo cráteres y ruinas con diseños de mujeres con cabellos y cuerpos de serpiente bajo la cintura, todo destrozado, todo en completas ruinas. Pero su trayecto concluiría con una última batalla, alguien más lo esperaba a mitad de todo.

—Entonces, has llegado hasta aquí—Expresó aquella voz de nuevo.

— ¡Vine a sacar a Dawn de aquí! ¡Entrégamela!

—Admito que me parece admirable la determinación que tienes por salvarla... No has perdido lo más mínimo aquel poder que tanto te distinguió cuando nos conocimos, Ash—Soltó finalmente mostrando su apariencia.

—Giratina ¿Por qué fue que te la llevaste? ¡¿Por qué fue que tú te llevaste a Dawn?! ¡Éramos amigos!

—La amistad no tiene nada que ver con un trato que debe de cumplirse, Ash, Dawn siempre quiso verte ganando y siempre quiso verte feliz así ella sufriera porque tu no estabas a su lado... me pareció injusto que se apegara tanto a alguien que no le correspondía que le ofrecí un trato... yo te daba la fuerza para ganar la liga, de ti dependía si la aprovechabas... pero el trato era que si ganabas y no demostrabas nada de recuerdo o aprecio para ella, Dawn vendría conmigo.