Un Romance en los abismos

Capítulo 1: Presagios

Capítulo 1: Presagios.

Ganar en Kalos había culminado finalmente su sueño, lo había conseguido llegando al mayor límite donde sus Pokémon lo habían entregado completamente, sus esfuerzos consiguieron lo que por momentos se dudaba iba a volverse real, por instantes lo que consideraba que nuevamente iba a repetirse y su retirada nuevamente terminaría con él regresando a casa con las manos completamente vacías. Entonces lejos de lloros fueron gritos de triunfo y alegría los que llenaron todo el campo, los que le acompañaron toda su travesía, los que conoció en el pasado, absolutamente todos estaban llenos de sonrisas y alegría. Kanto vitoreaba con gran fuerza el nombre de su campeón, Hoenn mostraba una joven castaña, su hermano y sus padres alegres de ver al joven talento coronarse, Johto y Unova tenían repletos lugares donde quedó su presencia recordando sus esfuerzos que lograron frutos al final. Por último en Sinnoh la situación no era diferente, pero de todos los espectadores una joven de cabellos azulados lloraba de alegría estando en total silencio frente al televisor.

—Lo lograste... al fin lo conseguiste...—Soltó secando sus lagrimas con una gran sonrisa.

— ¿Y valió la pena lo que hiciste por él? —Susurró una oscura voz que solo ella logró oír.

— ¿Q-que haces aquí?

—Vengo a tomar aquello que me pertenece, ahora ven conmigo, el trato era ese...

—No, el trato era solo si demostrabas que él era feliz sin mí, que no me recordaba ¡Y aquí no hay tal cosa que demuestre eso!

— ¿Tan segura estas, Dawn? —Soltó de nuevo, en la pantalla apareció como una joven de cortos cabellos castaños abrazaba al muchacho que sonreía sujetando el trofeo y con la otra mano le correspondía.

—No... pero eso... no puede...

—No tienes excusa... ¡Ahora me perteneces a mí! —Aquella sombra cubrió a la joven, su madre, sus Pokémon, todos despertaron alterados ante su grito de auxilio pero no había nadie al regresar, no había señales de ella.

—Dawn...—Susurró Johanna al no tener una sola imagen de su hija ni presencia de su partida.

Kalos nuevamente capta nuestra atención, el hotel donde se hospeda el grupo ya estaba en una peculiar calma pero también aparecía en una de las habitaciones una pequeña lámpara, el grupo ahí mismo se mostraba en una relajada plática comenzando lentamente a entregarse a sus cansados deseos de dormir. Todo esto había ocurrido por una breve celebración que sus amigos habían hecho para el entrenador que no paraba de sonreír por su triunfo, poco a poco las cosas iban tomando otro rumbo, conforme se calmaban Ash había recibido varias llamadas de felicitación, desde su madre Delia, el profesor Oak, Tracey, Misty, Gary, Brock, incluso May con Max y Cilan con Iris pero una persona más faltaba y se le había hecho raro no le contacta incluso cuando viejos rivales suyos como el propio Paul le felicitaron con aquella peculiar forma simple y algo fría pero que denotaba amistad a su manera.

— ¿Es la chica que te acompaño en tu travesía por Sinnoh? —Cuestionó la joven de cabello castaño de nombre Serena.

—Si... quizás está ocupada o tal vez había salido de viaje y no logró encontrar medio de hablarme... o tal vez aun no lo sabe.

— ¿Preocupado, Ash? —Preguntó Clemont.

—Ah no, es solo que... considerando todo lo que pasamos supuse sería la primera en buscarme o algo, pero bueno, apenas es hoy.

—Ella vale mucho para ti ¿Verdad, Ash? —Preguntó la pequeña Bonnie, aquellas palabras le causaron un escalofrío a Serena.

—Demasiado, Bonnie... Dios, ya es algo tarde, será mejor que nos vayamos a descansar, aun nos queda trayecto por recorrer.