Seonghwa

278 45 20
                                    

Tu plan de citarnos a todos fue un poco difícil, lamentablemente seré al último que veas. Querías resolver el misterio para quedar como un héroe~ pero al final formas parte de los que perdieron aquí.

Sé cuánto odias eso, no te gustaba realmente ser el último, harías cualquier cosa por mejorar tu posición, tanto que no dudaste ni un momento en tomar el lugar de Hongjoong apenas tuviste la oportunidad. Pero esto no se trata de él, se trata de mí.

La verdad no te conocía mucho, era uno de esos tantos que ignoraba todo lo que me hacían los demás y sólo buscabas un beneficio de eso, cuando me robaban el dinero que me enviaban mis padres, tu pedias una parte, pero no querías que te involucraran en el asunto ni en ningún acto problemático. Siempre querías quedar bien, pero sin tener que formar parte de nada, limpias tus manos, evitabas que cualquier profesor te pusiera en vergüenza y me sorprende que nadie haya intentado antes lo que yo conseguí hacerte.

Entonces ¿Qué te hizo querer meterte donde no te llamaban ahora? Ah quizás porque guarde en tu casillero el cuchillo que use con Wooyoung y Hongjoong y no sabías como cubrir tu trasero ante tal evidencia. Siempre fuiste un cobarde que intimidaba a los demás y les quitaba sus cosas, pero por lo visto no eres capaz de resolver por ti mismo cuando te meten en el problema. Te note algo nervioso ¿buscabas tu inocencia atrapando al verdadero culpable? Es una lástima que resultaras el atrapado.

Tu cara de sorpresa al escuchar mi confesión, escuchar cada detalle de todo lo sucedido, como los engañe, los lleve a su muerte y me vengue uno por uno de ellos, de las cosas que me habían hecho, de las desgracias que me habían pasado y los traumas que ahora tenía. Te di lujos de detalles, nunca me había esforzado en ser tan detallista en toda mi corta vida, pero debo agradecerte porque todo el relato saliendo de mi boca resultó placentero para mis oídos, aunque no tanto para los tuyos.

Me amenazaste en decirle todo a las autoridades y una risa sincera nació desde el fondo de mi corazón, me daba risa pensar que creías que saldrías con vida de allí, no había elaborado nada para una persona que intentaba darse tanta importancia y que me importaba una mierda, pero si tenía definido que una vez atravesé aquella puerta, tendría que sumarte a mi lista.

En esta ocasión el pisapapeles fue un artículo más que útil, los había visto en muchas ocasiones y cuestionado su uso, los conocía muy bien, hubo veces que termine golpeado con una de esas cosas, y ahora comprobaba luego de partirte la cabeza con uno de ellos, que tenían un uso excelente, pero no para lo que estaban destinados. Tres golpes, el primero había sido suficiente para dejarte inconsciente luego de nuestra acalorada lucha, Después dos más y se escuchó el crujiente sonido de tu cráneo partiéndose bajo el peso macizo del metal y la sangre no tardó en brotar con locura buscando escaparse.

La cereza del postre fue dejarte colgando y meciéndote suavemente, era un digno detalle para alguien que siempre lo quiso todo sin mucho esfuerzo, ahora serías el centro de atención.

Una advertencia clara para quien quisiera meterse de nuevo en mi camino...

Venganza ○Ateez○Donde viven las historias. Descúbrelo ahora