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—Termínalo.

Miyeon hacia media hora que había llegado a la casa de YuQi, hasta el momento solo le había comentado la pelea que había tenido con Eunwoo. — ¿Tú crees? — YuQi asintió ansiosa, Eunwoo nunca le había agradado, pero no sentía el derecho de decir algo, pues eran los gustos de su mejor amiga a fin de cuentas. — ¿Y algo más te paso hoy? — Pregunto sin ninguna disimulación, la que tanto le había pedido Minnie, YuQi se sentía como cupido, un cupido muy genial.

Miyeon se sobresaltó al escuchar su pregunta y algo en ella la hizo sospechar viendo su sonrisa un poco traviesa. Nerviosamente y con un poco de pena, desvió su mirada y apretó en sus manos el edredón de la cama. — Bese a Minnie.

YuQi soplo con fuerza. — Oh oh oh ¿Cómo paso? — Fingió que estaba sorprendida, aunque era bastante obvio para Miyeon. — ¿Has hablado con Minnie?

Volteo a mirarla y Yuqi inflo sus mejillas y miro hacia otro lado, había fallado como detective. — No te diré. — Miyeon comenzó a golpearla con una almohada rogándole que le dijera, YuQi riendo decidió hacerlo.

— Minnie estaba feliz, muy feliz, pero... — Su cara risueña poco a poco fue cambiando. — Ella no siente la confianza de acercarse a ti por qué pues... tú tienes novio ¿no?

— Ella tiene novia...— intento excusarse, Miyeon se sentía feliz y triste, feliz porque Minnie había sido feliz, pero triste al saber que estaría arruinando la relación extraña que tenían.

— Termino con ella, entonces, tu termina con Eunwoo y todo cuadra.

Miyeon negó. — Fue solo un beso...

— ¿Entonces por qué te sonrojas y te pones nerviosa cuando menciono a Minnie?

Miyeon agacho su vista, YuQi tenía razón, no había sido solo un beso si su corazón lato tan rápido y después, aun con la pelea con Eunwoo, ella no paraba de sonreír. Ni de pensar en lo que Minnie hubiera sentido, ni de lo que hubiera podido suceder si ella no hubiera huido. ¿Por qué siempre huyo y no enfrento las cosas? Entonces realmente sintió ganas de mandar todo a la mierda con Eunwoo y su familia, y de atreverse por primera vez a lo incierto, a lo que su corazón quería estrellarse sin pensar en las consecuencias.

— ¿Yo podría... gustarle a Minnie, YuQi?

YuQi la miro, insegura de decirle todo lo que había pasado, de decirle que Minnie estaba enamorada de ella desde la primera vez que la vio, que siempre la había protegido desde lejos, pero era incapaz de decir lo que sentía, pero si alguien no lo decía esas dos nunca tendrían el valor de estar juntas ni de ser felices.

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El golpe en su ojo derecho no fue obstáculo para responder con el doble de fuerza en el estómago y la nariz del mayor, haría todo lo que estuviera a su alcance para proteger a Miyeon, aun si eso significaba que ella lo odiara, o que todos en la universidad después de esto la tratarían como basura. — Maldita pe- Minnie ignoro todos los insultos de Eunwoo. Ambos estaban cansados, pero Minnie aún tenía la suficiente fuerza de echarlo del jardín de su casa, no sabía cómo diablos había conseguido su dirección, pero al menos le había demostrado que si se metía con ella, le iba a responder de la misma forma. Lo que le angustiaba era que si se había atrevido de pegarle a ella, ¿Qué le habrá hecho a Miyeon?.

— No estarás con ella. — Un hilo de sangre resbalaba por su labio, estaba enojado, pero a Minnie poco le importaba lo que aquel patán pensara o dijera sobre ella.

— Eres un enorme pedazo de mierda.

Minnie le escupió en la cara, y él le tenía suficientes ganas de seguir golpeándola, pero Minnie ya había acabado con su fuerza. La menor entro a su casa, y apenas dos segundos mintiéndose en pie se dejó caer en el sofá, tenía el labio reventado, Eunwoo le había halado el cabello por lo que su cuero cabelludo estaba herido. Estaba temblando de miedo, y comenzó a llorar, no tenía nadie ahora a quien contarle, ni alguien que la curara o la defendiera, Minnie siempre había estado tan sola y marginada de su familia y amigos, y ahora solamente creía que merecía la paliza que le habían dado, y lo único que al menos la animaba seguir viviendo era el recuerdo de Miyeon, y el sabor de sus dulces labios.

Minnie cerro sus ojos, con sus lágrimas calientes saliendo con fuerza de sus ojos, queriendo no volver a abrirlos, e imagino a su linda Miyeon.


Minnie ya salvo a Miyeon ¿ Quién podrá salvar a Minnie?






Guardaespaldas / Miyeon & Minnie /Donde viven las historias. Descúbrelo ahora