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Leer descripción de la historia para entender este universo.

Derek

Humano, de nuevo. De solo pensarlo quería lanzar un suspiro. No tiene idea de cómo había sucedido.  Luego de su completa transformación a lobo el y Braeden se habían mudado juntos. Unas semanas después de haber estado viviendo juntos sus poderes desaparecieron por completo, ni Deaton poseía explicación pero no creían que era algo sobrenatural lo que había causado eso.

Para Derek ser humano era algo completamente extraño, aunque ha de decir que no nuevo, dado a su reciente evolución había aprendido a defenderse cuando sus poderes habían disminuido, por suerte al menos le quedaba su defensa, porque  sin los poderes quedaba indefenso.

Con Braeden estaban bien, ella había sido un fuerte apoyo para él, aunque algunas veces lo había dejado de lado, ella lo hacía sabiendo que la manada lo protegería, había empezado a creer que podría tener una oportunidad de formar una familia con ella. Aunque era algo remoto, lamentablemente la vida que poseían era muy peligrosa para una familia.

Habiendo estado fuera de Beacon Hills con ella por unas semanas, tratando de ocultarle a la manada su condición de humano, decidió que era tiempo de volver. Volver a su vida.

Stiles

Malia me había dejado. No me sentía tan mal como extrañamente hubiese imaginado.

Estaba acostumbrado a llevarme decepciones, por mucho tiempo esa decepción fue Lydia.

Últimamente mi atracción se veía algo distorsionada, ya habían pasado semanas de mi ruptura con Malia y la manada estaba más calmada con la reciente ida de Derek, y tuve tiempo para poder vivir mi adolescencia normal. Descubriendo que me atraían  los chicos, cosa que  al principio traté negar rotundamente, hasta que ahora en este preciso momento me encontraba en el bar gay de Beacon Hills. Acababa de ser rechazado, de nuevo. Parecía que el ciclo no se acababa.

Me encontraba en la barra tomando de mi trago sin alcohol que mañana era lunes y tenía escuela. En lo que le concernía a mi padre yo estaba en lo de Scott, y claro este último no tenía idea de dónde estaba porque no le había dicho a nadie de mi reciente salida del clóset.  Un chico que parecía bastante mayor a mí se me acercó y me sacó de mis pensamientos, hábilmente manipuló una silla y se sentó a mi lado, me miró y me preguntó

-Mala noche, ¿no?- Su voz era muy  suave, tenía un extraño acento Inglés, o escocés, no sabría decirlo. Su cabello era de un color naranja oscuro, no estaba muy largo ni muy corto tenia unos lindos rizos, sus ojos eran los más azules que había visto nunca en un humano, era realmente atractivo.

-Se, tuve una suerte pésima

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-Se, tuve una suerte pésima.

-Eres nuevo por aquí ¿no?, no te había visto venir.- El extraño parecía bastante amable así que no dude en seguir la conversación.

-Si, hace poco que salí del clóset...

-Entiendo, ¿Cómo te llamas?

-Stiles, Stiles Stilinski.

-Que nombre extraño.

-Es una larga historia.

La noche siguió calmada, descubrí que el nombre del extraño era James, estuvimos hablando casi toda la noche juntos, y compartimos algún que otro beso. Aún era muy tímido con todo esto de la bisexualidad, apenas había tenido sexo por primera vez hace relativamente poco, menos tenía idea de relacionarme con el mismo sexo.

Intercambiamos números con James y prometimos que hablaríamos.

Se hicieron las 6 y me di cuenta que no había considerado a donde volver luego de que estuviera en el boliche, era mi primera vez allí. Simplemente con un poco de dinero que me quedaba decidí ir a desayunar y esperar que se hiciera la hora de ir al colegio.  Le mande un mensaje a Scott pidiéndole que me lleve un cuaderno y algo para escribir diciéndole que le explicaría en la escuela.

Scott era muy despistado y olvidó preguntarme por qué le había pedido eso, lo que me había ahorrado mentirle.

La escuela fue lenta, la hora del almuerzo más. Desde que Derek se había ido la manada estaba más distante, muy relajado había estado todo, nos merecíamos un descanso. Y yo me había retraído, haciendo que almorzará en el baño.

Las horas pasaron lentas pero por fin llegó la hora de ir a casa. Papá me recibió con ánimos y al cabo de un rato se fue a trabajar, pasaría la noche en el trabajo. 

Alrededor de las 12 de la noche, luego de que había terminado mi tarea y había estado jugando videojuegos, recibí un mensaje de Scott urgente que nos viésemos toda la manada en el loft de Derek.

Derek había vuelto.

Humano - SterekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora