Caminos Invertidos

Epilogo

Eran las 5 de la mañana cuando Lauren despertó, sintiendo un fuerte dolor en la mano, se levantó despacio para no despertar a Camila quien dormía profundamente Luego de tomarse un calmante, salió de la habitación y se dirigió a la habitación del pequeño Alejandro, al acercarse a su cunita, lo vio despierto, le puso la mano en la frente y comprobó que la fiebre no habia regresado. El bebé de inmediato le sonrió

Lauren: Que pasa mi amor, ¿tampoco puedes domir?

Alejandro: Tatatata. (mientras le extendia los brazos)

Lauren: A ver, venga para acá.

Haciendo un esfuerzo, debido a su mano vendada, la pintora logró con cuidado levantarlo en brazos, El pequeño seguia sonriéndole lo cual hizo que la pintora lo besara con temura. Salió de la habitación y se dirigió a la sala, acto seguido se echó sobre el sofá con el bebé sobre su pecho, Inmediatamente Alejandro comenzó con sus manitas a cogerle el rostro, haciendo reir a la pintora.

Lauren: (Haciendo como si fuera a comerle las manos) Ahora le atrapo vas a ver.

Alejandro reia con el juego que su madre mientras trataba de taparle la boca.

Lauren: ¿Sabes que chiquitin?, sabes tú todo lo que yo te quiero? si...lo sabes verdad?

Estuvieron jugando un buen rato hasta que finalmente tanto la pintora como el bebé se quedaron dormidos Eran las siete de la mañana cuando Camila se levantó, al no ver a Lauren junto a ella, se dirigió a la habitación del pequeño y al no encontrarlo ahí se encaminó hacia la sala, encontrando a Alejandro dormido sobre la pintora, mientras esta lo abrazaba contra ella La psicóloga los quedó mirando con una sonrisa, ante la ternura que le despertaba aquella escena Luego se acercó a ellos y agachándose depositó un suave beso en los labios de la pintora la cual al sentir el contacto abrió los ojos.

Lauren: (mirando hacia su pecho) Nos quedamos dormidos

Camila: Si ya veo ¿y tu mano?

Lauren: Me dolia hace un rato, pero me tomé una pastilla y ya estoy bien.

Camila: (viendo que Alejandro se despertaba y comenzaba a sobarse los ojos) uy creo que el gordito este pronto pedirá su leche.

Y efectivamente, tan pronto el bebé descubrió a Camila, comenzó a levantarse apoyando sus manitas sobre Lauren y a moverse como loco para que la psicóloga lo alzara

Camila: Ya mi amor, ¿qué pasa? Tiene hambre mi chiquitin.

Dicho esto, Camila lo alzó en brazos y le dio un beso de buenos dias, mientras Lauren se incorporaba en el sofá.

Lauren: ¿A que hora le toca su medicamento?

Camila: Ahora, me lo traes a la habitación asi se lo doy mientras le doy el pecho, se me hace que esas gotas no son nada agradables.

Lauren: esta bien (poniéndose de pie) igual me gustaria que la doctora lo revisara Camz, ella es su pediatra, no sé me quedaria más tranquila.

Camila: Ahora la llamo, antes de ime a trabajar y le cuento todo a ver si cree necesario que lo llevemos o no ¿si?

Lauren: perfecto

Los dias pasaban y Camila notaba a Lauren callada y algo triste. Habia intentado hablar con ella pero la pintora continuaba evadiéndola, alegando que solo estaba algo cansada.

El viernes por la noche, Camila dejó a Andrea con Shawn, como solia hacerlo cada fin de semana, al llegar a casa y luego de cerciorarse que Alejandro dormia tranquilo en su cuna, fue en busca de Lauren a quién finalmente halló en su estudio fumando un cigarro sentada sobre el alfeizar de la ventana. La psicóloga se le acercó y le dio un beso en la mejilla para luego por detrás, meter sus manos entre los brazos de Lauren y quedar asi abrazada a ella Lauren giró un poco el rostro para devolverle el beso y volvió a su posición normal