Cap. 16

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Bueno, y hoy sí que llegamos al fin de esta tierna historia, espero os haya gustado o que almenos lo hayáis pasado bien y os haya entretenido un ratito.

Saludos,

Leila

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Un aullido cruzó la noche, lo reconoció enseguida, era Bakio y se lanzaba a la carga, quiso levantarse pero no pudo, quería acudir a la batalla pero no podía, no sabía cuando ni como habían llegado al monasterio del bosque, pero los gruñidos, aullidos y gemidos eran aún más terroríficos y desgarradores que aquel lugar, le dolía el corazón, se le partía como si una garra lo abriese de punta a punta, oía como la lucha se recrudecía fuera, los gemidos lastimeros, el dolor, el olor a sangre… se estaba volviendo loca, el cuerpo se le convulsionó en un espasmo de dolor mientras se arrastraba fuera del circulo de transición clavando las uñas en la tierra y apretando los dientes, oyó un grito de Wolf, pero lo que más la aterró fue un aullido entrecortado de muerte, era Sina, un grito que se había negado a salir de su garganta salió desgarrador imponiendo silencio en mitad de la carnicería, asomo la cabeza aún débil y trémula por el promontorio de la cueva y pudo ver los cuerpos ensangrentados que teñían el suelo de rojo, era un campo plagado de cuerpos inmóviles sacudidos por espasmos de dolor y olor a piel chamuscada, los que estaban en pie estaban heridos, otros incluso renqueaban pero presentaban batalla. Ese espectáculo fue lo que más la hirió, ese dolor fue el peor de todos, lloraba y su aullido se elevo por todo el cielo hasta que todos se detuvieron. Vio el cuerpo se Sina sobre una roca respirando con dificultad y Koen delante suyo fuera de sí con las fauces abiertas frente a tres enormes lobos negros. Wolf estaba contra la pared, Bakio encabezaba el círculo más fuerte que nunca envuelto en una inquietante luz rojiza. Gruño y se puso en pie sobre las cuatro patas que apenas la sujetaban y saltó al centro, Ako a quien ella había liberado en su huida de la cueva apartó bruscamente a un lobo joven que se había lanzado sobre ella estrellándolo contra una roca, le dio las gracias y le lanzó una mirada asesina al lobo que gimoteaba y que cayó ante el gruñido y los dientes de Yaizha asustado ya que imponente se abría paso hasta el centro de la batalla, mientras Wolf restallaba los dientes amenazador protegiendo a su hembra. Cada ojo estaba fijo en ella. Aulló nuevamente a la luna y un rayo cayó, este descendió directamente sobre Yaizha que quedo suspendida en el aire envuelta en unas ondeantes llamas azules con estrellas argénteas, una explosión de luz los cegó a todos. Cuando la oscuridad volvió a reinar y recuperaron la vista Yaizha estaba sobre una enorme roca, los miró a todos con sus fieros ojos brillantes, gruño y sentándose elegantemente observo su marca y les hablo a todos y cada uno directamente al corazón, sin palabras, sólo con el antiguo lenguaje de los lobos.

- Abandonad ahora mismo esta lucha absurda. Todos somos hermanos, miraros los unos  a los otros ¿Qué os hace distintos o mejores? ¡Nada! ¿Cuántos más han de morir? Abrir los ojos y pensad… buscar las respuestas en vuestro interior, el instinto no se puede acallar y no engaña como hizo la innombrable. Ya va siendo hora de romper con el pasado y crear nuestra propia historia, el presente es nuestro y podemos crear un futuro mejor. Todos habéis oído la llamada, su voz, el canto de la Luna, nuestra madre que llora… - saltó de la roca y anduvo por la explanada mirando a cada lobo con el que se cruzaba acallando cualquier respuesta agresiva que pudiera quedar – Nadie perderá sus poderes, ni nadie hará daño a otro, podemos vivir como fue al principio como una familia. ¿Recuerda alguien por que empezó todo?  La vida esta para vivirla y no para andar con tonterías de estas, ya hemos sufrido demasiado. Somos la misma sangre, la misma magia, yo soy la prueba, él es la prueba y todos lo sabéis, no hagáis más oídos sordos ni cerréis los ojos….

Poco a poco todos se fueron postrando ante ella, pero una loba rubia salto a por ella y Yaizha sin ningún miramiento y con una agilidad y una velocidad envidiable la cogió de la yugular y apretó los dientes aprisionándola contra el suelo y poniéndole una pata en el lomo le dio la oportunidad de que se sometiera, la loba gimoteaba pero seguía sacudiéndose para quitarse a Yaizha de encima dándole un golpe con la pata cerca del ojo pero la otra no la soltó sino que la sacudió y la lanzo contra un saliente donde se estrello, la loba, más pequeña de tamaño que ella se levantó tambaleante pese al chasquido de sus huesos y volvió a caer. Wolf la observo boquiabierto, no le había dado ni tiempo de intervenir…

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⏰ Última actualización: Nov 13, 2012 ⏰

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