Capitulo 6.

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Jaebeom.

Cuando Youngjae se fue, me quedé a solas con Jamie. No me sentía cómodo teniéndola enfrente, pero tenía que hablar con ella. Me sentía muy molesto por cómo había tratado de negarse a cuidar a Coco cuando Youngjae estuvo cuidando un año entero a su estúpido perro sin pedir nada a cambio.

-¿Qué quieres, Jaebeom? -dijo Jamie sentándose en su sillón. Yo me quedé parado.

-Tienes que cuidar a Coco. No lo entiendes, Jamie. No puede dejarla sola.

-Podría haber llamado a Woojung -dijo ella mientras se cruzaba de brazos. Woojung es el hermano de Youngjae-, o decirle a uno de sus amigos.

-Nos avisaron ayer. Woojung no tiene tiempo de tomar un avión solo porque una maldita niña resentida no quiere cuidar a una perra. No la vas a cuidar toda la vida, Jamie.

Ella se levantó de dónde estaba.

-Ojito esa boca conmigo, Lim Jaebeom.

-No me provoques, Jamie. Que no se te olvide que yo sé lo que pasó realmente entre Youngjae y tú. ¿Acaso te olvidas qué yo estuve ahí para ver cómo engañabas a Youngjae? Y luego te hiciste la mosquita muerta...

-Cállate -dijo pero no le hice caso.

-Usaste a Youngjae para tener más seguidores, ¿sabes qué no le caías bien a ninguna de nuestras fans? Podría ir ahora mismo afuera y contarle todo a Youngjae.

-¿No le contaste? -ella frunció el ceño.

-No. ¿Darle otra razón para que sepa que no eras la indicada para él? Lo descubrió él solito. Pero créeme, Jamie, que puedo sacar mi celular y publicar todo lo que le has hecho, la manera en que lo usaste... no le va a gustar a nadie, menos a las fans.

-A mí no me amenaces, Jaebeom.

-No es una amenaza, Jamie -dije negando la cabeza-, es un aviso.

Ella me miro por unos minutos. Esperaba haber funcionado de algo. Aún no me podía quitar de la cabeza cuando la vi besando a otro que no era mi mejor amigo, sentía que estaba traicionando a Youngjae al no decirle, pero días después cortaron, así que ya mucho no me había preocupado.

Jamie, sin decir nada, regresó con Youngjae. Quién simplemente tenía las cejas arqueadas cuando entró y me miro. Sus ojos tenían una chispa de miedo. Pero le sonreí, dándole a entender que no importaba como salieran las cosas, yo estaría con él.

-Decidí que sí -dijo Jamie-, mañana puedes traerme a Coco y a Dalkyeom, Youngjae.

Vi como Youngjae suspiraba aliviado mientras asentía. Yo quería salir de ahí de inmediato.

-Gracias -dijo Youngjae-, ahora nos vamos.

Jamie aceptó con la cabeza y nos acompaño hasta la puerta. No nos dijo adiós, menos mal.

El sonido de la ciudad me hizo sentir en paz, quizás ya había salido de esa cárcel que era la casa de Jamie. Suspire de alivio.

-¿Qué pasó ahí adentro? -La voz de Youngjae resonó en mis oídos.

Lo mire de reojo antes de caminar hacía la parada de un bus y empezar a hablar.

-No le hice nada, si es lo que te preocupa -contesté.

Quería seguir avanzando pero sentí como alguien me tiraba del brazo. Gire para ver quién era y vi la mano de Youngjae deteniéndome y sus ojos mirando directamente a los míos.

-Ella no me preocupa, Jaebeom -dijo-. ¿No te das cuenta qué eres tú el que me importa? Ella me da igual, Beom. Simplemente quiero saber si te dijo algo que te haya hecho sentir mal, y vuelvo ahora mismo para que sepa que con mi mejor amigo no se debe meter.

Sonreí, puse mi mano en la suya y ladee la cabeza.

-No dijo nada, Jae. Simplemente la convencí de que aceptara. No tienes porque defenderme, Youngjae.

-No vuelvas a decir eso, nos defendemos mutuamente, ¿recuerdas? -me sonrió antes de darme un apretón de mano antes de soltarme-. Vamos, te invito a comer a mi casa.

No pude contestar porque llegó el bus, llevándonos a la casa de Youngjae.

wonderland [2jae] × libro #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora