Capítulo 3

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EDITADO
—¡Aria! —gritó Liam a mi espalda— ¡Aria!

—¿Qué?

—Mentiría si no te dijera que estoy orgulloso de ti —dijo pasando un brazo sobre mis hombros—.Eso ha sido realmente impresionante ... y sexy...

Puse los ojos en blanco y lo aparté suavemente de mí.

—Venga por favor, no me empieces Liam.

—¿Bueno y ahora qué? —preguntó mirándome mientras caminábamos.

—¿A que te refieres?

—Venga, contigo siempre hay algo más —dijo con su habitual sonrisa traviesa—.Cuéntame tus planes. Les romperemos la cara juntos a esos imbéciles.

—No te voy a decir mis planes —reí—.  Ya los descubrirás por ti mismo.

—¿Por qué?

—Porque si no no es divertido —respondí con una mueca socarrona, y él me empujó amistosamente del hombro.

—Eres una arrogante.

—Y tú un creído —respondí burlona.

—Pesada.

—Imbécil.

—Loca.

—¡Cállate! —le espeté empujándolo a un lado entre risas.

El timbre sonó y todos los alumnos salieron de sus clases.

—Hey —saludó Hugo cuando se acercó con Leo y Dante detrás— ¿qué tal os fue?

—Pues nada, Aria casi estrangula a Marco, lo de siempre —respondió con una sonrisa.

—¿De verdad? —preguntó Irina apareciendo de la nada con Olena a su lado, quien miraba el móvil enfadada— Me siento orgullosa de ti.

Hizo como que se quitaba las lágrimas de los ojos mientras me abrazaba. Fruncí el ceño por el exceso de apoyo que estaba recibiendo aquel día.

—¿Pero qué os pasa a todos hoy? —pregunté riendo— ¿Se ha muerto alguien y no me he enterado?

—Que queremos ver la clásica venganza de Aria Boucher —Dante me dedicó una sonrisa encantadora.

—¿Qué les vas a hacer? —preguntó Liam divertido— ¿les vamos a ahogar bajo el agua? ¿o vamos a obligarlos a comer asfalto?

Hugo lo miró alzando una ceja.

—¿No te parece suficiente lo del golpe de Marco?

—O... ¡espera, espera! —alzó un dedo para que no nos fuéramos— ¿puedo usarlos como sirvientes durante todo un mes? Porfi.

Los demás reímos y Olena lanzó un bufido de frustración.

—¡Pero será gilipollas ! —exclamó gritando furiosa.

—¿Se puede saber que te pasa? —preguntó Irina—. Llevas todo el maldito día mirando tu móvil y lanzando insultos a el aire.

—El cabrón de Nate ha subido una foto con una tía besándole la mejilla, y cuando le contesto no me responde o me deja en visto —gruñó frustrada— ¿Para esto quiero yo novio?

—Olena, ya te dijimos que ese tío solo te quiere para liarse —dije, y me lanzó una mirada furiosa e indignada.

—No, eso es mentira, solo lo decís porque vosotras no tenéis.

—Nosotros solo te lo decimos para que te mentalices —defendió Irina—. Cuanto antes te des cuenta, mejor.

Leo alzó una ceja.

Ahora síDonde viven las historias. Descúbrelo ahora