capitulo 53

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Cαριтυlσ Cincuenta&Tres

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Me miro en el espejo por última vez, miro el collar que cuelga en mi cuello y sonrío inevitablemente al pensar en Justin y el día de ayer. Si acaso llegue tener alguna duda sobre él o sobre como hubiera sido mi vida si nunca me hubiese fijado en él, se disiparon. Porque ayer él me hizo sentir… ni quiera sé que palabras ponerles. Sólo sé que me encanta poder estar con él tan bien de nuevo, creo que lo que paso con el bebe nos unió mucho.


- ¿Estas lista?- me pregunta él asomando a la puerta, yo asiento y salgo con el de casa
- No puedo creer que el Cobra haya echo esto por ti- digo mirando su moto
- Si, él mismo me la entrego anoche, me dijo que era un regalo por lo bien que estaba trabajando- dice admirando su moto, recuerdo que cuando él y yo tuvimos una de nuestras mayores crisis y yo me había ido de casa, fue cuando tuvo ese problema con Martín que iba tras suyo y su huida perdió su moto. Lo recuerdo porque estuvo lloriqueando por ella unas horas.
- Me alegro, así no lloras más- me burlo
- ¡Yo no llore!- se defiende y yo río- Aún así no me puedo fiar de él ni de nadie- dice suspirando- ¿te llevo ya?
- Si, vamos- él me pasa un casco y ambos subimos en la moto


Cuando él me deja en la puerta de la casa de Marta ya estan ella y Mónica allí, hemos quedado esta tarde para pasar una “tarde de chicas“. Me bajo de la moto y cuando estoy a punto de despedirme de Justin con un beso llega un coche que da un frenazo justo en frente nuestra, yo pego un grito del susto y Justin me rodea rápidamente con sus brazos y escondo la cara en el hueco de su cuello.


- Pere ¿Qué coño te pasa a ti?- escucho gritar a Justin, miro por el rabillo del ojo y es Daniel que baja junto a Lorena
- Lo siento tío- se excusa Daniel, sabe de ante mano que no le conviene cabrear a Justin que siempre parece dispuesto a golpearlo a pesar de que todo ya entre nosotros esta claro
- Casi nos atropellas- le reclamo
- Fue sin querer, de verdad que lo siento, es que todavía no se bien manejar este maldito coche, lo siento en serio- dice haciendo una mueca- ¿estas bien?
- Si, princesita, los dos estamos bien- responde Justin mirándole mal, Daniel rueda los ojos 
- No te metas con él, Justin- le defiende Lorena frunciendo el ceño y ahora es Justin quien rueda los ojos, cuando lo veo a punto de replicar hago que me mire y le reprimo entre dientes
- Arg, vale, disculpado. Pero da clases- le dice burlón
- Lo que digas, Bieber- dice y al final terminan sonriendo, me apuesto a que al final se terminan cayendo bien y sonrío al imaginármelo.


Me despido de Justin con un beso en los labios y lo veo acelerar a toda velocidad con su moto y rezo porque no atropelle a alguien o se haga daño él con tanta adrenalina acumulada subido en esa monstruosidad de moto.


- Yo quiero un novio también- se queja Marta al ver también lo dulce que se despiden Lorena y Daniel
- Bueno, Roberto anda libre- le digo para picarla y ella rueda los ojos
- No me nombres a ese capullo
- Esta bien- digo riendo
- ¿A dónde vamos chicas? Tengo ganas de ligarme a unos buenorros, en Sol siempre esta cada rubio…- dice como no, Mónica
- Yo ya tengo un tío bueno en casa- digo pícara y río


Vamos pasando el resto de la tarde entre comentarios pervertidos de Mónica, los pucheros de Marta por querer un novio “tan dulce como Daniel” y “tan sexy y protector como Justin” y los comentarios de Lorena o los míos para ponerlas celosas, pero sin maldad. Todo muy bien. Hasta que veo aparecer por la esquina del parque a Ana con un chico.


Ella al verme abre los ojos de forma desorbitada y susurra algo al chico, seguramente de mi porque este me mira, más bien me fulmina con la mirada, yo frunzo el ceño y siento la rabia llegar a mi, ella me vio la cara de estúpida y encima hizo que casi me matara por esas escaleras.

- ___* si quieres nos vamos- habla Mónica
- ¿Irnos?- se me adelanta Lorena- ¡claro que no! A esa perra quería yo ver, le voy a romper la cara como no me dio la oportunidad de hacerlo el otro día- dice enfadada
- No, Lorena- le digo seria
- ¿Cómo que no? Lore tiene razón, hay que darle lo suyo- dice Marta y Mónica asiente

Y así... el tiburón se enamoro del pecesito 2º temporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora