No puedo resistirlo más, el secreto no puedo seguirlo guardando, siento que me quema la piel, que me oprime el pecho y me nubla el juicio, siento que no debo seguirlo callando, que debo gritarlo, contarlo, plasmarlo, declararlo...declararme tuya, declararme de ti.
Me declaro admiradora de ti, deseosa de ti ambiciosa de ti, me declaro completa e irremediablemente enamorada de ti, enamorada de tu esencia que provoca alegría en mí, enamorada del alma que en tus ojos se exhibe, me declaro enamorada de tu cuerpo, de tu rostro, de tu ser, total y perdidamente enamorada de ti.
Sí, perdidamente, me pierdo en la melodía de tu voz, me pierdo en tu risa que llena mi corazón de dicha, en tus brazos que han acogido mi cuerpo, en tus labios que me matan sin haberlos probado aún, perdida en todos los recuerdos que me llevan a ti, que me hacen sentir que estoy contigo, que tú estás aquí.
Me declaro enferma de ti, sí, muy enferma de ti, pero he adorado esta enfermedad como el bien más hermoso que me ha sido otorgado, amo esta enfermedad tanto como te amo a ti, esta enfermedad que hace que mi ritmo cardiaco se acelere cuando estás presente, que me produce amnesia de todo hasta que solo te recuerdo a ti, que nubla mi mirada al grado que mis ojos solo pueden apreciarte a ti, que por las noches me despierta en una ansiedad terrible por la distancia que me impide dormir a tu lado, esta enfermedad que al igual que mis pensamientos y acciones me llevan a ti.
Me declaro conquistada por ti, no logro concretar el momento, el día o la hora exacta en que te adueñaste de mi mente y de mi corazón, quizá fue la sucesión de momentos que pasamos juntos, o las risas que compartimos, los gritos que dimos, la complicidad que nos caracteriza o la confianza que nos unió, tal vez estaba predestinada a ti, tal vez te quise desde el primer instante pero no lo vi.
Me declaro loca por ti, sí, total y completamente loca por ti, en mi mente surgen una y mil historias de mi amor correspondido, fantasías que revelaron lo que siento por ti, pesadillas que demostraron que no podría vivir sin ti, estoy loca por ti, porque he creado un sinfín de escenas para confesar lo que siento sin tener certeza de lo que tu sientes por mí.
Me declaro esclava de ti, porque estoy sujeta a tu merced aún a costa de mí, porque no logro enojarme contigo porque cada nueva de tu presencia me hace sonreír, porque no me importa lo que hiciste, lo que haces o lo que harás, deseo firmemente permanecer junto a tí, porque hago hasta lo imposible por sólo un momento a tu lado, esclava de ti porque de la totalidad de mi ser te has adueñado.
Me declaro celosa de ti, ¡cuántas veces he anhelado que seas sólo para mí! Que el motivo de tus visitas sea poder estar conmigo, que no tengas ojos para nadie, excepto para mí, que sea yo la afortunada que llame tus pensamientos, que sea yo quien desate y cumpla todos tus deseos, que sea yo a quien más amas como me pasa contigo, que tus labios me reclamen como te reclaman mis latidos.
Me declaro ambiciosa de ti, de tu amor, ambiciosa a cada instante de un beso de tu boca, de un te amo de tu voz, de un abrazo de tus brazos, de una caricia de tus manos, ambiciono tu amor porque sé que sabré cuidarlo, porque ha de volverse mi tesoro más preciado y porque ha despertado en mí una sed insaciable de ti, un deseo hirviente y desesperado de ser correspondida por ti.
Me declaro también temerosa de ti, de que no sientas lo que siento, de que todo esto sean solo cuentos, de que no veas en mí a la mujer que he últimamente he intentado mostrarte, temo que lo que yo creí un indicio no resulten más que ilusiones, alucinaciones producto de la necesidad de sentirme amada por ti, temo que lo que yo creo, efímero resulte, miedo de perderte, de perderme tu amor, temo que no me ames o que lo hayas dejado de hacer, temo que me olvides, que me excluyas de tu vida, que hayas cambiado, que me dejes de lado, que te alejes, que no me busques, temo no poder volver a verte, a tocarte, temo equivocarme y perderte por confesar mi sentir, pero temo también que no puedas ver lo que siento y acabemos perdiéndonos el uno al otro, temo por éste amor que he guardado en secreto, temo que sea tan secreto que no logres verlo o que justo por eso te apartes de mí lado. Temo amarte porque no sé si sea lo correcto, pero amo amarte porque eres el hombre perfecto.
Dime ¿cómo hago para que me ames? Sería capaz de descender los siete círculos del infierno por uno sólo de tus besos, dime ¿cómo hacer para enamorarte? Y si me amas ya, dilo de una vez, acaba con esta incertidumbre que me tiene pendiendo de un hilo y abre las puertas de mi dicha, dime que me amas y desbordaré mi amor por ti, porque te amo ¿ y cómo no amarte si fuiste y eres todo lo que yo quiero incluso cuando aún no lo sabía? ¿Cómo no amarte si siempre has sido tú? Era irremediable perderme en ti, pero no quiero remediarlo, me declaro también perdida en ti, me perdí con el paso de los años y quiero permanecer así, lo único que deseo es que me ames tanto como yo a ti y que podamos confesarlo mirándonos a los ojos y no únicamente en sueños, pensamientos, versos y papel tal y como lo he hecho yo aquí.
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De mí para ti
Roman d'amourEscritos románticos sin contexto, cartas de amor, desamor y confesiones para aquellos que se identifiquen