Narrador omnisciente
María está acabando el grado medio de marketing y comercio. Pronto tendrá que hacer los exámenes y se encuentra en la casa de campo de su familia estudiando sola, pero su atención no está en sus libros de texto, sino que está en cierto amigo del cual se ha enamorado. Él se llama Dylan. Se conocen desde pequeños ya que siempre fueron al mismo colegio hasta la ESO.
De repente, le llega un whatsapp de su madre:
- ¿Vas a venir a cenar princesa?
- No lo sé mamá...
- Te has distraído otra vez pensando en él, ¿verdad?
- He pensado en decirle lo que siento, pero hoy en cambio de clase me lo he encontrado besándose con ella... Sé que me va a rechazar, pero todavía no me olvido el beso que me dio.
- Ay princesa, no sé que decirte, pero sabes que no quiero que sufras...
- Lo sé mamá. Gracias por estar ahí para escucharme. Te dejo que voy a recoger mis cosas y voy para casa.
- De nada, cariño. Te quiero y no tardes.
- Yo también te quiero.
María se dirigió a su casa dónde le esperaban sus padres y su hermana Marta de 6 años.
Cenaron riéndose de las ocurrencias y preguntas de Marta. Después de la cena María recibió una llamada:
- ¿Sí?
- Hola María, ¿nos podemos ver en la plaza del Ayuntamiento en diez minutos?
- Ok, nos vemos en 10 minutos ahí.
Fin de la llamada
- Mamá, ya vengo, que voy a correr para despejar un poco...
- /susurrando/ ¿La clave?
- /susurrando/ Sí la clave...
- Vale, vete tranquila que tu padre está trabajando, yo le aviso que vas a correr.
- ¡Hasta luego!
- ¡Hasta luego princesa!
En la plaza del Ayuntamiento de su pequeña ciudad Dylan la esperaba un tanto nervioso... Él estaba enamorado de Abril. Ese mismo día en el cambio de clases ella se había acercado a él y le había dado un beso. Dylan vio a María darse la vuelta e irse. Hace un mes, él sin querer le había besado. Digamos que fue un acto reflejo, ya que María se había tropezado. Para él ese beso no significó nada, pero sin embargo tenía miedo de que acabase con la hermosa amistad que tenía con María. Gracias a Dios, al día siguiente cuando se vieron ella actuó como si nada hubiese pasado. Pero cuando vio la cara de tristeza de María cuando le vio besándose con Abril, pensó que el beso había significado algo para ella. Por eso había quedado con ella. Necesitaba aclararlo.
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Juntos hasta el final.
RomanceUna mentira es capaz de separar a Dylan y a María. Cuando Dylan descubra la verdad, María está en Hawaii habiendo acabado la Honolulu Police Training Academy y trabajando en la unidad especial 5-0 con su familia de acogida.