Un amor infinito

¡Corre!

En ese momento mis manos empezaron a sudar mi corazón a latir más fuerte y no me salían palabras de mi boca solo asentí con la cabeza, él me cargo y me abrazo fuerte.

  —Jamás pensé que me aceptarías, me gustas mucho desde esa vez que te vi regresando de la clase de cocina, yo te guiñe el ojo... ¿lo recuerdas?

Y entonces me doy cuenta de que esto había pasado mucho antes tanto que lo había pasado por alto, al final es verdad lo que dicen: «el amor llega y por más que lo evites terminará atrapándote».

Jael me acompaño hasta la esquina de mi casa, porque mis padres aún no se enteraban que tenía enamorado ya que la idea no les gustaba mucho.

Pasaban los días Jael siguió siendo detallista y cariñoso en mi casa reinaba la paz, pero un día le llegaron rumores a mi mamá que me habían visto con un chico al salir de colegio yo le negaba pues tenía miedo de que sé enteré así que lo pasamos por alto.

Llego el día de mi cumpleaños fui a su casa, él me regalo un peluche con nuestra canción. Ese día la pase con sus padres y su hermana, me habían comprado una torta fue un detalle lindo de su parte y me sentía cada vez más enamorada.

Al mes me llego a mi correo un mensaje de una persona 'desconocida'...

«Hola, sé que eres la enamorada de Jael sinceramente me da pena decirte esto, pero es mejor que te alejes de él, te va a hacer mucho daño y después no digas que no te lo advertí».

Ese día me salieron lágrimas que no pensé que él me las provocaría.

Al día siguiente nos encontramos en el parque y le mostré el mensaje que me habían mandado, se alteró, se hizo la víctima y el ofendido que se inventó que era un chico que me estaba cortejando, jamás lo había visto así, ese día terminó conmigo yo solo me quede desconcertada...

  —A mí me llega un mensaje diciendo que me aleje de ti y tú lo relacionas con otra cosa y encima terminas conmigo. ¿Por qué haces eso?
  —Camila es mejor que nos alejemos, tengo muchas cosas en la cabeza por favor dame tiempo.
  —¡No, Jael! no te lo daré, dime por qué terminas conmigo, dame una buena razón y te dejaré pero así no, tenemos planes a futuro porque me haces esto.

Hubo un silencio que duró segundos...

  —Tienes razón, perdóname estaba confundido.—abrazándome.
  —¿Qué te hice?—respondí con lágrimas en los ojos.
  —Camila lo siento no me quiero alejar de ti por favor sigamos juntos, me puse celoso y rabioso no entiendo porque te mandan un mensaje así.
  —Yo soy la que debería ponerse así no tú—correspondiendo a su abrazo.

Llego el mes de diciembre empezábamos a discutir más seguido, siempre era su celo e inseguridad, pero al final se disculpaba y me prometía que no volvería a pasar.
Llegó el día de mi promoción y me pido que sea su pareja de baile y yo le pedí que él fuera el mío, así que decidió pedirle permiso a mis padres yo estaba con el corazón en la boca cuando llegamos a mi casa mi padre lo recibió mientras mi mamá lo miraba de arriba abajo después de un palabreo mi papá acepto, pero jamás lo presente como mi enamorado pues mi mamá estaba en contra de eso tan solo imaginar que será mi pareja de promoción le hervía la sangre.

Primero fue su fiesta y luego fue la mía nos divertimos mucho en esos días.
Acabamos la secundaria y ya estábamos entrando a otra etapa que era la universidad, Jael no tenía claro su futuro y yo quería ser doctora no nos veíamos muy seguido, pero aprovechaba los días en que mi mamá salia para ir a su casa a verlo.

Llegó el día de San Valentín ese día desperté y lo primero que recibí fue un mensaje de él...

«Camila quiero darme un tiempo espero que me entiendas»

Fue un mensaje tan frío y cruel justo hoy porque me tenía que hacer esto, que hice mal no entendía...

Fui a buscar a su hermana que trabajaba en un internet cerca a su casa, hablo con ella, aparte de ser su cuñada era mi amiga.

  —Rosario que gusto encontrarte quería preguntarte por Jael el día de hoy recibí este mensaje, sabes sí está en su casa quisiera conversar con él porque no me responde mis llamadas.
  —Camila no se nada de él, pero voy a llamarlo siempre para en casa.
  —Gracias—respondí con algo de alivio.

Agarra su celular lo llama, pero no responde vuelve a llamar y nada...

  —Camila, me comunique con mi mamá, me dice que Jael está viniendo al internet.—sentándose en la computadora.

Mientras esperaba en el internet Rosario colocó una canción de "Jesse y Joy - Corre", es como que ella quería que escuche la letra que tan bien describía a su hermano y se me quedó grabada una parte que dice: «libreto de siempre tan predecible»

Transcurren varios minutos llega Jael ingresa, me ve y hace como si no me hubiera visto trató de acercarme a él, pero retrocede y se retira en eso voy detrás de él y su hermana me detiene.

  —Espera Camila voy a hablar con él vamos juntas a mi casa, me esperas afuera por favor.
  —Gracias por lo que haces la verdad es que me siento muy avergonzada.
  —No te preocupes aparte de ser su hermana tú eres mi amiga.—respondió.

Esperé afuera de su casa ella entró y a los minutos salé y me dice...

  —Camila si lo tienes que dejar déjalo, mi hermano es un tonto no vale la pena estar llorando por él, no te preocupes ya va a salir conversen bien las cosas y si hay solución dense otra oportunidad esto depende de él y de ti.
  —Gracias.—me despido con la cara apenada.

A los minutos sale él...

  —Camila, ¿qué haces acá? Pedí que me des tiempo, porque no respetas mi decisión.
  —Creo que ya pasamos este momento, puedes decirme que hice para recibir este trato.
  —Puedes retirarte por favor.—responde con frialdad.
  —No me voy a ir, hace mucho tiempo te dije que me digas cual fue el motivo y ahora te lo vuelvo a pedir dame una verdadera razón para alejarme de tu lado y quizá así entienda.
  —Camila, me he dado cuenta de que no tengo un futuro, no sé que voy a hacer, es probable que me vaya a otra ciudad a trabajar y lo mejor es cortar nuestra relación porque no funcionaría.
  —¿Me hablas en serio?... Jael yo tengo planeado continuar contigo y no quiero dejarte.
  —¿No te importa que quiera dejarte especialmente en esta fecha en particular?—respondió.
  —Te quiero y continuaremos juntos.

Al final terminamos de solucionarlo, pero cuando llegué a mi casa me di cuenta de que tiene muchos problemas es demasiado inseguro y quizá no sea la primera vez que vuelva a suceder.