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Mayuzumi observaba de reojo el sobre abierto en la mesa pensativo. Su tableta había quedado abandonada y de vez en cuando suspiraba sin más. Oyó la puerta principal y antes de poder reaccionar, un par de brazos lo envolvían desde atrás. Sonrió sin darse cuenta.

--Ya estoy aquí --saludó Akashi besando la mejilla del peliplata amorosamente --. ¿Qué tal tus fotos? ¿Has acabado de editarlas?

Mayuzumi asintió al tiempo que volteaba a ver a su novio y le pedía un beso en los labios, el cual le fue concedido gustosamente.

--¿Qué es esto? --preguntó el pelirrojo al separarse y notar el sobre color crema con detalles dorados en la mesa --. ¿Uh? ¿Quién se casa?

--Mi primo --contestó Chihiro --. ¿Quieres ir?

--Claro --sonrió un segundo antes de abrir los ojos con sorpresa --. ¡Aguarda, no tengo qué ponerme!

Y así al día siguiente ambos se hallaban recorriendo el centro comercial en busca de la ropa adecuada para el evento. Mayuzumi insistió en que no hacía falta, que tenían trajes y ropa formal para utilizar. Y Akashi lo fulminó con la mirada alegando que existían fotos en las que llevaba esas prendas, por lo tanto sería terrible repetir.

--Haz lo que quieras --puso los ojos en blanco antes de ser arrastrado dentro de una tienda.

Un empleado se ofreció a ayudarlos y estuvieron alrededor de media hora dando vueltas escogiendo y probándose ropa. Mayuzumi fue más rápido para escoger, pues realmente le daba igual, sin embargo no fue la misma historia con su pequeño novio. Quien, por cierto, parecía a punto de asesinar al pobre joven que les ayudaba.

--¿Está todo bien? --susurró Chihiro y Seijūrõ chasqueó la lengua.

--Te ha estado mirando demasiado, ¿debería besarte para mostrarle que ya estás apartado? ¿O apretarte el trasero sería suficiente?

Chihiro retuvo una carcajada y le revolvió el cabello a su novio celoso.

--Llámame cariño, amor, cielo o algo así y ya --suspiró antes de acercarse a su oído y murmurar --. Lo otro podemos hacerlo después.

Dicho y hecho, Akashi Seijūrõ lo llamó por todos los apodos cursis que existen enfrente del empleado y al parecer funcionó. La búsqueda de trajes siguió otros veinte minutos en los que la tarea de Chihiro era opinar sobre todo lo que Seijūrõ se probara para terminar de converserlo.

--Sei, tengo hambre --se quejó.

--Creo que me gusta más el otro --dijo desde el probador ignorando el comentario --. Dime qué piensas de éste y si no te gusta me llevaré el otro.

--Bien, que sea rápido.

Seijūrõ salió del probador por fin y Chihiro no logró mantener la boca cerrada. Tampoco sus ojos. Sintió su corazón saltarse un latido y se preguntó por un momento si su novio había sido reemplazado por un ángel. Podía ver esa luz brillante a su alrededor que aparecía siempre que recordaba lo enamorado que estaba de él.

Llevaba una camisa blanca con un saco blanco también, moño negro al igual que unas delgadas líneas que decoraban las solapas del saco. Le vio rascar su nuca y sonreír tímidamente.

Oh, pensó que moriría allí mismo.

¿Ese chico tan hermoso era su novio? Infiernos si no se sentía inmensamente afortunado. Siempre pensó que Akashi Seijūrõ era demasiado para alguien como él, por eso dudó muchas veces antes de siquiera pensar en confesar sus sentimientos. Sin embargo, tres años pasaron y fueron de los mejores en su vida hasta el momento.

Quería vivir muchos más del mismo modo.

A su lado.

Lo amaba. Muchísimo.

--No te gusta ¿cierto? --torció los labios y suspiró --. Está bien, tampoco me..-

Chihiro avanzó hasta él y tomó sus manos firmemente. Akashi lo observó extrañado pues su mirada era blanda en extremo, dulce y llena de amor. El corazón del pelirrojo se enterneció mucho. Chihiro mordió su labio inferior, conectó su mirada con la de Seijūrõ y, sin apartarla, se hincó en una rodilla en el suelo.

Seijūrõ tardó cuatro segundos en comprender lo que estaba ocurriendo. Cubrió su boca abriendo los ojos a más no poder.

No podía creerlo.

--Seijūrõ, no tienes idea de las múltiples veces que pronuncié estas palabras frente a ti --comenzó a decir Mayuzumi con voz temblorosa --, siendo interrumpido o no escuchado, incluso ignorado. Pero está bien. Quizás no era el momento correcto, quizás estuve muy ansioso o demasiado enamorado de ti --rió entre dientes. Los ojos rojizos de Akashi se llenaron de lágrimas --. Puedo sentirlo ahora, puedo verlo, que este es el momento --sacó un anillo de su bolsillo y se lo enseñó al pelirrojo --. Akashi Seijūrõ, escúchame bien por favor. Estoy harto de tener que decir esto, así que puedes hacerte una idea de lo mucho que te amo, ya que sería capaz de repetirlas cuanto haga falta --respiró profundo y sonrió --. Cásate conmigo, Sei.

Seijūrõ era un completo desastre de llanto y risas incontrolables. Sentía que estaba a punto de explotar de tantos sentimientos embargandolo. Se arrojó a los brazos de Chihiro sin dejar de exclamar su tan ansiada respuesta.

--¡Sí, sí, sí!

Fin.

💐💎💐

y por fin se nos casan!!

no me pregunten qué fue esta idea, solo se me hizo divertido que Chihiro sufriese pidiendole matrimonio a Sei♡

me gustó escribir esto y espero que a ustedes leerlo!

el extra será OBVIAMENTE su boda💕

gracias por leer💓

SweetAngelIntheDark

marry meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora