Capítulo 4: Malas consecuencias

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Abrí los ojos con la esperanza de sentir los rayos de sol cegarme por completo, pero fué extraño. Ningún rayo de sol llegó a mi habitación.

–Qué rayos... 

Me restregué los ojos y mi corazón se detuvo.

ESTA

NO

ES

MI

HABITACIÓN

Me giré, pensando en conseguirme a Chandler o a Caroline.. Pero otro chico yacía a mi lado. Me acomodé despacito mirándolo fijamente. No hacía falta levantarle el pelo de los ojos para saber quién es.

Es obvio que es Louis Tomlinson. Traté de recordar lo que había pasado ayer, cerrando los ojos fuertemente y recargandome en la pared. Abrí los ojos de golpe y desperté a Louis.

–Hmm.. –Frunció el ceño.

–¡Louis! ¡Despierta!

–Qué..

Me tapé el pecho con las sábanas mientras seguía moviéndolo. Me senté a horcajadas sobre él no sin antes colocarme mi ropa interior. 

–¡L-Louis! 

–¡QUE MIER--! –Abrió los ojos, confundido– Vaya, no es correcto que me despiertes de esta forma, pequeña. –Su voz fué tan atractiva que me hizo sonrojar.

–Louis, ya basta.. ¡Me acosté contigo!

–Lo sé. Eleanor también se acostó con otro.

–¿Qué? 

–Todo el mundo se acostó con su pareja de baile. –Dijo con voz ronca.

–Oh por Dios.

Espera.

¿Quiere decir que Chandler... Se acostó con la novia de Niall? ¿Y que Niall se acostó con Caroline? ¿Y Taylor con Luke? ¿Sam con .. con ..? 

–Esto no puede estar pasando.. ¿Cómo ocurrió todo esto, sin darme cuenta?

–Alcohol, bebé.

–¡¿TOMÉ CERVEZA?!

–Sip. –Canturreó, sonriendo y volteándose para mirarme. Su cara era perfecta incluso en la mañana– Estuviste genial

¿Qué? Osea.. Vamos a razonar:

Fuí a la fiesta de Valery.

Bailé con Louis Tomlinson.

Me besé con Louis Tomlinson.

Acabé en la cama de Louis Tomlinson.

¿Y AHORA ME DICE QUE ESTUVE GENIAL? ¿NO SE DA CUENTA DE QUE NO ES APROPIADO?

–T-Tú.. ¿Tambien?

Mentí, pues no recuerdo nada de la noche anterior.

***

Louis me prestó su bañera, cuando una Eleanor despeinada entró a la casa, acto seguido se realizó una discusión.

Dios. Parecía la típica prostituta. Rimel corrido hacía abajo, labios hinchados, sombra de ojos en todas partes y cabello despeinado. Y no solo eso. Tenía manchas de color morado en mi cuello, o mejor conocidas cómo "Mordiscos de amor": La puerta del baño se abrió de golpe, haciéndome respingar.

–TÚ...

Asentí temerosa.

–¿Leigh Smith? O.. Olvídalo.. Pensé que eras una prostituta quién se acostó con Boo.

–N-No..

–Está bien. Todo el mundo cometió errores. Ahora, sal de la casa...

Qué bipolar. Me sequé y salí de la bañera, colocándome mi ropa de ayer. Agarré mi celular, que por una extraña razón estaba metido en mi zapato.

"Chandler dónde estás?? Omg estoy en casa de Louis, no me digas que estás en la de María"

Me sorprendió que me empezó a llamar al instante que vió mi mensaje.

–Si. Estoy en casa de ella. No te puedo mentir, algo pasó entre nosotros la noche anterior, pero yo no quería fu-- –Lo interrumpi–

–Tranquilo. Me pasó lo mismo con Louis..

–Dios, esto es demasiado. –Colgó–

Me rastrillé el pelo y sin despedirme de Louis, agarré el primer taxi que vi. El taxista encendió la radio, ya sabía cual sería el tema de hoy.

"Estrellas invitadas a la fiesta de una fan de One Direction. ¡Cámaras grabaron momento especial de Harry Styles confesándose a una fan! Se rumoreaba que Harry tenía una relación con Leigh Smith, pero esta grabación dice todo lo contrario. [grabación de Harry dándo su discurso]"

–Puede apagar la radio por favor. –Dije fría, antes de que sacaran el tema de Louis y yo, y las otras celebridades.

–Manejar la radio cuesta más, señorita.

–Me da igual. Tráguese 50$. –Le lancé los billetes y me bajé del taxi, arrastrando mis tacones a lo largo de la acera–

Muchos dirán: "¿¿Dios mío, Leigh Anne Smith Stanford, cómo te atreves a desperdiciar 50$??"

No es por presumir, pero 50$ dólares no es nada para mí.

Llegué a casa y me encontré con Chandler sin camisa y el pelo sudado.

–Fuiste tan salvaje ayer, o qué. –Dije celosa–

–Mírate a ti. –Me pasó un plato de metal, para verme–

–No estoy tan despeinada. –Suspire– Por lo menos me duché.

–Olvídemos el tema. Ni Caroline ni Alexander han llegado. Les he mandado un mensaje, y aún están dormidos.

–Esto es un desastre. Niall te cortará la cabeza.

–Pensé lo mismo. –Dijo riéndose–

–No da risa, Chandler Riggs. Todo lo que ha pasado ayer fué un error, ¿Entiendes? –Tragué saliva– Son las malas consecuencias del alcohol.

Me dirigí a la nevera y busqué una alita de pollo.

–Chandler... –Lo fulminé–

–¿Sí?

–¿Te comiste mi alita?

–Sip. 

–¿Y los nachos?

–También.

–¿Dónde está el pan?

–En el sofá.

–¿Y que hace en el sofá? –Me crucé de brazos, al ver a Chandler viendo un partido de football–

–No lo sé.

Hombres. Quién los entiende.

| Mi Corazón De Melocotón 2 |Chandler Riggs FanFic|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora