Marinette la princesa

CAPÍTULO 9

Capítulo anterior:

Aída: ¿Quieres que te cuente una historia?

Mari: Vale.

Aída: Vale está historia ha pasado de verdad, le pasó a una chica que yo conozco muy bien. Empezemos. Era se una vez ...

Este capítulo:

Una chica que era hija de unos millonarios, pero ella no era feliz aunque tuviese todo lo que quisiese. Ella iba a un colegio privado donde a todos los alumnos solo le importaban la riqueza de cada familia, claro ella era muy rica pero como no le caía bien nadie por eso, no tenía amigos. Todos querían hacerse amigos de ella por dinero no porque les cayese bien.
Bueno no te he dicho una cosa, esa chica siempre a querido ir a un colegio normal o "de los pobres" según los ricos, pero ese deseo nunca se lo coincidieron hasta un día cuando sus padres se enteraron del por qué ella no tenía amigos, al principio se creían que era porque no les caía bien porque eso es lo que les decía, pero un día ya no aguanto más y se lo dijo. Ellos le concedieron ese deseo pero había una restricción, era que no iba a ir a un colegio público en esa ciudad porque si lo descubría algún rico se iba a burlar de ellos, por eso la mandaron a otro lugar. Bueno le mandaron más bien con sus abuelos, que vivían en esta misma ciudad. Cuando llegó estuvo unas semanas estudiando Chino, aunque sabía un poco, bastante, no llegaba al nivel de los de su curso, por eso sus padres le dejaron unas semanas para que aprendiera más, para que se acostumbrase al horario y para explorar un poco.
Cuando empezó en el colegio todo salió muy bien, hizo muchos amigos, amigos que le querían por como era no por dinero como los de el otro colegio. Pero no les dijo que era rica, por si un caso. Un día cuando una de sus amigas hizo una fiesta de pijamas jugaron a verdad o reto, ella escogió verdad, entonces sus amigas le preguntaron que si tenía algo que contarles que no les había dicho ya, la chica respondió con sinceridad y dijo que sí, todas se sorprendieron porque, aunque la conociesen de muy poco tiempo sabían que ella les era sincera. A la siguiente ronda cuando le tocó otra vez, le preguntaron que qué era lo que no les había dicho, la chica con nerviosismo les contó todo. Las chicas a pesar de eso la siguieron tratando igual, como si no hubiera pasado nada. Ella les agradeció eso, ya que quería ser tratada igual, no quería que le tratasen como una pija o un ser del más allá. Unos años más tarde, ella fue informada de una tragedia, sus padres murieron en un accidente de tráfico. A ella no le afectó bastante, ya que cuando estaba con sus padres ellos no le hacían mucho caso y también porque en verdad ella se había criado mejor en casa de sus abuelos que en su propia casa. Después de eso, su abuelo cayó enfermo, pero como no tenían el suficiente dinero para pagar el hospital la chica intento buscar un trabajo, ella ya tenía la edad para poder trabajar, pero en todos los sitios le decían o que era demasiado joven o que no tenía experiencia y que sólo contrataban a los que tienen más experiencia. Probó muchas veces pero siempre le decían lo mismo, hasta que un día unos señores se le acercaron preguntándole si les podía ayudar, la chica les ayudó, los señores que era muy buena haciendo tareas y que si le gustaría trabajar como una sirvienta para el palacio real, ella al principio se quedó en shock pensando  en si aceptar o no; al final ella aceptó el trabajo. Allí se termina la historia de la chica.

Mari: Aída, ¿puedo saber quién es la chica de la historia?

Aída: Solo tienes que usar esa cabeza que tienes para saber quién es la del relato.

Mari: Pero es que ahora no quiero pensar, dímelooo porfaaa~

Aída: Ya es hora de dormir, así que en vez de decir cosas que sabes que no vas a conseguir, por qué no te vas a dormir?

Mari: Vale, hasta mañana Aída.

Aída: Hasta mañana

Hola, perdón por tardar tanto en actualizar, pero es que la verdad no se me ocurría nada, así que me podéis perdonar?

Sé que este capítulo es corto pero como he dicho antes no se me ocurría nada.

De quién pensás que era la historia de Aída?