7.

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Derek

Flashback

Eran unos meses después del accidente. Me encontraba bastante mareado y a punto de perder el conocimiento. Lo único que veía era el lavamanos ensangrentado. Me dolía la cabeza.  Aún así, no me arrepentía. Necesitaba dejar fluir el dolor mental de alguna u otra manera, al fin y al cabo seria solo esa vez. ¿Verdad?

Pero no. No fue simplemente esa vez. Lamentablemente, fue algo que continuó durante algunos años. Hasta que lo encontré inmaduro y simplemente dejé de hacerlo. Me perdone. Pude liberar lo del incendio de mi mente. O eso quería creer.

Pero tenía que dejar de pensar en el pasado, ahora vivía en el presente. Y en este momento Stiles necesitaba de alguien. E increíblemente el decidió ser ese alguien. Seguía perteneciendo a su manada, y con su reciente condición humana sabía que una herida dolía mucho más de lo que el recordaba siendo lobo cuando paso por la autolesión.

Subió los escalones despacio y dudosamente abrió la puerta de la habitación de Stiles. El chico estaba dormido plácidamente. Derek sonrió aliviado, le alegraba saber que estaba durmiendo, pero lo que necesitaba decirle era algo que tenía que ser en ese momento. Le toque suavemente la mejilla para llamarle la atención y casi pega un grito a no ser por la hora que era. Claramente estaba confundido.

-Stiles, necesito que hablemos de algo.

Stiles bruscamente cambio su expresión a una mucho más seria. Levanto una ceja cosa que me recordó muchísimo a mi y me dio cierta ternura.

-Mira, no sé cómo decirte esto pero, te entiendo. -claramente Stiles cambió a una cara de confusión ante las palabras de Derek. -He visto la sangre y lo he imaginado. Antes de que digas algo, te quiero hacer entender que yo he pasado por esto, hace un tiempo atrás, y que lo que sea por lo que estés pasando, no es tu culpa ¿si? No lo es, sin importar lo que parezca. No lo mereces.

Hablaba y en realidad era algo que a mi me gustaría escuchar.

Hable como por diez minutos y no se en qué momento Stiles rompió en llanto. Nunca fui una persona de mucho tacto pero fue como si lo necesitara. Y lo abracé. Nos envolvimos en un abrazo desesperado. Nos necesitábamos. Realmente supe en la mirada de Stiles que el me entendía.

Y sentí que por un segundo todo estaba bien. Y entendí que eso era la amistad. Tenia un amigo en Stiles.

Después de ese abrazo entendí que era momento de irme. Pero Stiles me detuvo, me pidió si podía quedarme hasta que se durmiera. Y lo siguiente que hice no se si fue por la alta hora que era o simplemente porque quise, pero me acosté con él.  La cama era un poco estrecha pero aún así se podía dormir de a dos. Simplemente fue eso, espalda con espalda descansamos. Y hace mucho que no dormía tan bien.

Stiles

Me desperté como a las 7 de la mañana pensando en que lo de anoche había sido completamente un sueño, aunque la realidad choco contra mi como una puerta cuando note que estaba abrazando a Derek por la espalda en mi cama. Entonces eso significaba que Derek había descubierto lo de las heridas, y se había abierto conmigo. Como nadie. Ni el mismo Scott se habia dado cuenta nunca. Realmente las oportunidades de formar una amistad con Derek estaban aumentando. Aunque si Derek se enteraba que lo estaba abrazando probablemente me descartaría la garganta, así que inmediatamente deje de hacerlo.  Por suerte mi padre llegaría hasta tarde porque si no la situación hubiese sido muy incómoda.

Me levanté de la cama lentamente y sin hacer ruido baje las escaleras. No sabía si Derek tomaba café así que hice un té también por las dudas. No le puse azúcar para que él les pusiera. Estaba hecho un manojo de nervios.

Subi lentamente las escaleras haciendo malabares con las bebidas intentando no caerme en el proceso.

Lo que conseguí hacer con poca ventaja porque casi varias veces me caí.

Derek estaba apenas despertándose y recién ahí noté que se había quitado la camiseta. No podría decir en qué momento.

Derek ya estaba despierto y me miraba un tanto confundido.

-Te hice un té y un café porque realmente no sabía que tomaría o si desayunaría. - Estaba por empezar a balbucear pero Derek me frenó en seco

-Gracias Stiles, tomaría lo que sea pero realmente me tengo que ir, ha pasado algo y tengo que irme.

-¿Todo bien?

Derek simplemente asintió y comenzó a vestirse. Rápidamente me fui y Derek en pocos minutos también. Nuevamente estaba la casa vacía, conmigo.

Por alguna razón las palabras de Derek me sonaron a una excusa. Y yo realmente pensé que empezábamos a ser amigos.

Humano - SterekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora