Salvia Patens

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-Si mamá, estoy bien, retomaré todo lo demás la siguiente semana y prometo dejar de comer comida instantánea, cuídate. -colgué-

Traté de buscarle el mejor lugar para la "Adiantum capillus" según su etiqueta, seguro era un nombre ficticio pero al menos era linda y según la vendedora "necesita un ambiente con humedad alta, temperaturas suaves y sombra", la dejé al lado de la ventana, los atardeceres también pueden hacerle compañía, seria egoístas sino compartiese al menos eso.

*

Desperté tarde, otra vez, tenía una "cita" con mi cheque y luego con el banco, esto a 40 minutos de distancia. Incluso tuve que correr en las gradas eléctricas, me paré frente al ascensor

-Mierda, abreeee
Como si presionar todos los botones al mismo tiempo hiciera que se abriese más rápido, estupido.

Abrió

Pálido, pero con mejillas rojas... con mirada pura, limpia, azul, mirada perteneciente al cielo, su cabello degradado parecía derramar cerezos en invierno.

Me vio

Un segundo, dos, tres, cuatro, cinco...

¿Salió corriendo?

Qué extraño, qué extraño, qué extraño... llegué media hora tarde, el cielo hoy estaba azul, a- z- u- l- sin nubes, sonreí...
Cinco segundos, cinco... ojalá fuesen diez.

*

-Hey, te extrañé, pasaste todas las vacaciones fuera, te convertiste en un fantasma, justo como esas historias paranormales que pasan en el canal...

-Estoy bien, gracias por preguntar. -dije tomando mis cosas de la mesa en donde me encontraba-

-Sigues usando lentes en invierno jajaja, ya se acerca la primera y seguro ya no te ves tan extrañ...

-Tengo clase de literatura, te veo luego. -me alejé y sacudí mi mano para despedirme-

Voy a intentar dar mi mejor impresión, hoy dejé colgado a mi verdadero yo en el armario.

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