Mi vida luego de eso solo se tornó en un infierno con días buenos. Ahora vivía con papá y su novia la misma situación que vivía contigo. Las peleas, los golpes que él le daba. Papá no era un héroe, era un alcohólico abusador. ¿Cómo terminaste con él? Merecías mucho más mamá. Al menos Diane, la novia de papa, pudo escapar. Se fue de vuelta a los Estados Unidos y desde entonces yo me convertí en el desquite de papá. Al menos no me golpea, con la excepción de una sola vez. Pero a veces las palabras duelen más que los puños. La salud mental es mas frágil que la física, en ocasiones. Tampoco es facil verlo ahogado en alcohol, casi sin poder razonar. Me recuerda esos malos momentos tuyos mama, y duele un poco más. Se muere un poco más mi alma. A veces pienso que yo no debería llevar esta responsabilidad. Pero recuerdo lo mala hija que fui contigo y cierro la boca. Me lo merezco. Los gritos, los insultos, las noches largas. Son mios de por vida y es tan poco comparado a lo que te hice mamá. Mi hermana ayuda a veces pero ella ya es adulta y vive sola. Además, ella ya tiene suficientes problemas. Tu muerte la dejó muy destrozada y el método que uso para olvidarte la destrozó aún más. Asi que quedo yo, en medio de los dos. A veces se llevan bien, otras se insultan y se odian a muerte. Ella me dice que yo fui una estúpida por creer en él y quererlo tanto. Él me dice que soy una inútil antisocial que mató a su madre.
Mamá, duele.
Ya tengo 19 y pude llegar hasta la Universidad. Me gradue de la superior con excelencia. Y he sacado buenas calificaciones en mi primer año de Arquitectura. Parece que lo estoy haciendo bien. Pero me siento tan vacia a veces, mamá. Me siento tan rota, como si mi alma se estuviera deteriorando de a poco. Últimamente me cuesta seguir con el peso de las cadenas en mi cuello. Mi mente flaquea, se debilita.
Mamá, lo intente.
Lo que pensé que nunca tan siquiera pasaría por mi mente. Lo que tanto miedo le tenía. ¿Eso fue lo que sentiste aquella vez con aquel cable? ¿Te dolia el corazón tanto como a mí? Mamá dime, ¿Querías dejar de sufrir?
Porque ya yo no lo soporto.
A veces pienso en la navaja en mi armario y miro mi muñeca. Las cicatrices son casi invisibles porque fueron superficiales. ¿Pero y si lo intentara otra vez? Esta vez, un poco más profundo.
Me doy miedo. No quiero esto. Solo quiero que pare mama. Quiero una vida normal, una familia normal. No tener que pensar en que papa puede morir en cualquier momento. No tener que pensar en que ya no estas, que jamás podré verte otra vez. No tener que preocuparme por tanto.
Quiero saber porque estoy viviendo, mamá. Dime, ¿Me escuchas?
Te extraño,
Te amo mami.
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El grito más silencioso
Short StorySi te contara mi vida...¿me dirías que es una novela, o una pesadilla?